Martes 9 Ramadán 1445 - 19 Marzo 2024
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Quiere algo que lo guíe en sus asuntos religiosos y mundanos.

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Fecha de publicación : 18-01-2011

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Pregunta

¿Pueden aconsejarnos sobre algo que nos guíe en nuestros asuntos religiosos y mundanos?

Texto de la respuesta

Alabado sea Dios.

Alabado sea Allah

Se le hizo la siguiente pregunta al Sheik al-Islam Ibn Taymiyah: 

Le pido al Sheij y al Imán, el seguidor de los salaf (primeras generaciones) y el líder de las generaciones posteriores, el hombre más sabio que he conocido en oriente y occidente, Taqiy al-Din Abu’l-Abbaas Ahmad Ibn Taymiyah, que me aconseje algo que me guíe en mis asuntos religiosos y mundanos. 

Él (Allah tenga piedad de él) le respondió de la siguiente manera: 

Con respecto a los consejos, no conozco ningún consejo más beneficioso que el consejo de Allah y Su Mensajero, para los que lo comprenden y los siguen: 

“Hemos ordenado a quienes recibieron el Libro antes que vosotros, y a vosotros también temer a Allah”. [al-Nisaa’ 4:131]  

El Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) le aconsejó a Mu’aadh, cuando lo envió a Yemen: “Oh Mu’aadh, ten temor de Allah en cualquier sitio que te encuentres, y luego de una mala acción haz una buena, y ésta la limpiará, y trata a la gente amablemente". El Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) tenía gran admiración por Mu’aadh (que Allah esté complacido con él) y le dijo: “Oh, Mu’aadh, te amo por Allah”. Y solía dejarlo montar detrás de él. Se narró que él era el más sabio de su ummah con respecto a lo halal y lo haram, que sería resucitado (en el Día de la Resurrección) un paso más adelante que los expertos. Una de sus virtudes es que el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) lo envió a Yemen para transmitir su mensaje, como da’iyah, mufti y juzgar a la gente de Yemen. Y solía compararlo con Ibraahim (la paz descienda sobre él), e Ibraahim fue el líder de la humanidad. 

Ibn Mas’ud (que Allah esté complacido con él) solía decir que Mu’aadh era una ummah (un líder que tiene todas las buenas cualidades), obediente de Allah, y no era un mushrikin (cf. al-Nahl 16:120), comparándolo con Ibraahim (la paz descienda sobre él). 

Además, el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) le dio este consejo, por eso debemos considerarlo conciso y comprehensivo. Es así para quien lo entiende, aunque se trata de una interpretación de un consejo que se encuentra en el Corán. 

Con respecto a su carácter conciso, es así porque todas las personas tienen dos deberes: su deber hacia Allah y su deber hacia los demás. Es inevitable que en ocasiones no cumplirá con sus obligaciones, ya sea por no hacer algo que debe hacer o por hacer algo que está prohibido. Entonces el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Has de temer a Allah dondequiera que estés”. Esta frase es completa. Las palabras “dondequiera que estés” se refieren a la necesidad de tener taqwa en secreto y abiertamente. Luego dijo: “y luego de una mala acción, realiza una buena acción, y así la eliminarás”. Pues cuando el médico ve al paciente y cae en la cuenta de que ha ingerido algo dañino, le dirá que coma algo que es bueno para él. El pecado es algo inevitable para el hombre, con lo cual el hombre astuto es aquel que hace buenas acciones todo el tiempo para así eliminar los malos actos. 

En las palabras del hadiz, la palabra sayi’ah (mala acción) se menciona primero, si bien es el objeto, porque el objetivo aquí es eliminar las malas acciones, no enfatizar las buenas. 

Las buenas acciones deben tener características similares a las malas acciones, pues eso será más eficaz a la hora de eliminarlas. Las consecuencias del pecado se pueden borrar de muchas maneras. La primera de ellas es el arrepentimiento, y la segunda es la búsqueda del perdón (istighfaar) con arrepentimiento, pues Allah lo puede perdonar en respuesta a su du’aa si no se ha arrepentido. Pero si se combinan el arrepentimiento y la búsqueda de perdón, es perfecto. La tercera es hacer buenas acciones que expían los pecados. 

Respecto a los actos de expiación, como por ejemplo los establecidos para quien tiene relaciones sexuales durante el día en Ramadán, el que se divorcia de su esposa a través de dihaar (una forma yaahili de divorcio en el cual el hombre le dice a su esposa “Eres para mí como la espalda de mi madre”), el que comete actos prohibidos durante el Hayy o que no cumple con algunas de sus obligaciones y el que caza durante el Hayy, hay cuatro tipos de expiación: Ofrecer un sacrificio, liberar un esclavo, dar en caridad y ayunar. En relación a los tipos de expiación que no están especificados, como le dijo Hudhayfah a ‘Umar: La fitnah que enfrenta un hombre (es decir, sus falencias en relación a las obligaciones religiosas) debido a su familia, riqueza e hijos puede ser expiada por medio de la oración, el ayuno, la caridad y fomentar lo bueno y prohibir lo malo. Esto lo indican el Qur’an y los hadices sahih que hablan de la expiación por medio de las cinco plegarias diarias, el Yumu’ah, el ayuno, el Hayy y todas las acciones respecto a las cuales se dice que quien diga tal o cual cosa o haga tal o cual cosa será perdonado, o se perdonarán sus pecados previos. Hay muchos reportes como este en los libros de Sunan, especialmente aquellos libros que han sido escritos acerca de acciones virtuosas. 

Cabe destacar que prestarle atención a dichos asuntos es algo que el hombre necesita en gran medida. Cuando una persona llega a la pubertad, especialmente en estos tiempos y en épocas que se asemejan al tiempo de yaahiliyyah de tantas maneras, la persona que crece rodeada de personas sabias y religiosas se puede ver afectada por asuntos de yaahiliyyah en cierta medida, ¿qué pasa entonces con los demás? 

En al-Sahihain ha sido narrado en el hadiz de Abu Sa’id (que Allah esté complacido con él) que el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Seguirás el camino de los que pasaron antes paso a paso, de tal manera que aún si entraran a la madriguera de un lagarto, entrarás allí también”. Ellos dijeron: “Oh Mensajero de Allah, ¿te refieres a los judíos y cristianos?”. Él respondió: “¿A quién más?”. Este reporte está confirmado por el siguiente versículo coránico (interpretación del significado): 

“Así también Allah castigó a quienes os precedieron. Éstos eran más fuertes que vosotros, tenían más riquezas y más hijos, y disfrutaron de lo que Allah les había concedido. Ahora vosotros disfrutáis vuestra suerte y os sumergís en la iniquidad como ellos lo hicieron. Sus obras no serán tenidas en cuenta en esta vida ni en la otra, y serán los perdedores.” [al-Tawbah 9:69]

Y existen aún más reportes que así lo corroboran, tanto en los hadices sahih como hasan. Esto es algo que afecta a los de la élite que dicen estar comprometidos religiosamente, como dijo más de uno de los salaf, incluyendo a Ibn ‘Uyayanah. Pues muchas de las características de los judíos son cosas que también sufren muchos de los que dicen ser sabios, y muchas de las características de los cristianos que también sufren algunos de los que dicen ser comprometidos con la religión -  como queda claro a cualquiera que entienda la religión que Allah envió con Muhammad (la paz y las bendiciones de Allah sean con él), y luego intenta entender a las personas a la luz del Islam. 

Si este es el caso, entonces aquel cuyo corazón Allah abre al Islam seguirá la luz de su Señor, pues estaba muerto cuando Allah lo revivió y le dio la luz para caminar por la humanidad. Entonces inevitablemente notará las características de la yaahiliyyah y el camino de los dos pueblos con quienes Allah está molesto y que han perdido el camino, hablamos de los judíos y cristianos, y verá que también sufre de algo similar. 

Lo más útil que la élite y la gente común pueden saber es lo que limpiará sus almas de estos malos efectos, y eso se trata de seguir malas y buenas acciones. Las buenas acciones son aquellas que Allah ha recomendado en palabras del último Profeta, ya sean acciones, actitudes o características. Algunas de las cosas que eliminan las consecuencias del pecado son los desastres o calamidades que expían el pecado. Las mismas pueden ser distintos tipos de ansiedad, angustia o daño a la riqueza, honor, el propio cuerpo, y demás, excepto aquello que no es generado por las propias acciones de la persona. 

Cuando el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) había establecido los derechos de Allah respecto a hacer buenas acciones e ignorar las malas, dijo luego: “y trata a las personas amablemente”. Esto se refiere a nuestra obligación hacia los demás. Una buena actitud respecto a otras personas se basa en mantener contacto con aquel que te saluda con el salaam en la calle, honrarlo, hacer du’aa por él, orar y pedir perdón para él, alabarlo y visitarlo; darle conocimiento, beneficios y dinero al que carece de todo ello; perdonar al que te ha hecho daño en relación a la sangre, la riqueza o el honor. Algunos de estos asuntos son waayib (obligatorios) y otros son mustahabb (recomendados). 

Y acerca de “Eres de una naturaleza y moral grandiosas” [al-Qalam 68:4] con el que Allah describió a Muhammad (la paz y las bendiciones de Allah sean con él), esta es la religión que incluye todo lo que Allah ha establecido. De allí que Muyaahid dijo que él era la interpretación del Qur’an, como dijo ‘Aa’ishah (que Allah esté complacido con ella): “Su carácter era el Qur’an”. La esencia de su carácter era que no dudaba en hacer con mucha voluntad y un corazón abierto lo que Allah ama. Todo esto se puede resumir en la palabra taqwa (temor de Allah), que incluye hacer todo lo que Allah ha establecido, ya sea waayib (obligatorio) o mustahabb (recomendado), y evitar todo lo que Él ha prohibido, ya sea haraam (prohibido) o makruh (no recomendado). Esto combina tanto las obligaciones hacia Allah como hacia otras personas. Pero como taqwa puede significar en ocasiones tener miedo del castigo lo cual nos hace abstenernos de las cosas prohibidas, fue explicado en el hadiz de Mu’aadh. De igual manera, en el hadiz de Abu Hurairah (que Allah esté complacido con él) que fue narrado y clasificado como sahih por al-Tirmidhi, “dijeron: ‘Oh Mensajero de Allah, ¿qué es lo que más comúnmente ingresa gente al Paraíso?’ Él dijo: ‘El temor de Allah (taqwa) y una buena actitud’. También se dijo: ‘¿Y qué es lo que más comúnmente lleva a la gente al Infierno?’ Él dijo: ‘Las dos cosas huecas: La boca y las partes privadas’”. 

En al-Sahih fue narrado de ‘Abd-Allah ibn ‘Umar (que Allah esté complacido con él) que el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “El más perfecto de los devotos es el que tiene la mejor actitud”. Entonces, conectó la perfección de la fe a la buena actitud. Es bien sabido que la fe es el temor de Allah (taqwa), pero este no es el sitio para discutir los principios básicos y los detalles menores como ese. Es el todo de la religión, pero la fuente de bondad es la devoción sincera del siervo a su Señor, adorarlo solo a Él y buscar solamente Su ayuda, como dice en los siguientes versículos coránicos (interpretación del significado):

“Sólo a Ti adoramos y sólo de Ti imploramos amparo” [al-Faatihah 1:5]  

“Allah conoce lo oculto de los cielos y de la Tierra, y a Él retornan todos los asuntos [y os juzgará por ellos]. Adoradle pues, y encomendaos a Él; y sabed que vuestro Señor está bien atento de lo que hacéis.” [Hud 11:123]  

“a Él me encomiendo y ante Él me arrepiento.” [Hud 11:88]  

“Pedid, pues, a Allah el sustento, adoradle y agradecedle. Y por cierto que ante Él compareceréis.” [al-‘Ankabut 29:17]

Por lo tanto el esclavo abandona toda esperanza de beneficiarse de los seres creados y no lucha por ellos, sino que se concentra en su Señor, adorando y pidiéndole a Él para satisfacer todas sus necesidades, temores, etc., y luchando por todo aquello que Él ama.

Origen: por el shéij al-Islam Ibn Taimíyah (que Allah tenga misericordia de él)