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Yo quisiera saber si el pus secretado por una infección invalida el ayuno, si la cantidad de sangre que sale de la herida es pequeña.
Alabado sea Dios.
El ayuno del creyente no se ve afectado por la sangre que salga de una herida, esto no invalida su ayuno. Más bien, la diferencia de opinión entre los eruditos tenía que ver con la técnica practicada en la antigüedad y conocida como las “tazas chinas”. El punto de vista más correcto es que esta técnica invalida el ayuno, porque el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Las ‘tazas chinas’ invalidan en ayuno, tanto de quien lo practica como de aquél a quien se le practica”. Narrado por Abu Dawud, 2367; Ibn Máyah, 1679. Clasificado como auténtico por al-Albani en Sahih Abu Dawud.
Le preguntaron al Shéij ‘Abd el-‘Azíz ibn Baaz:
“Si un musulmán está ayunando y sangra, ¿su ayuno queda invalidado?”
Él respondió:
“El sangrado no afecta el ayuno excepto en el caso de las tazas chinas, es decir si es tratado deliberadamente con esta técnica. El punto de vista correcto es que las tazas chinas rompen el ayuno, porque el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) “Las ‘tazas chinas’ invalidan en ayuno, tanto de quien lo practica como de aquél a quien se le practica”. Pero si le sangra la nariz o resulta herido en alguna parte del cuerpo mientras ayuna, su ayuno todavía es válido, y no debe reponerlo”. Fin de la cita del sitio web del shéij:
Algunos de los eruditos diferencian entre el sangrado accidental, como recibir una herida, que no rompe el ayuno aun cuando uno sangre abundantemente, y el que ocurre como resultado de una acción deliberada, como en el caso de una donación de sangre, por ejemplo, lo cual se considera que rompe el ayuno, por analogía con las ‘tazas chinas’. Esto ha sido previamente discutido en la respuesta a la pregunta No. 37918.
Con respecto al pus u otras secreciones que salen de la herida, esto no afecta el ayuno en absoluto. Dice en Ad-Diyá' al-Lámi’ min al-Jutab al-Yawámi’ (5/465), por el Shéij Muhámmed ibn al-‘Uzaimín (que Allah tenga misericordia de él): “El ayuno no se rompe por abrir una herida para drenarla, aún si sale pus o sangre”. Fin de la cita.
Y Allah sabe más.