Reglamento sobre las murmuraciones de quienes no son Musulmanes.

Alabado sea Dios.

Primero, no es una característica musulmana hablar de forma grosera. El Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) dijo: “El Musulmán no calumnia, maldice, habla obscenamente o habla de forma grosera.”(Narrado por at-Tirmidhi, quien dijo, esto es  Hadiz hasan gharib; fue clasificado como sahih por al-Albaani). Si alguien hace algo regularmente, eso se volverá su hábito, entonces el Musulmán debe mantenerse alejado de todas las formas que llevan a la maldad, sean mayores o menores.

Segundo, si su pregunta se refiere a murmurar sobre un kaafir al mencionar sus defectos físicos, como que tiene una nariz larga o una boca grande, etc., entonces no haga esto, porque es burlarse de la creaciَn de Allah. Si significa hablar de las malas características de las cuales hace alarde, como zina e inmortalidad, o tomar alcohol, o advertir en contra suyo, no hay nada malo con eso. Aquí se encuentran algunos de los comentarios de los eruditos sobre este tema:

Zakariya al-Ansaari dijo: “Murmurar sobre un kaafir es haraam si él es un dhimmi [un no Musulmán que vive en un país islámico], porque eso le quitaría el incentivo de aceptar el yizyah y eso va en contra del tratado de dhimmah (acuerdo entre los no musulmanes y el estado Islámico) y las palabras del Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) “Quien haga un comentario insidioso a un dhimmi se ha ganado el Infierno.” (Narrado por Ibn Hibbaan en su libro Sahih). Está permitido (murmurar sobre un kaafir) si es un harbi (alguien que está en guerra con los Musulmanes, porque el del Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) solía encomendar a Hassaan que satirice a los idَlatras.”

(Asna al-Mutaalib ma’a Haashiyatihi, vol. 3, pág. 116)

Ahmad ibn Hayar al-Hayzami dijo en su libro al-Zawaayir ‘an Iqtiraaf al-Kabaa’ir (vol. 2, pág. 27): “Al-Ghazaali fue cuestionado sobre murmurar sobre un kaafir. Respondiَ: con respecto a un Musulmán, está prohibido por tres razones: causar ofensa; criticar la creaciَn de Allah, porque Allah es el creador de las acciones de Sus siervos; y perder el tiempo en algo que no es beneficioso. El primero es haraam, el segundo es makruh y el tercero no es lo mejor que uno puede hacer. Con respecto al dhimmi, es como el Musulmán en aquello que no cause daٌado, porque  quien da la Ley protege su honor, sangre y propiedad. Se dijo en al- Khaadim, la primera visiَn es correcta. Ibn Hibaan narrَ en su libro Sahih que el Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) dijo: ‘Quien haga un comentario insidioso a un Judío o a un Cristiano merece el Infierno.’ El significado de hacer un comentario insidioso es hacer que alguien escuche algo que le causará una ofensa. No hay evidencia más fuerte que esa, es decir, es haraam. Al- Ghazzali dijo: con respecto al harbi, el primero no es haraam y el segundo y el tercero son makruh. Con respecto al que comete bid’ah (innovaciَn), si él se convierte en un kaafir, es como un harbi, de lo contrario, es como un Musulmán, pero hablar de él con respecto a su bid’ah no es makruh. Ibn  al-Mundhir dijo, sobre las palabras del Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él), “Es su menciَn sobre su hermano lo que le disgusta,”- esto indica que en el caso de quien no es tu hermano, como un Judío o un Cristiano o un seguidor de otra religiَn, o aquel cuya innovaciَn (bid’ah) sea intolerable para el Islam, no hay murmuraciones.”.