Alabado sea Dios.
En primer lugar, lo que indican muchos de los reportes que se remontan al Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) es que el número de veces que se debe decir “Alláhu Ákbar” en la oración de la Festividad, es de siete, aparte del takbir que se dice en la apertura y de los cinco que se dicen en el segundo módulo de la oración, y además del que se dice cuando uno se pone de pie luego de la postración.
Se narró de ‘Abdullah Ibn ‘Amr Ibn al-‘Aas (que Dios esté complacido con él): “El Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “El takbir en la oración de la Festividad de la Pureza son siete, y cinco en el segundo módulo, y la recitación debe hacerse después de ellos en ambos módulos”. Narrado por Abu Dawud, 1151.
At-Tirmidi narró que Al-Bujari lo clasificó como auténtico. Ver: “Tartíb al-‘Ilal al-Kabír, 154. Fue clasificado como bueno por An-Nawawi en Al-Jalásah (2/831) y clasificado como auténtico por Al-Albani en Sahih Abi Dawud.
Se narró de Kazír Ibn ‘Abdullah, de su padre, de su abuelo, que el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo el takbir en la oración de la Festividad siete veces en el primer módulo, luego la recitación, luego el takbir cinco veces en el segundo módulo, luego la recitación. Fue Narrado por at-Tirmidi (536), quien dijo: “Acerca de este tópico se han narrado cosas de ‘Aa'ishah, de Ibn ‘Umar, de ‘Abdullah Ibn ‘Amr, un reporte bueno del abuelo de Kazír, que es el mejor que se ha narrado sobre este asunto y que se remonta al Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él). Su nombre era ‘Amr Ibn ‘Awf al-Muzani”. Fin de la cita.
At-Tirmidi citó que Al-Bujari (que Dios tenga misericordia de ambos) dijo: “No hay nada más auténtico que esto acerca de este asunto, este es mi punto de vista”. Fin de la cita de Tartíb al-‘Ilal al-Kabír, 153.
Estos reportes fueron seguidos por un gran número de eruditos, y se ha registrado que muchos de los compañeros y sus discípulos también actuaron de acuerdo a ellos.
El imam An-Nawawi (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Nuestro punto de vista es que hay siete takbires en el primer módulo de la oración (de la Festividad), y cinco en el segundo. Al-Jattábi registró eso de la mayoría de los eruditos en Ma’álim as-Sunan. También fue narrado por el autor de Al-Háwi, de la mayoría de los compañeros y sus seguidores. También fue narrado esto de Ibn ‘Umar, Ibn ‘Abbás, de Abu Hurairah, de Abu Zaíd al-Judri, de Iahia al-Ansari, de Az-Zuhri, de Málik, Al-Awzá’i, Áhmad, e Isjaq. Al-Mahámili lo narró de Abu Bákr as-Saddíq, de ‘Umar, de ‘Ali, de Zaid Ibn Zábir, y de ‘Aa'ishah (que Allah esté complacido con todos ellos). Al-‘Abdari también lo narró de Al-Láiz, de Abu Yusuf y de Dawud”. Fin de la cita de Maymu', 5/24-25.
En segundo lugar, con respecto a los reportes que se remontan al Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) y que difieren de lo arriba mencionado, uno de ellos es el que mencionaste en tu pregunta. Pero fue clasificado como débil por muchos de los eruditos, por las siguientes razones:
1 – Su cadena de transmisión incluye a ‘Abd er-Rahmán Ibn Zábit Ibn Zawbán. El Imam Áhmad dijo: “Sus reportes son extraños y rechazables”. En una ocasión también dijo: “No es un narrador sólido”. Ibn Ma’ín dijo de él: “Es un narrador débil”. An-Nasá'i dijo: “Es débil”. Abu Hátim lo clasificó como un narrador confiable, e Ibn Ma’ín dijo de él: “No hay nada de malo con él”. Ver: Tahdíb at-Tahdíb, 6/151.
2 – Su cadena de transmisión incluye a Abu ‘Aa'ishah, el compañero de Abu Hurairah. Él en realidad es alguien desconocido, no se sabe nada de él. Esto fue señalado por Ibn Házm, Ibn al-Qattán y Ad-Dahabi, como se menciona en Baián al-Wáhm (5/44) y en Mizán al-I’tidal (4/543).
3 – Y además de los defectos ya mencionados, está el hecho de que difiere de lo afirmado en reportes cuya autenticidad se ha demostrado. En ese reporte, Abu Musa y Hudhaifah narraron el reporte sobre el takbir de la Festividad atribuyéndoselo sólo a Ibn Mas’ud, no lo narraron del Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él).
Al-Baihaqi (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Hay dos puntos de vista para tomar en consideración con respecto a este reporte:
1 – Si puede ser atribuido al Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él).
2 – La respuesta de Abu Musa.
Lo que es bien sabido acerca de esta historia es que ellos remitieron el asunto a Ibn Mas’ud, e Ibn Mas’ud les dio un dictamen jurídico a tal efecto, y no le atribuyó esto al Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él).
Así es como fue narrado por Abu Isjaq as-Subái'i, de ‘Abdullah Ibn Musa: que Sa’íd Ibn al-‘Aas le envió un mensaje a Ibn Mas’ud, a Hudhaifah y a Abu Musa preguntándoles por la cantidad de veces que debía decirse “Alláhu Ákbar” en la oración de la Festividad, y que ellos dejaron el asunto en manos de Ibn Mas’ud, quien dijo: “Digan cuatro takbires antes de recitar. Luego reciten. Cuando hayan terminado de hacerlo, digan el takbir y hagan la inclinación, luego se ponen de pie para el segundo módulo, recitan, y cuando han terminado de hacerlo, dicen “Alláhu Ákbar” cuatro veces”.
‘Abd er-Rahmán es Ibn Zábit Ibn Zawbán. Fue clasificado como débil por Iahia Ibn Ma’ín, quien dijo de él: “Era un hombre honrado. También fue narrado por Nu’mán Ibn al-Mundir, de Majul, del enviado de Abu Musa y Hudaifah, del Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él), pero no mencionó al enviado… (Esto es así) aparte del takbir de apertura y de la inclinación”. Fin de la cita de As-Sunan al-Kubra, 3/289.
Al-Jattábi dijo:
“Acerca de esto Abu Dawud registró un reporte débil… (Y citó este reporte)”. Fin de la cita de Ma’álim as-Sunan, 1/251.
Ibn Házm (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“No es auténtico”. Fin de la cita de Al-Muhálla, 5/84.
Ibn Qudamah (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Es débil”. Fin de la cita de Al-Mugni 3/270.
An-Nawawi (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Es un reporte débil”. Fin de la cita de Al-Maymu’, 5/25.
Fue también clasificado como débil por Ibn ‘Abd el-Hádi en Tanqiq at-Tahqiq, 2/93.
Hay otro reporte que fue narrado de uno de los compañeros del Profeta, quien dijo: “El Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) nos lideró en la oración en el día de la Festividad. Dijo el takbir cuatro veces y luego cuatro veces, luego volvió su rostro hacia nosotros cuando había terminado de rezar y dijo: “No se olviden, como el takbir de la oración funeraria”, y sostuvo sus dedos plegados sobre su pulgar”. Registrado por At-Tahawi en Shárh Ma’áni al-Azár, 4/345.
Él dijo: “ ‘Ali Ibn ‘Abd er-Rahmán y Iahia Ibn ‘Uzmán nos dijeron, de ‘Abdullah Ibn Iusud, de Iahia Ibn Hámza, de Al-Wadín Ibn ‘Atá', de Al-Qásim Abu ‘Abd er-Rahmán, quien dijo: “Uno de los compañeros del Profeta Muhámmad...” y citó el reporte mencionado.
Luego At-Tahawi dijo:
“La cadena de transmisión de este reporte es buena. ‘Abd Allah Ibn Iusuf, Iahia Ibn Hámza, Al-Wadín y Al-Qásim, son todos narradores cualificados, y son conocidos por narrar reportes auténticos, a diferencia de aquellos que narraron el primer reporte. Si este asunto debiera resolverse en base a las cadenas de transmisión más auténticas, este reporte es el mejor para ello, lo opuesto a otros reportes”. Fin de la cita. Al-Albani estuvo de acuerdo con él en As-Sílsilat as-Sahihah, 2997.
Pero con respecto a Al-Wadín Ibn ‘Atá', aun cuando Ibn Ma’ín y Áhmad han dicho que no hay nada de malo con él, algunos eruditos mostraron reservas. Se ha narrado de Al-Walíd Ibn Muslim que dijo sobre él: “Él solía dar buenos sermones, pero no era fuerte narrando reportes”. Muhámmad Ibn Sa’d dijo: “Era un narrador débil en los reportes”. Al-Yawzáni dijo: “Es débil en la narración de reportes”. Abu Hátim dijo: “Algunos de sus reportes pueden ser reconocibles, y otros son extraños”. Ibrahím Ibn Isjaq al-Hárbi dijo: “Otros son más confiables que él”. ‘Abd al-Báqi Ibn Qáni’ dijo: “Es un narrador débil”. Ver: Tahdíb at-Tahdíb, 11/121.
Basándonos en esto, los reportes que afirman que el número de veces que se debe decir “Alláhu Ákbar” es siete en el primer módulo y cinco en el segundo son más numerosos y más auténticos, por lo tanto merecen tener precedencia, especialmente porque la mayoría de los juristas y de los compañeros del Profeta se la dieron.
Al-Baihaqi (la paz sea con él) dijo:
“El reporte que tiene una cadena de transmisión que se remonta al Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él), combinado con la práctica de los primeros musulmanes, es el que merece más ser seguido”. Fin de la cita de Sunan al-Kubra, 3/291.
An-Nawawi (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Los que narraron el punto de vista que seguimos son más numerosos, tenían mejor memoria y eran más confiables. Más aún, el número de takbires mencionados en su reporte es mayor. Pero Dios sabe mejor”. Fin de la cita de Al-Maymu’, 5/25.
Hemos citado arriba el punto de vista del Imam al-Bujari (que Allah tenga misericordia de él) acerca del reporte que habla de los siete takbires en el primer módulo y cinco en el segundo, que es el punto de vista mejor respaldado por la evidencia sobre este asunto.
En tercer lugar, se ha probado que Ibn Mas’ud (que Dios esté complacido con él) solía decir el takbir cuatro veces en el primer módulo y cuatro veces en el segundo, pero de los demás compañeros se registró algo distinto. Ver: Musánnaf Ibn Abi Shaibah, 2/78-81.
Basándonos en esto, este es un asunto sometido al juicio independiente de los eruditos, en el cual cada musulmán puede hacer lo que considera más correcto, y nadie puede denunciar a los demás por seguir una opinión distinta.
El Shéij Muhámmed ibn al-‘Uzaimín (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Si hace algo distinto a eso, por ejemplo si hace cinco takbires en el primer módulo y en el segundo, o hace siete en el primero y también en el segundo de acuerdo a lo que se ha narrado de los compañeros, entonces debemos citar lo que dijo el Imam Áhmad: “Los compañeros del Profeta Muhámmad (que Dios esté complacido con todos ellos) diferían con respecto a este tema, y todos esos puntos de vista son aceptables”. En otras palabras, el Imam Áhmad pensaba que este era un asunto amplio, y que si un musulmán opinaba distinto con respecto a la cantidad de takbires para la oración de la Festividad basándose en los reportes que se han narrado de los compañeros, no hay nada de malo en ello. Este es uno de los principios de la escuela de jurisprudencia del Imam Áhmad Ibn Hánbal (que Allah tenga misericordia de él), que si había alguna diferencia de opinión entre los musulmanes de las primeras generaciones y no había ningún texto definitivo sobre el asunto, entonces todos los puntos de vista eran en principio aceptables. Él (que Allah tenga misericordia de él) veneraba y respetaba a los compañeros del Profeta, que Dios esté complacido con todos ellos. Él dijo que si no hay un texto definitivo que descarte alguno de estos puntos de vista, entonces todos los puntos de vista son aceptables, y el asunto es amplio. Indudablemente este punto de vista del Imam Áhmad es uno de los mejores enfoques para unir y reconciliar a la comunidad musulmana, para que nadie justifique la división y el disenso en base a los diferentes puntos de vista sobre asuntos menores, al punto que algunos consideran a su hermano musulmán como desviado cuando ellos mismos pueden estar desviados. Es uno de los problemas que se han hecho muy comunes hoy en día, a pesar del optimismo que uno pueda sentir por el despertar de la juventud. Este despertar puede echarse a perder por este tipo de disputas estériles y desembocar en más divisiones, y uno ve a algunos musulmanes que si su hermano difiere de él con respecto a un asunto en el cual no hay ningún texto definitivo, se alejan y comienzan a descalificarlo, y a hablar mal de él. Este problema es muy conveniente para los enemigos del Islam que quieren ahogar este despertar de conciencia entre los musulmanes.
Esto es indudablemente perjudicial, y los buscadores de conocimiento deben ponerle fin a este tipo de disputas, que nos perjudican a todos los musulmanes. ¿O acaso ha descendido alguna revelación de Dios que dirima este asunto de forma definitiva? Esto no ha sucedido, y si no ha sucedido, ¿cómo puede uno saber sin la menor duda cuál es el punto de vista correcto? Es posible que uno esté equivocado y su hermano tenga la razón. Esta es la realidad, no hay ninguna revelación sobre el asunto, sólo el Corán y la Tradición Profética que están frente a nosotros.
Si el asunto está abierto al juicio independiente de los musulmanes, entonces cada uno de nosotros debe ser tolerante con el juicio de su hermano musulmán. No hay nada de malo con la discusión calmada y beneficiosa entre hermanos, pero yo preferiría que esta discusión entre quienes sostienen puntos de vista distintos no sea enfrente de otros, en frente de aquellos que puedan interpretarla como una fuente de división o puedan hacer un mal uso de estos debates. Quienes discuten pueden llegar luego a un acuerdo, mientras que otros que lo presencian pueden tomar eso como causa de resentimiento aun si ellos llegaron a un acuerdo, y de esta forma Satanás agitaría la enemistad entre nosotros, agravando el problema.
Entonces, yo digo, que Dios bendiga y recompense al Imam Áhmad por este excelente punto de vista, que si las primeras generaciones diferían sobre un tema en particular acerca del cual no había un texto definitivo, entonces todas las opiniones son aceptables”. Fin de la cita de Ash-Shárh al-Mumti’, 5/136-138.
Para más información, por favor consulta la respuesta a la pregunta No. 36491.
Y Allah sabe más.