Alabado sea Dios.
Elegir un tiempo en particular para rememorar a Dios o enviar bendiciones al Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) puede seguir una de las siguientes dos formas:
– Hacer esto pensando que hay una virtud especial en hacer estos actos de culto en ese momento en particular. Esto no está prescripto excepto en los casos donde hay evidencias textuales de que elegir ese momento está prescripto en el Islam.
– Hacer los actos de culto en ese momento pero no porque uno piense que hay alguna virtud en particular en ese momento; más bien el momento se elige porque uno es libre y tiene energía, porque le resulta más conveniente, etc. No hay nada de malo con ello.
Las generaciones más tempranas y las siguientes siempre eligieron momentos particulares para estudiar, repasar, memorizar y enseñar de acuerdo con lo que fuera más idóneo para su situación y la situación de aquellos que estaban aprendiendo de ellos. Esto es lo que usualmente la gente hace. Pero hay algunos innovadores que escogen un momento en particular, o un número particular de momentos para repetir una palabra o acción, o una manera particular de hacer algo, y se inventan que eso es algo prescripto en el Islam y lo enseñan a los demás. Los eruditos consideran a esto como un grave pecado, una clase de mentira y de innovación.
Ash-Shátibi (que Allah tenga misericordia de él) dijo: “La innovación se refiere a una forma de culto inventada y atribuida a las enseñanzas del Islam; puede parecer similar a lo prescripto en la ley islámica, y el objetivo de este engaño es hacerlo parecer como parte de la religión o de una devoción extra o singular al rendirle culto a Dios… esto incluye adherir a ciertas formas y modos (de culto), así como recitar oraciones para rememorar a Dios al unísono, tomar al día de nacimiento del Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) como un día de fiesta, etc. También incluye adherir a los actos específicos de culto en momentos específicos que no están prescriptos en la ley islámica, como por ejemplo ayunar siempre en el decimoquinto día de Sha’bán y permanecer esa noche en oración”. Fin de la cita de Al-I’tisam.
Está prescripto en el Islam que el tiempo para recitar oraciones para rememorar a Dios abarca entre el período de la oración del alba y la salida del Sol, y el período entre la oración de la tarde y la puesta del sol, porque Dios, glorificado y exaltado sea dijo (traducción del significado):
“…y glorifica con alabanzas a tu Señor antes de la salida del sol y antes del ocaso, durante la noche y durante el día, para que así [Allah te retribuya con una gran recompensa y] quedes complacido” (Corán, 20:130).
“Y ten presente a tu Señor en tu corazón con sometimiento y temor, e invócale con voz baja por la mañana y por la tarde, y no seas indiferente” (Corán, 7:205).
La palabra ‘tarde’ se refiere al período entre la oración de la tarde y la oración del ocaso.
Y Dios, glorificado y exaltado sea, también dijo (traducción del significado):
“Glorificad a Allah al anochecer y al amanecer. 18. Él merece ser alabado en los cielos y en la Tierra, [¡Alabadle, pues!] por la tarde y el mediodía” (Corán, 30:17-18).
Muslim transmitió de Yábir Ibn Samurah que cuando el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) había rezado la oración del alba, se sentaba en el sitio en que había rezado hasta que el Sol asomara.
At-Tirmidi transmitió que Anas Ibn Málik (que Dios esté complacido con él) dijo que el Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Quien rece la oración del alba en congregación, que se siente a rememorar a Dios hasta que el Sol haya subido, y entonces rece dos módulos de oración y recibirá una recompensa como quien hace la peregrinación mayor y menor”. El Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Completa, completa, completa”.
Ibn al-Qayím (que Allah tenga misericordia de él) dijo: “El capítulo sobre la oración para rememorar a Dios en los dos finales del día (como se mencionan en 11:114), son los tiempos entre la oración del alba y la salida del Sol, y entre la oración de la tarde y la del ocaso. Dios, glorificado y exaltado sea, dijo (traducción del significado):
“¡Oh, creyentes! Recordad constantemente a Allah, 42. Y glorificadle mañana y tarde” (Corán 33:41-42).
Sobre ‘La tarde’: Al-Yawhari dijo: “Este es el tiempo después de la oración de la tarde y hasta la oración del ocaso. Y Dios, glorificado y exaltado sea, dijo (traducción del significado):
“Sé paciente y perseverante [¡Oh, Muhámmad! como lo fueron los Mensajeros que te precedieron], por cierto que la promesa de Allah es verdadera; y pide el perdón de tus faltas [para que los creyentes sigan tu ejemplo], y glorifica con alabanzas a tu Señor por la tarde y al amanecer” (40:55).
Dios, glorificado y exaltado sea, también dijo (traducción del significado):
“Ten paciencia [¡Oh, Muhámmad!] con sus injurias, y glorifica con alabanzas a tu Señor antes de la salida del Sol y antes del ocaso, durante la noche y durante el día, para que así [Allah te retribuya con una gran recompensa y] quedes complacido” (20:130).
Esta interpretación es la mencionada en los reportes, sobre decir determinadas oraciones a la mañana y la tarde. Esto significa que es antes de la salida del Sol y antes de que se ponga. Por consiguiente, el tiempo de estas oraciones para rememorar a Dios es después de la oración del alba y después de la oración de la tarde”. Fin de la cita de Al-Wabil as-Sáyib.
Algunos eruditos sostienen el punto de vista de que el tiempo para rememorar a Dios en la mañana y la tarde se extiende hasta la oración del ocaso.
El Shéij Muhámmed Ibn al-‘Uzaimín (que Allah tenga misericordia de él) dijo: “El autor (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Capítulo sobre rememorar a Dios en la mañana y la tarde.
Lo que él quiso decir con ‘por mañana y tarde’ era al principio del día, al final del día y el principio de la noche. La mañana empieza cuando rompe el alba y finaliza al mediodía. Y la tarde empieza con la oración de la tarde y finaliza con la oración del ocaso”. Fin de la cita de Shárh Riádh as-Saalihín.
Otro momento en que es recomendable rememorar a Dios y ofrecer una súplica es en las últimas horas del viernes, a causa del reporte de Yábir Ibn ‘Abdallah (que Dios esté complacido con él) quien dijo que el Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “El día viernes tiene doce horas en que cualquier servidor que le pida algo a Dios, Él se lo concederá, así que búsquenlo en la última hora después de la oración del ocaso”. Abu Dawud y An-Nasa’i.
Consulta también las respuestas a las preguntas No. 82609 y 112165.
No hemos encontrado nada sobre la virtud de rezar entre el tiempo de la oración comunitaria de los viernes y la oración del ocaso. Basándonos en esto puede decirse que no hay nada de malo con elegir este momento para rememorar a Dios, si no está basado en la creencia de que hay alguna virtud particular con este momento; más bien esto será así porque es cuando uno tiene más tiempo o energía.
Con respecto al momento entre la oración de la tarde y la del ocaso, es el momento apropiado para rememorar a Dios de acuerdo a algunos eruditos, tal como explicamos anteriormente. Otros dijeron que es recomendable ofrecer actos de culto voluntarios en general en este momento, como dijeron Qatadah y ‘Ikrimah. Ver: Al-Bahr al-Muhit, por Abu Haián.
Y Allah sabe más.