Alabado sea Dios.
En primer lugar, lo mejor cuando recitamos la oración del tarawih es completar la recitación del Corán una vez. Esto es lo que puede entenderse de los reportes contenidos en las dos obras de reportes más auténticos, que afirman que el arcángel Gabriel (la paz sea con él) solía recitar el Corán entero junto con el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) durante Ramadán.
El Shéij ‘Abd el-‘Azíz ibn Baaz (15/325) dijo: “Puede entenderse de esto que si el imam recita el Corán entero a la congregación durante Ramadán, esta es una forma de estudiarlo y repasarlo juntos, porque esto les permite beneficiarse de su recitación. Por eso el imam Áhmad (que Allah tenga misericordia de él) solía completar la recitación del Sagrado Corán con aquellos a los que dirigía en la oración, y algo similar hicieron todos nuestros rectos predecesores. Pero esto no significa que el imam no deba hacer su recitación deliberadamente y no buscar concentrarse en pasajes específicos, sino que más bien buscar estas cosas es lo mejor para completarlo”. Fin de la cita de Maymu' al-Fatáwa, Shéij ‘Abd el-‘Azíz ibn Baaz, 11/331-333.
Dice en Al-Mawsu’ah al-Fiqhíyah (27/148): “Los juristas hánbalis y la mayoría de los hánafis (esto fue narrado también por al-Hasam de Abu Hanifah), sostienen el punto de vista de que la Tradición Profética es completar la lectura del Sagrado Corán durante las oraciones del tarawih, para que los orantes puedan oír el Corán entero durante esas oraciones. Los hánafis han afirmado que la Tradición Profética es completar su lectura una vez. Por lo tanto, el imam no debería abandonar esto a causa de la pereza de la gente, sino que debería recitar diez versos o algo parecido en cada módulo de la oración, y de esta manera será capaz de completar su lectura a lo largo del mes. Esto está basado en la presunción de que se rezan veinte módulos cada noche. Y también se ha afirmado que se deben rezar treinta versos en cada módulo de oración, porque ‘Umar (que Dios esté complacido con él) encomendó eso. En ese caso, el Sagrado Corán podría ser completado tres veces durante Ramadán.
Al-Kasani dijo: “Lo que ‘Umar encomendó fue para que los musulmanes hagan más de lo encomendado, que es completar la lectura del Sagrado Corán una vez. Esto es lo que era apropiado para su tiempo. Pero en nuestro tiempo es mejor que el imam recite de acuerdo a las circunstancias de la gente. Él debería recitar lo que pueda tomando en cuenta de no sobrecargar a la gente, porque incrementar el tamaño de la congregación haciendo la recitación más cómoda para esa gente que dispone de poco tiempo es mejor que alargar la recitación a riesgo de que solamente una porción de los orantes se quede a participar de la oración completa”. Fin de la cita.
Lo que al-Kasani ha dicho es bueno, y el imam debe prestar atención a la situación de la gente que reza detrás de él. No es permisible que el imam haga las oraciones demasiado largas y dificulte las cosas a los orantes, haciendo de esta forma que muchos de ellos se vayan. Esto hará además que las personas que no participen de toda la oración se sientan mal y se sientan culpables por no haber podido quedarse a participar de la oración completa. Lo que el imam debe hacer es animar a la gente a rezar las oraciones del tarawih aun si eso implica hacer la oración más corta, en tanto la oración sea completada, porque es mejor que la gente ofrezca una oración breve pero completa que una oración larga pero incompleta.
Abu Dawud dijo: “Áhmad Ibn Hanbal fue consultado acerca de un hombre que recitó el Sagrado Corán dos veces en Ramadán, mientras dirigía a la gente en la oración. Él respondió: “En mi punto de vista, esto depende del nivel de energía de la gente, y de si hay trabajadores o gente que tiene que atender otros quehaceres y obligaciones entre la gente”. Ibn Ráyab al-Hánbali dijo: “Las palabras del imam Áhmad indican que se debe prestar atención a la situación doméstica y social de las personas que están participando del rezo en comunidad, evitando hacer la oración demasiado larga para ellos. Este punto de vista tuvo eco también en otros juristas entre los compañeros del imam Abu Hanifah, y de otros”. Fin de la cita de Lata’if al-Ma’arif, pág. 18.
El Shéij ‘Abd el-‘Azíz ibn Baaz fue consultado: “¿Cuál es su opinión acerca de lo que algunos imames hacen, cuando escogen una parte del Sagrado Corán para recitarlo en cada módulo de cada oración durante la noche?”.
Él respondió:
“Yo no veo nada de malo con esto, porque depende de cómo el imam evalúe la situación. Si piensa que es mejor recitar más en alguna noche en particular o en algunos módulos particulares de la oración, porque cree que esto será de beneficio para los que están rezando detrás de él y siente que tiene la energía suficiente para ello, o que quienes están rezando detrás de él lo disfrutarán, o que desean realmente escuchar más versos, entonces puede hacerlo. Si tiene una buena voz y comienza disfrutando la recitación, recita con humildad y se concentra, esto será de beneficio para aquellos que lo escuchan y que están rezando detrás de él. Luego, si recita algunos versos extra en otros módulos o en ciertas noches particulares, nosotros no vemos ninguna razón por la cual no deba hacer esto. Este tópico es amplio, alabado sea Dios”. Fin de la cita de al-Fátawa Shéij ‘Abd el-‘Azíz ibn Baaz, 11/335-336.
El shéij también fue consultado: “¿Debe el imam prestar atención a la situación de las personas más débiles cuando reza la oración del tarawih durante Ramadán?”.
Él respondió:
“Claro, esto es algo requerido en todas las oraciones, en las del tarawih y también en las oraciones obligatorias, porque el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Cuando alguno de ustedes dirija a la gente en la oración, que abrevie las oraciones porque entre los orantes hay débiles, están los ancianos y aquellos que tienen menesteres que atender”. Por lo tanto el imam debe prestar atención a cómo está compuesta la congregación y ser gentil con ellos al rezar las oraciones nocturnas en Ramadán y también durante las últimas diez noches. Los que integran una congregación de orantes no son todos iguales, pueden variar. El imam debe tomar en cuenta las situaciones de todos e incentivarlos a todos a venir. Si el imam hace la oración demasiado larga está haciéndola difícil para los más débiles y de esta forma los está desanimando a concurrir. El imam debe hacer aquello que sea necesario para incentivar a todas las personas a concurrir a la oración, y si debe abreviarla para lograr eso pues entonces debe hacerlo. Si la gente se concentra durante la oración y logra paz durante ella, aunque solo sea por unos minutos, esto es mejor que una oración larga en la cual la gente se siente aburrida e inquieta”. Fin de la cita de Fatawa Shéij ‘Abd el-‘Azíz ibn Baaz, 11/336-337.
En tercer lugar, en la respuesta a la pregunta No. 20043 hemos afirmado que recitar parte de un capítulo en la oración es permisible, pero es mejor recitar el capítulo entero porque esto es lo que el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) usualmente hacía. Algunos eruditos, como Ibn as-Salah, hicieron una excepción en el caso de las oraciones del tarawih, y dijeron que es mejor recitar parte de un capítulo en ellas para que el imam pueda cumplir con la Tradición Profética de completar el Sagrado Corán en estas oraciones. Dice en Tuhfat al-Muhtach Shárh al-Mánhach (2/25): “De esto puede entenderse que si el imam quiere recitar el Sagrado Corán entero en las oraciones del tarawih, es mejor que recite parte de los capítulos en cada módulo, o de otra forma también puede recitar un capítulo entero en un módulo”. Fin de la cita.
Dice en Al-Mawsu’ah al-Fiqhíyah, 33/49: “En uno de los dos reportes narrados de él, Malik consideró desaconsejable recitar solo una parte de un capítulo. Los juristas sháfi’is y hánbalis sostienen el punto de vista de que no es desaconsejable recitar solo una parte de un capítulo, a causa del significado general del verso en el cual Dios dijo (traducción del significado):
“Recitad, pues, lo que sepáis del Corán” (al-Muzzámmil, 73:20).
E Ibn ‘Abbás (que Dios esté complacido con él) narró que el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) solía recitar: “Decid: Creemos en Allah y en lo que nos fue revelado, en lo que reveló a Abraham, a Ismael, Isaac, Jacob y las doce tribus [descendientes de los hijos de Jacob], y lo que reveló a Moisés, Jesús y a los Profetas. No discriminamos entre ellos, y nos sometemos a Él” (al-Báqarah, 2:136), en el primer módulo de la oración del alba, y también “Di: ¡Oh, Gente del Libro! Convengamos en una creencia común a nosotros y vosotros: No adoraremos sino a Allah, no Le asociaremos nada y no tomaremos a nadie de entre nosotros como divinidad fuera de Allah” (Aal ‘Imrán, 3:64) en el segundo módulo.
Pero los juristas sháfi’is claramente afirmaron que un capítulo completo es mejor que un pasaje o equivalente pero proveniente de un capítulo más largo. Esto se aplica en otras oraciones distintas a las del tarawih. Pero en las oraciones del tarawih recitar parte de un capítulo más largo es mejor. Ellos explicaron esto diciendo que la Tradición Profética acerca de las oraciones del tarawih es completar la recitación del Sagrado Corán entero durante esta oración, un poco cada noche”. Fin de la cita.
En conclusión, en tanto tu imam no vaya a completar la recitación del Sagrado Corán en las oraciones del tarawih, es permisible que recite una selección de varios pasajes del Sagrado Corán, y esto no es desaconsejable, aunque sería mejor que recite en ese tiempo un solo verso completo.
Y Allah sabe más.