Domingo 23 Yumada al Ula 1446 - 24 Noviembre 2024
Español

Le han pedido investigar acerca del Islam y su influencia en Europa

14070

Fecha de publicación : 12-12-2015

Vistas : 4689

Pregunta

Le agradecería si pudiera discutir el ascenso del Islam explorando la vida y las ideas religiosas de Muhámmad, como también su desarrollo en el siglo posterior a su muerte. Si puede explicar las ideas religiosas de Muhámmad colocándolas en su contexto histórico, es decir, cómo estas ideas reflejaban las experiencias personales y el contexto histórico del que provenían, y más generalmente, el entorno de la sociedad árabe del siglo VII.
Luego, quisiera que me explicara cómo y cuándo el Islam se expandió desde Arabia hacia Europa dirigiendo su influencia hacia los cristianos de Occidente y a otras regiones circundantes.

Texto de la respuesta

Alabado sea Dios.

En primer lugar, nuestro Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) no produjo ideas por sí mismo sino que más bien el mensaje que trajo le fue revelado por Dios. Por lo tanto, las ideas religiosas que él predicó no fueron suyas, y por eso son coincidentes con las de los profetas de antaño a los que él no conoció personalmente, como aquellos cuyos nombres bien conocen los judíos y cristianos.

En segundo lugar, él fue descendiente de uno de los linajes más nobles de los árabes. Aun sus enemigos le reconocieron eso. Por eso, Abu Sufián, cuando era su enemigo mortal y antes de convertirse al Islam, testificó esto ante el gobernante bizantino.

También puede mencionarse que las personas más nobles y honradas de la época lo siguieron, entre ellas las tribus y clanes más nobles en su conducta y su manera de pensar.

Su nombre completo era Muhámmad Ibn ‘Abdullah Ibn ‘Abd al-Muttalib Ibn Háshim Ibn ‘Abd Manáf Ibn Qusai Ibn Kilaab Ibn Murrah Ibn Ka’b Ibn Lu’ai Ibn Gaalib Ibn Fahr Ibn Malik Ibn an-Nadar Ibn Kinánah Ibn Juzaimah Ibn Mudrikah Ibn Iliás Ibn Mudar Ibn Nizaar Ibn Ma’d Ibn ‘Adnán Ibn ‘Isma’il Ibn Ibrahím (Abrahán, la paz sea con él).

Dios lo envió en su misión profética a la edad de cuarenta años, que es la edad de la responsabilidad. El primer signo de su misión profética que le fue enviado al Profeta Muhámmad fue en sueños: él soñaba las cosas y luego las veía suceder durante el día. Se ha reportado que esto duró por seis meses. El período de su misión profética duró por veintitrés años. Estos sueños fueron una de las cuarenta y seis partes de la profecía. Luego Dios le comunicó su misión profética cuando un ángel vino a él mientras estaba en la cueva del monte Hira', donde él solía pasar algunas temporadas en meditación y soledad. Las primeras palabras del Sagrado Corán en ser reveladas fueron:

“¡Lee! [¡Oh, Muhammad!] En el nombre de tu Señor, Quien creó todas las cosas” (al-‘Alaq, 96:1).

Su mensaje llegó en etapas. Primero, fue designado como Profeta. Segundo, predicó entre sus seres queridos y personas más cercanas. Tercero, advirtió a su pueblo. Cuarto, predicó a aquellos que no habían recibido aun a ningún profeta, es decir, a los árabes. Quinto, enseñó su mensaje a toda la humanidad, como también a los genios, para que fuera preservado hasta el final de los tiempos.

Luego de la revelación inicial, pasó tres años convocando a la gente a adorar a Dios solamente, en secreto. Luego se le revelaron las siguientes palabras:

“Difunde lo que se te ordena [públicamente] y despreocúpate de los idólatras” (al-Híyr, 15:94).

Ver: Zaad al-Ma’ad, por Ibn al-Qayím, 1/71.

En tercer lugar, con respecto al mensaje con el que el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) predicaba a la gente, es suficiente citar lo que dijo entonces Abu Sufián cuando era incrédulo. Heraclio, el gobernante de Bizancio, le preguntó a Abu Sufián: “¿Qué les pide él que hagan?”. Abu Sufián respondió: “Nos dice que adoremos a Dios solamente, que no Le asociemos nada, y que él nos prohíbe adorar lo que solían adorar nuestros padres. Nos ordena rezar, dar en caridad, ser castos, mantener nuestras promesas y devolver lo que se nos ha confiado”. Heraclio respondió: “Esta es la descripción de un profeta. Yo sabía que uno aparecería, pero no creí que provendría de entre ustedes, los árabes. Si lo que dices es cierto, entonces no pasará mucho hasta que él tome posesión del lugar que está bajo mis pies. Si yo pudiera conocerlo no dudaría en seguirlo y lavar sus pies”. Narrado por al-Bujari, 2782; Muslim, 1773.

Cuarto, después de la muerte del Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él), él fue sucedido por un líder o sucesor (califa), que fue su compañero Abu Bakr as-Saddiq, durante cuyo tiempo tuvieron lugar importantes eventos: el envío del ejército de Usamah a Siria, la guerra contra los apóstatas y contra aquellos que rehusaron pagar la caridad obligatoria, el surgimiento de Musailimah, el mentiroso (un falso profeta), y la compilación del Sagrado Corán.

Luego, llegó ‘Umar Ibn al-Jattáb, que fue uno de los primeros musulmanes, y uno de los diez a quien el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) le había anunciado el Paraíso cuando aún estaba vivo, y quien más adelante sería uno de los cuatro califas rectamente guiados. ‘Umar también era un pariente político del Profeta Muhámmad y uno de los más grandes eruditos y ascetas entre sus compañeros. Muchas conquistas tuvieron lugar durante su tiempo, y entre las conquistas militares se incluyen la de Damasco, Jordania, Irak, Jerusalén y Egipto. Él fue uno de los que participó en el concilio junto con ‘Ali Ibn Abi Tálib (que Dios esté complacido con ambos), en el que se decidió adoptar como año cero del calendario musulmán la Emigración del Profeta Muhámmad desde La Meca hasta la ciudad de Medina. ‘Umar fue asesinado en el año 23 después de la Emigración por el asesino zoroastiano Abu Lu’lu’ah.

Luego llegó el califato de ‘Uzmán Ibn ‘Affán, que fue también uno de los diez a quienes el Profeta Muhámmad les anunció el Paraíso mientras aún estaban vivos. Él también se convirtió al Islam en los primeros días, y fue uno de aquellos que fue invitado al Islam por Abu Bakr. Emigró dos veces, primero a Abisinia (Etiopía), y luego a Medina. Se casó con Ruqaiah, la hija del Profeta Muhámmad, y cuando ella falleció se casó con su hermana Umm Kulzum. Gobernó como califa durante once años, y luego fue asesinado en el año 35 después de la Emigración a sus ochenta y tantos años.

Luego llegó el califato de ‘Ali Ibn Abi Tálib, también uno de los diez a quienes el Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) le anunció la noticia del Paraíso. Fue el hermano del Mensajero de Dios de acuerdo al sistema de fraternidad establecido durante la Emigración, fue también el ahijado del Profeta Muhámmad y su yerno, puesto que se casó con su hija Fátima, la más noble y bella de las mujeres de su época (que Dios esté complacido con ella). ‘Ali fue también uno de los primeros en convertirse al Islam, uno de los grandes eruditos y más bravos guerreros, prominente asceta y elocuente predicador. Fue uno de quienes compilaron el Sagrado Corán y se lo recitaban al Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él).

En quinto lugar, el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) fue guiado por las enseñanzas del Corán, ciertamente todo en su actitud y su estilo de vida estaba regido por el Sagrado Corán, como ‘Aa'ishah (que Allah esté complacido con ella), su esposa y Madre de los Creyentes, dijo de él. El ejemplo de nuestro Profeta Muhámmad es la esencia de la religión musulmana, y fue el mismo ejemplo con que Dios había enviado a los profetas de antaño, pero en este caso Dios perfeccionó su carácter para que la religión de Dios adoptara la forma final que conservaría hasta el Día de la Resurrección.

Cuando llegó la primera revelación, su esposa Jadíyah (que Dios esté complacido con ella) dijo de él: “No, por Dios, que Dios nunca te dejará atrás. Porque tú mantienes los lazos de parentesco, asistes al débil, das en caridad al pobre, honras a tus huéspedes y auxilias a quienes han padecido una calamidad”. Narrado por al-Bujari, 4; Muslim, 160.

Tanto sus compañeros como sus enemigos lo describen como una persona noble, diciendo que era honorable, bravo, misericordioso, de buena reputación, devoto, honesto y confiable. Estas cualidades fueron resumidas en el siguiente verso (traducción del significado):

“Ciertamente eres de una naturaleza y moral grandiosas” (al-Qalam, 68:4).

Su buen carácter y actitud tuvieron un gran efecto, y fue una de las razones por las que los árabes paganos y politeístas abandonaron su religión para abrazar al Islam.

Se ha narrado que Abu Hurairah dijo: “El Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) envió una caballería a Nachd, y ellos trajeron un hombre de la tribu de Hanifah cuyo nombre era Zamamah Ibn Azaal, y lo ataron a uno de los pilares de la mezquita. El Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) salió y dijo: “Desátenlo”. Luego Zamamah fue a la arboleda de palmeras cercana a la mezquita y se lavó haciendo la ablución, luego ingresó a la mezquita y dijo: “Atestiguo que no hay más divinidad excepto Dios, y que Muhámmad es el Mensajero de Dios”. Narrado por al-Bujari, 4114; Muslim, 1764.

En sexto lugar, con respecto a la influencia del Islam en Europa, sucedió de varias maneras, entre ellas las siguientes:

1 – La premura de los musulmanes por llevar este mensaje a toda la humanidad. Andalucía, en España, fue conquistada por Tariq Ibn Ziyád, en el año 92 después de la Emigración, concordante con el 711 después de Cristo, y la conquista en Europa occidental continuó hasta que llegaron al sur de Francia en el 114 después de la Emigración.

2 – A través de la gente que llegó a Europa desde el norte de África, desde Medio Oriente y desde el sur de Asia buscando trabajo y un futuro a salvo de las guerras.

3 – A través de los occidentales que llevaron mano de obra calificada de los países musulmanes a sus propios países para trabajar, como los técnicos turcos que fueron contratados en Alemania y a los que se les concedió ciudadanía.

4 – La presencia de predicadores musulmanes en Europa.

5 – Las conquistas del Imperio Otomano sobre parte de Europa.

6 – La conversión de nativos europeos al Islam, que luego comenzaron a propagarlo entre sus conocidos.

7 – Los vínculos comerciales entre los países musulmanes y Europa.

8 – La conversión de algunos europeos al Islam.

9 – Los cambios en el enfoque intelectual europeo.

10 – El rechazo moderno a los mitos cristianos que contradicen la Revelación y la adopción del conocimiento empírico, cuyos fundamentos fueron aprendidos por los diplomáticos cruzados en tierras del Islam y llevados luego a Europa, dando lugar al Renacimiento.

11 – La participación de las comunidades musulmanas en el desarrollo de la ciencia y la tecnología en Europa, a través de profesionales cualificados, además del incremento de comunidades musulmanas en Europa, lo cual implicó el incremento de mezquitas, escuelas islámicas y centros de reunión. Esto ha incrementado la influencia musulmana en Europa, al punto que los islamófobos lo han considerado una amenaza. El diario israelí Ha Aretz dijo en una publicación en junio del 2001: “Como en el caso de Europa occidental, el gran incremento del número de musulmanes en Estados Unidos ha conducido a un incremento de su influencia política. Su conciencia política, especialmente de los estudiantes árabes, que son los más activos en los campos políticos e ideológicos, y la mengua en el número de hebreos como resultado de los matrimonios mixtos y de su asimilación a la sociedad estadounidense, todos juntos en el futuro jugarán un rol en cambiar el equilibrio de fuerzas y la influencia de estos grupos en Washington. Esto es ahora algo tangible, como puede verse en las actividades de los lobbies pro árabes en el Congreso”.

Además puede mencionarse que más de 10 años atrás el número de musulmanes en Europa era de aproximadamente 12 millones.

También la difusión de mezquitas, centros islámicos y escuelas.

La difusión del velo islámico y los modos de vestimenta musulmanes en las capitales de los países de Europa.

Y también puede mencionarse la celebración de exhibiciones y seminarios islámicos, el establecimiento de compañías que cuidan los parámetros de licitud para las carnes y alimentos (halal), los cementerios en donde se entierran a los musulmanes fallecidos en la manera prescripta en el Islam, etc.

Y ciertamente Dios es la Guía hacia el camino recto y la Fuente de toda fuerza.

Origen: Sheij Muhammed Salih Al-Munajjid