Alabado sea Dios.
El punto de vista correcto entre los eruditos es que quien come o bebe pensando que la aurora aún no ha llegado, no ha cometido ningún pecado, y no hay nada que deba hacer, porque no era consciente del paso del tiempo, por lo tanto está excusado.
El Shéij Muhámmed ibn al-‘Uzaimín (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Si un ayunante come o bebe por ignorancia, entonces su ayuno es válido, ya sea porque esté inconsciente del paso del tiempo, o desconociera las normas, como por ejemplo alguien que se levanta en la última parte de la noche y piensa que la aurora no ha llegado todavía, entonces come o bebe algo, y luego descubre que sí ha llegado: su ayuno todavía es válido, porque no sabía.
Un ejemplo de quien no está consciente de las normas es el ayunante que se ha sometido al tratamiento de las ‘tazas chinas’, sin saber que invalida el ayuno. Su ayuno entonces es válido, porque Dios dijo (traducción del significado):
“¡Señor nuestro! No nos castigues si nos olvidamos o nos equivocamos. ¡Señor nuestro! No nos impongas una carga como la que impusiste a quienes nos precedieron. ¡Señor nuestro! No nos impongas algo superior a nuestra fuerza. Perdónanos, absuélvenos y ten misericordia de nosotros. Tú eres nuestro Protector, concédenos el triunfo sobre los incrédulos” (Al-Báqarah, 2:286).
Esta es la evidencia del Sagrado Corán. La evidencia de la Tradición Profética es el reporte de Asmá' bint Abi Bákr (que Dios esté complacido con ella), compilado por Al-Bujari en su obra Sahih. Ella dijo: “Rompimos nuestro ayuno en un día nublado en el tiempo del Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él), y luego el Sol salió”. Esto significa que ellos rompieron el ayuno todavía durante el día, pensando que el Sol ya se había puesto. Pero el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) no les dijo que repusieran ese día. Si hubiera sido obligatorio que lo repusieran, él no habría descuidado decírselo a sus compañeros, y sus compañeros nos lo habrían transmitido”. Fin de la cita de Maymu' al-Fatáwa, 19.
Consulta también la respuesta a la pregunta No. 38543.