Alabado sea Dios.
Los ángeles son honrados servidores de Dios que nunca le desobedecen en todo lo que Él les ordena. Dios los creó y puso en su naturaleza innata el obedecerle y adorarle. Algunos ángeles están designados a cargo de la Revelación, otros a cargo de la provisión, otros a cargo de las montañas y otros fueron creados para adorar, rezar y glorificar el nombre de Dios.
At-Tirmidi compiló un reporte que él clasificó como bueno (hásan), en el que Abu Darr (que Dios esté complacido con él) dijo: “El Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Verdaderamente yo veo lo que ustedes no ven, y oigo lo que ustedes no oyen. El cielo bulle y no en vano, porque no hay en él un espacio del ancho de cuatro dedos sin que haya allí un ángel postrando su frente hacia Dios”.
En el reporte del Viaje Nocturno dice: “Entonces, la Casa Visitada (un templo como la Ka’bah pero que está en el cielo) fue elevada para mí, y le pregunté a Gabriel sobre ella. Me dijo: “Es la Casa Visitada. Cada día setenta mil ángeles ingresan a ella a adorar a Dios, y cuando parten no regresan jamás”. Compilado por Al-Bujari y Muslim.
At-Tabari narró en su exégesis coránica, de Ibn Mas’ud (que Dios esté complacido con él), que dijo: “En los cielos no hay un palmo sin que allí haya un ángel apoyando su frente o su pie”. Luego recitó las palabras:
“Y ciertamente estamos ordenados en filas [para adorar a nuestro Señor]. 166. Y todos nosotros Le glorificamos” (Corán, 37:165-166).
Este culto está más allá de las capacidades humanas, y no somos capaces de realizarlo. Los ángeles no duermen ni se cansan, como Dios dijo (traducción del significado):
“Pero si se ensoberbecen [y rechazan adorar a Allah] sabed que los [Ángeles] que están próximos a su Señor Le glorifican por la noche y el día, y no se cansan de ello” (Corán, 41:38).
Sin embargo, la naturaleza y atributos humanos son distintos, y esta sin duda abarca a los profetas y mensajeros (que la paz y las bendiciones de Dios sean con todos ellos).
Los ángeles son capaces de realizar actos de culto que ningún ser humano puede. Pero el hecho de que su culto sea más intenso no significa que sean superiores a los profetas. El esfuerzo de los profetas debe ser valorado en base a las limitaciones de su naturaleza humana. Y esta es la razón por la cual han ascendido a tan altas alturas en la obediencia a Dios, y que tienen una virtud particular y una posición sublime. Más de un erudito ha señalado que los rectos y piadosos de la humanidad tienen un estatus más alto que el de los ángeles, porque los ángeles no deben luchar contra ninguna mala inclinación o desobediencia, mientras que los honrados y piadosos tienen estas inclinaciones, pero las resisten y se sobreponen a ellas para obedecer a Dios.
El shéij Ibn Taimíyah fue consultado sobre aquellos que obedecen a Dios entre la humanidad, ¿son superiores a los ángeles?”
Él respondió:
“Se ha probado que ‘Abdullah ibn ‘Amr (que Dios esté complacido con él) dijo: “Los ángeles han dicho a Dios: “Dios nuestro, Tú has creado a los hijos de Adán, y ellos comen y beben y disfrutan de la vida en el mundo; crea para nosotros un mundo invisible Más Allá de lo que ellos puedan ver, para nosotros”. Dios dijo: “No lo haré”. Se lo pidieron nuevamente, y Dios respondió lo mismo. Se lo pidieron dos o tres veces, y Dios se negó con las mismas palabras, y dijo: “Por Mi gloria, yo no puedo considerar al piadoso entre los descendientes de aquél a quien Yo creé con mi propia mano, igual que aquellos a quienes dije: “¡Sean!”, y existieron… (es decir, los ángeles)”. Esto fue narrado por ‘Uzmán ibn Sa’íd ad-Darimi.
Se narró de ‘Abdullah ibn Salam que dijo: “Dios no ha creado nada más querido para Él que Muhámmad”. Le dijeron: “¿Ni siquiera los ángeles Gabriel y Miguel?”. Él respondió: “¿Acaso no saben qué son Gabriel y Miguel?”. Son ángeles subyugados, creaciones como el Sol y la Luna. Dios no ha creado nada más querido para Él que Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él)”.
Yo no conozco nadie entre los compañeros del Profeta que desacuerde con esto. Este es un punto de vista bien conocido entre la Gente de la Comunidad y la Tradición Profética (los musulmanes) y los compañeros de los cuatro imames, es decir, que los amigos cercanos de Dios son superiores a los ángeles”. Maymu' al-Fatáwa, 4/344.
Él también dijo:
“Dios creó a Adán de barro. Formó su espíritu y lo insufló en el cuerpo que Él creó, y ordenó a los ángeles que se postraran ante Él, favoreciéndolo sobre ellos y enseñándole los nombres de todas las cosas creadas, y los piadosos entre sus descendientes son superiores a los ángeles, aun cuando la humanidad fue creada del barro y los ángeles de la luz”. Fin de la cita de Maymu' al-Fatáwa, 11/95).
Ibn al-Qayím (que Allah tenga misericordia de él) dijo: “Dios, glorificado y exaltado sea, creó lo superior de una materia inferior a la que fueron creados los demás seres. Esto es un signo de Su perfecto poder. Por eso Muhámmad, Abrahán, Moisés, Jesús, Noé y los mensajeros enviados por Dios son superiores a los ángeles. El punto de vista de los musulmanes es que los rectos y piadosos entre la humanidad son superiores a los ángeles, aun cuando ellos fueron creados de luz, y nosotros del polvo”. Fin de la cita de As-Sawá’iq al-Mursalah, 3/1002.
Él también escribió:
“Los rectos y piadosos entre la humanidad son superiores a los ángeles, porque el culto de los ángeles está libre de cualquier contaminación con los deseos e inclinaciones que soporta el alma humana. Son seres a los cuales ningún peligro les acecha. Son como el aliento de vida.
En cambio los actos de culto de los seres humanos son realizados a pesar de las inclinaciones naturales y deseos egoístas, superándolos y disciplinándolos. Entonces, la adoración en el ser humano tiene más mérito. Por eso muchos de los eruditos han dicho que los rectos y piadosos entre la humanidad son superiores a los ángeles”. Fin de la cita de Tariq al-Hiyratáin, 349-350.
Hay algunos eruditos que resaltaron un punto de vista diferente sobre este asunto. El Shéij Muhámmed ibn al-‘Uzaimín (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Comparar a los ángeles con los seres humanos rectos y piadosos es un asunto acerca del cual hay diferencias entre los eruditos, cada uno de los cuales citó textos que apoyan su opinión. Pero el punto de vista más correcto es que los rectos y piadosos son superiores a los ángeles ante Dios, basándonos en el resultado final, porque Dios, glorificado y exaltado sea, les dará a tales seres humanos una recompensa que no puede ser comparada con la de los ángeles, tanto como sabemos. Los ángeles estarán en la morada de los creyentes, es decir el Paraíso, e ingresarán a ella por cada puerta, saludándolos con las palabras “Y les dirán: ¡La paz sea sobre vosotros! En verdad fuisteis perseverantes [en la adoración]. ¡Qué hermosa es la recompensa de la morada eterna!” (Corán, 13:24). Desde el punto de vista de su origen, los ángeles son superiores, porque fueron creados de luz, y su naturaleza innata es adorar y obedecer a Dios, y se les ha dado la fuerza para ello. Dios, glorificado y exaltado sea, dijo que entre los ángeles hay ángeles del Infierno:
“¡Oh, creyentes! Guardaos a vosotros mismos y a vuestras familias del Fuego, cuyo combustible serán los hombres y las piedras, y en el que habrá Ángeles violentos y severos que no desobedecen a Allah en lo que les ordena, sino que ejecutan cabalmente Sus órdenes” (Corán, 66:6).
“Ciertamente quienes están junto a tu Señor [los Ángeles] no se ensoberbecen de su adoración, Le glorifican y se prosternan ante Él” (Corán, 7:206).
Este es el punto de vista decisivo sobre este asunto.
Sin embargo, consentirse discusiones acerca de este asunto y buscar determinar si los creyentes son superiores a los ángeles es una forma de conocimiento superfluo. Los musulmanes no tenemos ninguna necesidad de recalcar orgullosamente este asunto”. Fin de la cita de Fatáwa Nur ‘ala ad-Dárb, 8/6.
Él tiene razón, que Dios tenga misericordia de él. Este y muchos otros asuntos similares son discutidos por muchos musulmanes dándoles una relevancia que no tienen, dando lugares a disputas y competencias inconducentes sobre qué grupo es superior a otro. Es una actitud reprobable, el musulmán no necesita investigar eso para hacer lo correcto.
Lo que los musulmanes debemos hacer es abandonar este tipo de competencias fútiles y concentrarnos en adorar y obedecer a Dios.
Y Allah sabe más.