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Yo tengo una situación acerca de la que estoy muy avergonzada, y por la que temo el tormento del Infierno, y quisiera conocer las normas sobre ello.
En el pasado, yo era politeísta y fui engañada por Satanás para actuar como hombre, y de hecho tenía deseos muy masculinos y actuaba como un hombre. A causa de esto, pensé que sería mejor para mí cambiarme de sexo a través de una operación y tomando hormonas, y lo hice, y este proceso es irreversible. Yo viví confortablemente como un hombre por mucho tiempo, y luego en la última semana conocí el Islam y fui guiada al camino recto.
Ahora que soy musulmana, realmente lamento mi antiguo proceder y cada día me siento avergonzada por lo que he hecho ante Dios, y temo ir a cualquiera de las mezquitas de la zona porque no sé qué hacer con esta situación. Yo no nací como hombre y por lo tanto siento que si voy a la oración comunitaria con los hombres, estaría mintiendo, pero sin embargo mi apariencia externa es tan masculina que no tiene sentido que vaya a rezar con las mujeres. Siento que no hay esperanzas para mí y que aún si yo me arrepiento ante Dios, a causa de la severidad de mi pecado yo todavía estaría condenada al Infierno. ¿Qué puedo hacer? ¿Sería mejor que me mantenga alejada de las mezquitas para no causar discordias entre los demás musulmanes? SI Dios quiere, aún si estoy sola seré capaz de estudiar de los trabajos de los eruditos a través de los libros, que hoy en día se encuentran con facilidad.
Alabado sea Dios.
En primer lugar, alabamos a Dios, glorificado y exaltado sea, por haberte guiado al Islam. Esta es una gran bendición que Dios puede conceder a una persona, porque a través de ella uno puede lograr la verdadera felicidad y la bendición eterna, y un deleite sin fin en el Paraíso.
Te damos las buenas noticias de que Dios acepta el arrepentimiento. Además, por Su misericordia, Dios ha hecho que el Islam borre todos los pecados que una persona cometa antes de ingresar a él, no importa cuán grandes, serios u horrendos fueran. En el preciso momento en que pronunciaste tu shahádah e ingresaste al Islam, Dios te perdonó todos tus pecados previos, inclusive lo que relatas sobre tu cambio de sexo.
Has comenzado a escribir con Dios una nueva página en la historia de tu vida, y has comenzado esa página en blanco, sobre la cual no hay pecados, por lo tanto, mantenla así y no la manches con más pecados.
Ignora los susurros de Satanás, pues él intentará que desesperes de la misericordia de Dios y pienses que estás condenada al Infierno. Pero al convertirte al Islam, se te han perdonado todos tus pecados previos.
En segundo lugar, Dios te ha creado como mujer, y debes aceptar lo que Dios ha decretado y elegido para ti. El asunto no es si una persona es hombre o mujer, sino si es obediente a Dios para alcanzar Su complacencia.
Por lo tanto, debes volver a ser lo que siempre has sido.
Consultamos a un doctor y él nos dijo que es fácil, si Dios quiere. Puedes volver a consultar a los especialistas en este campo y hacer lo que ellos te aconsejen.
Si el útero ha sido quirúrgicamente removido, eso no puede repararse, pero no hay pecado en ello porque, como hemos afirmado, el Islam borra todas tus faltas anteriores. Lo mismo se aplica al arrepentimiento verdadero: borra los pecados. Tú te has convertido al Islam, has lamentado tus faltas pasadas y te has arrepentido; estas dos cosas son suficientes por sí mismas para borrar tus pecados previos.
Tercero, con respecto a que te mezcles con hombres y asistas a las oraciones en congregación de los viernes con ellos, esto no es permisible, porque tú no eres un hombre. Debes conducirte por la vida en base a lo que realmente eres, es decir una mujer, y seguir las normas que Dios ha prescripto para las mujeres.
Pero si mezclarte con las mujeres puede causar problemas pues ellas no comprenden tu situación a causa de tu apariencia externa, entonces puedes demorar eso hasta que logres recomponer tu apariencia externa para lograr que sea femenina. Debes apresurarte a recurrir a un doctor y comenzar a corregir tus errores previos. Hasta que eso esté hecho, y esperamos que sea pronto, puedes concentrarte en aprender sobre el Islam a través de los libros y artículos.
Le pedimos a Dios, glorificado y exaltado sea, que te guíe hacia la verdad y que te ayude a aferrarte firmemente a ella; que las puertas de tu corazón se abran y que Él complete Sus bendiciones sobre ti, y que te garantice la paz espiritual y la felicidad en este mundo y en el Más Allá.
Y Allah sabe más.