Alabado sea Dios.
Alabado sea AllahNo hay nada de malo en pedir eso, pero es mejor agregar alguna definición sobre aquello que se está pidiendo, tal como decir “Quiera Dios garantizarte una larga vida de obediencia a Él”, o “de bondad”, o “de lo que complace a Dios”. Es sabido que esta súplica no va contra las normas de la ley islámica; ciertamente es también parte del Decreto, como las medicinas, las oraciones para curarse, etc.
Cualquier medio que no vaya contra las enseñanzas del Islam es parte del Decreto.
El decreto de Dios se ejecuta tanto con respecto a la enfermedad como la salud, para aquellos por quienes se hace una súplica y para aquellos por quien no. Pero Dios nos ha encomendado hacer uso de medios prescriptos y previsibles para buscar Su misericordia, y luego Él decide lo que Él quiere. Todo eso es parte del decreto de Dios.
Y Allah es la Fuente de toda fuerza.
li Samáhat ash-Sháij al-‘Allámah ibn Baaz.