Alabado sea Dios.
Alabado sea Allah
Un reporte extraño es aquél en el que hay algún tipo de
singularidad única. Hay muchas clases de singularidades, las dos más
importantes son:
1 – Una singularidad total, con un narrador particular, en cualquier tramo
de su cadena de transmisión, que es el único transmisor de este reporte, y
que nadie más lo narró además de él. Entonces en este caso el reporte
extraño es aquél conocido porque fue transmitido del Profeta (que la paz y
las bendiciones de Allah sean con él) con una sola cadena de transmisión.
Un ejemplo de este tipo de reporte es el reporte “Los actos no son sino
intención”. Este reporte tiene una sola cadena de transmisión correcta. Fue
narrado por Iahia ibn Sa’íd al-Ansari, de Muhámmad ibn Ibrahím at-Taimi, de
‘Ilqimah ibn Waqqás al-Láizi, de ‘Umar ibn al-Jattáb (que Allah esté
complacido con todos ellos).
2 – Singularidad relativa, que significa que uno de los narradores de un
reporte en particular fue el único que lo narró de su shéij, y nadie más lo
narró de este shéij, aún cuando el reporte fuera narrado a través de varias
cadenas de transmisión, pero sólo uno de sus estudiantes narró el reporte de
él.
Un ejemplo de esto es el reporte narrado por ‘Isa ibn Musa Ghunyár, de Abu Hámza as-Sukkari, de al-A’mash, de Abu Aiyúb as-Sajtiyáni, de Muhámmad Ibn Sirín, de Abu Hurairah, quien dijo: “El Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “No llamen a las uvas al-kárm”.
At-Tabaráni dijo: “Nadie narró este reporte de Al-A’mash
excepto Abu Hámzah as-Sukkari.
Véase cómo Abu Hámza as-Sukkari fue el único que narró este reporte de
al-A’mash, por lo tanto la singularidad reside en la relación con su shéij
al-A’mash, pero esto no es una singularidad total, pues el reporte fue
narrado a través de muchas cadenas de transmisión, de varios de los
compañeros del Profeta (que Allah esté complacido con ellos).
Y Allah sabe más.