Alabado sea Dios.
Al Sheij Muhammad ibn ‘Uzaymin (que Allah tenga misericordia con él) se le hizo esta pregunta y dijo:
Llamar a las personas hacia Allah (da’wah) es una obligaciَn comunal (fard kaf aia); si suficientes personas se comprometen a hacerlo, el resto entonces es absuelto de la obligaciَn. Si una persona se da cuenta de que tiene que hacerlo y nadie puede tomar su lugar, entonces es prioritario a la lectura del Corán por aquellos que están afectados por los yinn. Esto ocurre porque los resultados de la da’wah son seguros, mientras que los resultados de la lectura del Corán por aquellos que están afectados por los yinn pueden no ser seguros. Por cuántas personas se ha recitado el Corán y aun así no han sido beneficiadas.
Si este hombre se da cuenta de que tiene que hacer da’wah y nadie puede tomar su lugar, entonces debe hacer da’wah aunque esto signifique no recitar el Corán por aquel que está afectado por los yinn.
Pero si es un asunto de fard kaf aiah, entonces debe observar y decidir qué es lo que más le interesa a las personas. Si es posible combinar los dos- lo cual parece ser el caso- dedicándole un día a uno y otro al otro mientras continْa comprometido en la da’wah, esto es mejor; así podrá beneficiar a sus hermanos Musulmanes que sufren de esta aflicciَn y el trabajo de llamar a las personas hacia Allah podrá continuar al mismo tiempo.
Con respecto al correcto tratamiento para aquellos que están afectados por el yinn, eso varía de un caso a otro, pero lo mejor es recitar el Corán por la persona, tal como las palabras del Corán (interpretaciَn del significado):
Porque esto les recuerda [a los yinn] que no pueden huir de Allah. También debería recitar al-Mu’wadhatayn [las ْltimas dos surahs del Corán] y Qul Huwa Allaahu Ahad [al-Ijlaas 112] y Aleya al-Kursiy [al-Baqarah 255]. También puede predicar como Sheij al-Islam solía hacerlo, diciéndoles “Es haraam lastimar a los Musulmanes o golpearlos”, etc.
Con respecto a aceptar un pago por eso: si no toma el dinero es mejor, pero si lo toma sin haber estipulado el pago de antemano, eso es aceptable. Si aquellos por los cuales se está leyendo no realizan sus tareas para con el lector y él insiste que sَlo continuará leyendo si se le da algo a cambio, no hay nada de malo con eso, ya que esto es lo que la gente del grupo de redada enviado por el Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) hizo. Fue narrado que Abu Sa’id (que Allah se complazca de él) dijo: “Un grupo de compaٌeros del Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) se fue de viaje y viajَ hasta que se detuvo en (la tierra de) una de las tribus árabes. Pidieron hospitalidad pero se negaron a hospedarlos. El jefe de la tribu fue atacado por un escorpiَn, trataron de ayudarlo pero nada funcionَ. Algunos de ellos dijeron: ‘؟Por qué no van hacia esas personas que acampan (cerca nuestro), tal vez encuentren algo allí’. Entonces fueron hacia ellos y dijeron: ‘Oh gente, nuestro jefe ha sido atacado por un escorpiَn y hemos tratado todo pero nada lo ha ayudado. ؟Pueden hacer algo?’ Uno de ellos dijo, ‘Sí, por Allah, recitaré ruqyah por él, pero por Allah. Les pedimos hospitalidad y ustedes no nos dieron la bienvenida, entonces no recitaremos ruqyah por ustedes hasta que nos den algo a cambio’. Luego acordaron que sería un rebaٌo de ovejas’. Luego fue, escupiَ secamente y recitَ sobre él l-hamdu Lillaahi Rabb il-‘Aalamin [Surat al-Faatihah]. (El jefe) se levantَ como si hubiese sido liberado de una cadena, comenzَ a caminar sin secuela alguna de su anterior estado. Les pagaron lo que habían acordado pagarles. Algunos de ellos (es decir, los compaٌeros) luego sugirieron que se dividirían las ganancias entre ellos, pero el que había realizado ruqyah dijo: ‘No las dividan hasta que vayamos con el Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) y le contemos lo ocurrido, luego esperemos y veamos lo que nos dice que hagamos’. Entonces fueron hacia el Mensajero de Allah (paz y bendiciones de Allah sean con él) y le dijeron lo que había ocurrido. El Mensajero de Allah (paz y bendiciones de Allah sean con él) preguntَ: ‘؟Cَmo supieron que es ruqyah (al-Faatihah)?’ Luego agregَ: ‘Han hecho lo correcto. Compartan (el rebaٌo de ovejas) y también denme una parte’. Y el Mensajero de Allah (paz y bendiciones de Allah sean con él) sonriَ”.
(Narrado por al-Bujari, 2276; Muslim, 2201).