Alabado sea Dios.
El mandamiento mencionado en el verso citado por la persona que pregunta es un mandamiento a los compañeros del Profeta y a los creyentes para que recuerden las bendiciones de Al-lah, Su gracia sobre ellos, y Su bondad para con ellos al causar la derrota de sus enemigos y frustrar los planes de sus enemigos.
Ibn Kazir (que Al-lah lo tenga en Su misericordia) dijo: (Aquí, Al-lah, Glorificado y Exaltado sea, está hablando de Sus bendiciones, gracia y bondad hacia Sus siervos creyentes cuando alejó a sus enemigos y les infligió la derrota en el año en que se unieron y formaron una alianza contra ellos, que fue el año de Al Jandaq (la Trinchera)" (Tafsir Ibn Kazir, 6/383).
Cuando hay un mandamiento en el Corán de recordar la bendición de Dios, lo que se quiere decir es recordar en el corazón, recordando la gracia y el favor de Al-lah al otorgarla a Sus siervos; recordarla con las propias palabras, hablando de ella; y recordarla en acciones físicas, al no usar esa bendición de manera que incurra en la ira de Al-lah, Glorificado y Exaltado sea.
Recordar la bendición es dar gracias por ella, y puede hacerse en el corazón, con palabras o con acciones. Cada uno de estos recuerdos confirma a los demás, a menos que la gratitud sea falsa.
El Sheij Muhammad Ibn Al 'Uzaimín (que Al-lah lo tenga en Su misericordia) dijo, comentando sobre el verso (que en español se interpreta así): {Y recuerden las gracias que Al-lah les ha concedido} [Corán 2:231].
“Se puede recordar con el corazón, con palabras y con acciones. Recordarlo con palabras es como decir: ‘Al-lah me ha bendecido con tal y tal’, como Al-lah, Glorificado y Exaltado sea, dice en el Corán (lo que en español se interpreta así): {Y divulga las gracias de tu Señor} [Corán 93:11]. Por lo tanto, debes alabar a Al-lah, Glorificado y Exaltado sea, diciendo: ‘Oh, Al-lah, Te alabo por lo que me has bendecido con riquezas, o una esposa, o hijos, etc. Recordarlo de corazón es recordarlo en nuestro interior y reconocer que es una bendición de Al-lah. Recordarlo con acciones es esforzarse por obedecer a Al-lah y mostrar los efectos de Su bendición sobre ti" (Tafsir Surat Al Baqarah, 3/132).
Al Harawi dijo: "Lo que se entiende por gratitud son tres cosas: reconocer la bendición, luego apreciar la bendición y luego alabar por ella".
Ibn Al Qaiem (que Al-lah lo tenga en Su misericordia) dijo, comentando las palabras de Al Harawi: “En cuanto a reconocerla, eso significa recordarla, darse cuenta de su significado y reconocerla como una bendición en sí misma. Por lo tanto, reconocerla se da en la mente. Apreciarla significa mostrar humildad al recibirla del Dadivoso, expresando nuestra necesidad de él y reconociendo que a uno le llegó sin que la mereciera y sin que pagara ningún precio, viéndose a sí mismo como completamente dependiente de Al-lah. Esta actitud muestra verdadero aprecio. ‘Y luego alabar por ella’: la alabanza al Dadivoso en relación con la bendición es de dos tipos: general y específica. La general es atribuirle las características de generosidad, bondad, magnificencia, etc. La específica es hablar de Su bendición, y afirmar que provino de Él, como Al-lah, Glorificado y Exaltado sea, dice en el Corán (lo que en español se interpreta así): {Y divulga las gracias de tu Señor} [Corán 93:11]”.
Con respecto a este reconocimiento o mención de la bendición que se ordena, hay dos puntos de vista:
El primero es que significa mencionar la bendición y hablar de ella, diciendo: “Al-lah me ha bendecido con tal y tal cosa. Muqátil dijo: ‘Da gracias por lo que Al-lah ha mencionado de las bendiciones para ti en esta sura, como ayudar a los huérfanos, otorgar orientación después del extravío y otorgar autosuficiencia después de la pobreza’".
Hablar de las bendiciones de Al-lah es gratitud, como en el hadiz marfu' de Yábir: "Quien haya recibido un favor, que corresponda; y si no puede corresponder, que elogie [a la persona que le hizo el favor], porque si lo elogia, entonces le ha dado las gracias, pero si lo oculta, entonces ha sido ingrato con él. Y el que finge tener lo que no se le ha dado, es semejante al que lleva dos vestiduras de falsedad" (este hadiz fue citado por Al Bujari en Al Adab Al Mufrad, 215; clasificado como auténtico por Al Albani).
Este hadiz menciona tres tipos de personas: uno que está agradecido por la bendición y alaba por ella; el que la niega y la oculta; y uno que finge ser uno de los bendecidos cuando no es así, por lo que finge tener algo que no se le dio. En otro relato marfu' dice: "Quien no da gracias por lo poco, no dará gracias por lo mucho; y quien no muestra gratitud a la gente, no ha mostrado gratitud a Al-lah. Hablar de la bendición de Al-lah es gratitud, y no hablar de ello es ingratitud. La unidad es una misericordia y la división es un castigo" (narrado por 'Abdul-lah Ibn Ahmad en Zawaa'id Al Musnad, 18449; clasificado como bueno por Al Albani).
El segundo punto de vista es que la mención de la bendición que se ordena en este verso [al final de Surat Ad-Duhá, citado anteriormente] significa llamar a la gente hacia Al-lah, transmitir Su mensaje y enseñar a la comunidad. Muyahid dijo: “Se refiere a la profecía”. Az-Zayáyah dijo: "Significa: Transmite aquello con lo que has sido enviado, y habla de la profecía que Al-lah te ha otorgado". Al Kalbi dijo: "Se refiere al Corán, que Al-lah le ordenó recitar".
El punto de vista correcto es el que incluye a ambas opiniones, porque cada una de ellas es una bendición por la cual se ordena dar gracias y hablar de ella. Manifestarlo es parte de estar agradecido por ello" (Madariy As-Salikin, 2/237).
Ibn Al Qaiem (que Al-lah lo tenga en Su misericordia) dijo con respecto a la gratitud: “Se basa en tres pilares: reconocerla interiormente, hablar de ella exteriormente y usarla para ganarse el beneplácito de Aquel que la concedió y la otorgó" (Al Wabil As-Saieb, p. 5).
Consulte también la respuesta a la pregunta 125984 .
Y Al-lah sabe más.