Alabado sea Dios.
1. La razón por la que se llama Black Friday
El Black Friday es el último viernes de noviembre. Lo que hemos averiguado al respecto es lo siguiente:
El Black Friday, que en el mundo árabe a veces se llama White Friday, es el día que viene inmediatamente después del Día de Acción de Gracias en Estados Unidos, y suele ser a finales de noviembre de cada año. Este día se considera el comienzo de la temporada de compras navideñas.
Ese día, la mayoría de las tiendas ofrecen rebajas y descuentos, y abren sus puertas a partir de las 4 de la madrugada, debido a los enormes descuentos y a que la mayoría de los regalos de Navidad se compran ese día. Un gran número de consumidores se congrega frente a las principales tiendas a primera hora del viernes, esperando a que abran y, cuando lo hacen, la multitud empieza a empujarse y a correr, todos ansioso por adquirir la mayor parte de los productos rebajados.
El nombre de Black Friday se remonta al siglo XIX, ya que estuvo relacionado con la crisis financiera de 1869 en Estados Unidos, que asestó un duro golpe a la economía americana, hasta el punto de que no se pudieron vender los productos y cesó la compraventa de mercancías, lo que provocó una catástrofe económica en América, de la que se recuperó tomando numerosas medidas, como grandes rebajas en los precios de productos y mercancías, para poder venderlos en lugar de que los vendedores se quedaran con ellos, y así reducir al máximo las pérdidas.
A partir de ese día, se convirtió en tradición en Estados Unidos que las grandes tiendas, comercios y agencias ofrecieran grandes rebajas en sus mercancías, que podían llegar hasta el 90% de su valor, para que volvieran a su precio original al final del Black Friday o del mes en que se produjera.
En cuanto a describir este día como "negro", no se debe a aversión o superstición. Más bien fue bautizado así por primera vez en 1960 por la policía de la ciudad de Filadelfia, que le dio este nombre debido a los enormes atascos de tráfico, las aglomeraciones y las largas colas frente a las tiendas en este día, conocido por las compras. Así que el departamento de policía de Filadelfia bautizó este día como “Viernes Negro” para describir el caos de multitudes y tráfico, tanto de peatones como de automóviles.
Además, la palabra “negro” se utiliza mucho con un significado específico en el ámbito de los negocios y la contabilidad, ya que es un indicador de ganancias y de deshacerse de existencias en los almacenes, mientras que el color rojo es indicativo de pérdidas y de gastos que superan las ganancias, o del amontonamiento de mercancías comerciales y la ralentización de los negocios. La razón más probable [por la que se llama Black Friday] es que se utilizaba tinta negra para anotar las ganancias y tinta roja para anotar las pérdidas en los libros de contabilidad estadounidenses y en los registros diarios de ganancias y pérdidas. Como ese día se obtenían grandes ganancias, los libros de contabilidad se llenaron de tinta negra, por lo que ese viernes pasó a llamarse “Viernes Negro”.
2. Reglamento sobre aprovechar los precios reducidos en el llamado Black Friday
No hay nada de malo en comprar artículos en este día y aprovechar los precios bajos y ofertas disponibles, incluso si esto está relacionado con el Día de Acción de Gracias o le sigue, o estas reducciones se ofrecen para que la gente compre regalos de Navidad, siempre y cuando se compre cosas permisibles y no con el propósito de celebrar la Navidad, como regalos, etc.
En la respuesta a la pregunta 145676 explicamos que es permisible comprar bienes durante la temporada navideña, para aprovechar las reducciones en los precios.
3. ¿Es permitido que los comerciantes musulmanes elijan este día para bajar los precios?
Para nosotros no existe el “Viernes Negro” ni el “Viernes Blanco”. El musulmán debe evitar imitar y parecerse a los incrédulos, y debe tener cuidado con la extravagancia y el despilfarro. Las rebajas y las ofertas no deben llevarlo a malgastar su dinero en cosas que no necesita.
Los dueños de las tiendas no deben escoger este día para reducir los precios, pues implica imitación a los incrédulos. Más bien, este día debe ser como cualquier otro, porque el Profeta (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: "Quien imita a un pueblo es uno de ellos" (narrado por Abu Dawud, 4031; clasificado como sahih por Al Albani en Sahih Sunan Abi Dawud).
El Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) prohibió parecerse a ellos en los asuntos habituales, como Muslim (2077) narró de 'Abdul-lah Ibn 'Amr Ibn Al 'As, quien dijo: “El Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) me vio usando dos prendas que habían sido teñidas con cártamo y dijo: ‘Estas son prendas de los incrédulos, no las uses’".
Y fue narrado de Hudhaifah Ibn Al Yaman: “Oí al Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) decir: ‘No usen seda ni brocado, no beban de vasijas de oro o plata, y no coman de platos hechos con lo mismo, porque son para ellos en este mundo y para nosotros en el más allá’” (narrado por Al Bujari, 5426; y Muslim 2967).
Ahmad (22283) narró que Umamah dijo: “El Mensajero de Al-lah (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) se acercó a unos ancianos de los Ansar cuyas barbas eran blancas, y les dijo: ‘Oh, Ansar, tiñan sus barbas de rojo y amarillo; sean diferentes de la Gente del Libro’. Dijimos: ‘Oh, Mensajero de Al-lah, la Gente del Libro usa pantalones y no usa el izar (envoltura de la cintura, prenda inferior)’. El Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: ‘Usen pantalones e izars, y sean diferentes de la Gente del Libro’. Dijimos: ‘Oh, Mensajero de Al-lah, la Gente del Libro usa juffs y no usa sandalias’. El Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: ‘Usen juffs y sandalias, y diferénciense de la Gente del Libro’. Dijimos: ‘Oh, Mensajero de Al-lah, la Gente del Libro se corta la barba y se deja crecer el bigote’. El Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: "Recorten sus bigotes y dejen crecer sus barbas, y sean diferentes de la Gente del Libro".
At-Tirmidhi (2659) narró de 'Amr Ibn Shu'aib, de su padre, de su abuelo, que el Mensajero de Al-lah (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: "No es de los nuestros quien imita a otra gente que no sea la nuestra. No imites a los judíos ni a los cristianos, porque el saludo de los judíos es gesticular con los dedos y el saludo de los cristianos es gesticular con la palma de la mano" (clasificado como hasan por Al Albani).
Si los incrédulos esperan con impaciencia este día cada año, lo señalan para descuentos y anuncios y lo llaman con un nombre especial, no debemos a imitarlos en eso cuando compramos y vendemos, ni señalar este día para reducir los precios de los productos en nuestras tiendas. Pero si un comprador se encuentra con estas rebajas, puede comprar lo que necesite, como ya se ha explicado.
Y Al-lah sabe más.