Alabado sea Dios.
Si eso implica realizar algo que está permitido, como recitar du’aa’s que están establecidos o permitidos en el Islam, o utilizar ruqyah que se establece en el Islam, no hay nada de malo en eso. Pero si una persona aprende magia para contrarrestar la magia o con otros propَsitos, entonces no está permitido y, de hecho, es algo que anula el Islam porque no es posible aprenderlo sin caer en shirk. Esto sucede al adorar a los demonios, al ofrecerles sacrificios y hacerles promesas, y otros tipos de alabanza, y al buscar acercarse a ellos con cosas que ellos quieren, hasta que sirvan a una persona y hagan lo que la persona quiera. Este es el beneficio mutuo al que Allah se refiere en la aleya (interpretaciَn del significado):
“Y el día que él les congregue a todos y les diga: ،Oh, genios! Llevasteis a la perdiciَn a muchos hombres. Y sus secuaces de entre los hombres exclamen: ،Seٌor nuestro! Nos hemos beneficiado mutuamente, y se ha cumplido el plazo que fijaste [para nuestra muerte]. Les dirá: El Fuego será vuestra morada y sufriréis allí eternamente, salvo para quien Allah disponga otra cosa; ciertamente tu Seٌor es Sabio, Omnisciente.”
[al-An’aam 6:128].