Alabado sea Dios.
Debe tenerse en cuenta que Al-lah no prescribe nada que no sea por las mejores razones y que no logre los mejores beneficios. Al-lah es el Omnisciente, Él abarca todas las cosas por Su conocimiento, Él es el Omnisapiente y no prescribe nada excepto por una razón.
En segundo lugar, con respecto a las razones de la prescripción del Zakat, los eruditos han mencionado muchas, incluyendo las siguientes:
- Para completar y perfeccionar el Islam de la persona, porque es uno de los pilares del Islam. Si lo cumple, su Islam está completo. Sin dudas, este es un objetivo importante para todo musulmán, y todo musulmán creyente se esforzará por perfeccionar su fe.
- Es un indicador de la sinceridad de la fe, porque el ser humano ama la riqueza, y no abandonará nada de lo que ama salvo por algo que ame de igual manera o, más bien, por algo que ame aún más. Por eso se lo llama también Sadaqah, porque es un indicador de la sinceridad (sidq) del deseo de una persona de complacer a Al-lah, Glorificado Sea.
- Purifica el carácter de quien lo entrega, de modo que se salva de ser un avaro y es incluido entre los generosos; porque si se acostumbra a dar, ya sea conocimiento o riqueza, o utiliza su posición para ayudar a los demás, esa entrega se convertirá en una de sus característica y será parte de su naturaleza, tanto que se sentirá mal el día que no lo haga. Del mismo modo, el que se ha acostumbrado a ser generoso se sentirá ansioso si no entrega una parte de su riqueza, o si no utiliza su posición para ayudar a los demás un día.
- Alegra el corazón. Si una persona da algo, especialmente dinero, siente alegría. Esto es algo que está probado, pero que está sujeto a la condición de dar con gusto y buena disposición, no a regañadientes.
Ibn Al Qaiem dijo en Zad Al Ma’ad que el dar y la generosidad son medios para alegrar el corazón, pero nadie se beneficia con esto excepto quien lo haga con alegría y voluntariamente, y que entregue su riqueza desde el corazón antes de que la entregue con su mano. En cuanto al que da con su mano, pero no con su corazón, nunca se beneficiará con esa caridad.
- Eleva a la persona al rango de los verdaderos creyentes. “Ninguno de ustedes ha de creer verdaderamente hasta que quiera para sus hermanos lo quiere para sí mismo”. Así como uno quiere recibir dinero para satisfacer sus necesidades, debe también querer dárselo a su hermano, de este modo se perfeccionará la fe.
- Es uno de los medios para entrar al Paraíso, porque el Paraíso es para aquellos que “dicen buenas palabras, difunden el (saludo del) salam, alimentan a los hambrientos y rezan por las noches cuando las personas duermen”. Y todos nosotros nos esforzamos para entrar al Paraíso.
- Hace que la sociedad musulmana sea una sola familia, en la que los que poseen los medios muestran compasión a los que no los poseen, y los ricos a los que están en dificultades. Así, un individuo siente que tiene hermanos a los que debe hacer el bien, del mismo modo en que Al-lah ha sido bueno con él. Al-lah dice (lo que en español se interpreta así): {Sé generoso [con tu prójimo] como Al-lah lo es contigo}
[Corán 28:77].
De este modo, la Ummah musulmana se convierte en una sola familia. Esto es lo que se conoce hoy en día como "seguridad social", pero el Zakat es mejor que eso, porque una persona lo paga como un deber obligatorio y beneficia así a sus hermanos.
- Extingue las llamas de la rebelión entre los pobres, porque una persona pobre puede ser provocada al ver a un hombre que puede manejar cualquier auto que desee, vivir en un palacio y comer la comida que desee, mientras ella no tiene medios para transportarse salvo sus pies, y solo puede dormir en el piso, etc.; sin duda, sentirá resentimiento en su corazón.
Pero si los ricos son generosos con los pobres, se evitarán esos sentimientos de confrontación y los pobres dirán: “Tenemos hermanos que se acuerdan de nosotros en tiempos de dificultad”, entonces sentirán amor por los ricos.
- Previene crímenes financieros, como robos, atracos, etc., porque los pobres tendrán lo suficiente para satisfacer sus necesidades, y sentirán empatía por los ricos porque están compartiendo su riqueza, y verán que los tratan bien, por lo tanto, no caerán en la necesidad de delinquir.
- La salvación del Infierno en el Día de la Resurrección. El Profeta (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “Cada persona se encontrará bajo la sombra de su caridad el Día de la Resurrección” (clasificado como sahih por Al Albani en Sahih Al Yami’, 4510). Y mencionó a los que Al-lah protegerá con Su sombra el Día en que no habrá sombra más que la Suya: “… un hombre que hace caridad y la oculta tanto que su mano izquierda no sabe que es lo que su mano derecha está haciendo (de caridad)”.
- Incentiva al individuo a aprender sobre las leyes de Al-lah, porque nunca pagará el Zakat sin haber aprendido sobre sus reglas, como los tipo de riquezas que están sujetas al Zakat, quiénes tienen derecho a recibirlo y demás información necesaria.
- Purifica la riqueza, por lo tanto, esta crecerá literal y metafóricamente. Si una persona da en caridad algo de su riqueza, será protegido de sus problemas, y Al-lah aumentará su provisión. Por eso se encuentra expresado en el hadiz: “La riqueza nunca disminuye debido a la caridad” (narrado por Muslim, 2588). Esto es algo comprobado, porque la riqueza de un avaro puede ser alcanzada por algo que la destruya o destruye la mayor parte de ella, como el fuego, grandes pérdidas, o una enfermedad que lo obliga a seguir un tratamiento muy costoso.
- Es un medio para que desciendan bendiciones. En el hadiz se expresa: “Si alguien niega el Zakat de su riqueza, es retenida la lluvia en el cielo” (clasificado como sahih por Al Albani en Sahih Al Yami’, 5204).
- “La caridad entregada en secreto apaga la ira del Señor”, según fue narrado por el Mensajero (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) y clasificado como sahih por Al Albani en Sahih Al Yami’, 3759).
- Evita una mala muerte.
- Lucha contra la calamidad que proviene del cielo y previene que llegue a la tierra.
- Expía los pecados. El Mensajero (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “La caridad expía los pecados así como el agua extingue el fuego” (clasificado como sahih por Al Albani en Sahih Al Yami’, 5136. Ver: Ash-Sharh Al Mumti’, 6/4-7).
Y Al-lah sabe más.