Alabado sea Dios.
Los siete cielos están poblados por los ángeles, como Dios dijo (traducción del significado):
“Los cielos están casi por hendirse [por la grandiosidad de Allah] y los Ángeles glorifican con alabanzas a su Señor y piden perdón por quienes están en la Tierra. ¿Acaso no es Allah Absolvedor, Misericordioso?” (ash-Shura, 42:5).
“Pero si se ensoberbecen [y rechazan adorar a Allah] sabed que los [Ángeles] que están próximos a su Señor Le glorifican por la noche y el día, y no se cansan de ello” (Fússilat, 41:38).
At-Tirmidi (2312) narró que Abu Darr (que Dios esté complacido con él) dijo: “Él Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Verdaderamente, yo veo lo que ustedes no ven y oigo lo que ustedes no oyen. El cielo cruje y debe crujir, porque no hay espacio en él del ancho de cuatro dedos sin que haya allí un ángel, postrándose ante Dios. Por Dios, que si ustedes supieran lo que yo sé, reirían poco y llorarían mucho, y nunca disfrutarían de las mujeres en sus camas, y andarían por las calles rogándole a Dios”. Clasificado como bueno por Al-Albani en Sahih At-Tirmidi.
En las dos colecciones de reportes más auténticos se ha narrado de Málik ibn Sa'sa'ah, en la historia del Viaje Nocturno: “… luego el Templo Frecuentado (al-bait al-ma’mur) fue elevada para mí, y yo dije: “Oh, Gabriel, ¿qué es esto?” Él dijo: “Es el Templo Frecuentado. Cada día setenta mil ángeles ingresan en él, y cuando salen jamás regresan”. Narrado por al-Bujari (3207) y Muslim (164).
Esto es lo que se ha narrado acerca de los cielos. Sobre los planetas y otras galaxias, la respuesta es: Dios sabe más.