Alabado sea Dios.
Primero:
Sin duda, las pesadillas que ve esta hermana provienen del maldito Shaytaan, que está tratando con todas sus fuerzas de evitar que la gente siga a la verdadera religiَn y de alejarlos del Seٌor a Quien adoran, y quiere causar pena a los creyentes. Pero sus conspiraciones en contra de los piadosos amigos cercanos de Allah son débiles e insignificantes, especialmente en contra de aquellos que se fortalecen a sí mismos con la ruqiah y los dhikrs como está prescrito en la shari’ah durante el día y la noche.
Segundo:
Usted debe saber que la mejor manera por la que un musulmán puede protegerse de Shaytaan es recordando a Allah. De acuerdo al Hadiz narrado por Tirmidhi (2863), Allah le encomendَ al Profeta Yahya ibn Zakariya (la paz sea con él) que le dijera a los Hijos de Israel que hicieran cinco cosas, incluyendo la siguiente: “Te encomiendo que recuerdes a Allah, porque su ejemplo es como el de un hombre cuyo enemigo lo persigue, hasta que se encuentra con una sَlida fortaleza donde se protege de él. De manera similar, una persona no se puede proteger de Shaytaan excepto al recordar a Allah”. Clasificado como sahih por al-Albaani en su libro Sahih al-Tirmidhi.
Si el musulmán le teme a Allah en todos sus asuntos, se adhiere a aquello que Allah le ha encomendado, evita lo que él ha prohibido, recuerda a Allah constantemente, rezando, ayunando y a través de otras clases de adoraciَn, se fortifica a sí mismo leyendo el Corán durante el día y la noche, en voz alta y en silencio, recita regularmente los wirds y dhikrs prescritos en el Corán para la maٌana y el atardecer, y cuando come, toma, se viste y se va a dormir, entonces Shaytaan se alejará de él derrotado, y no tendrá poder para perjudicarlo. Como puede ser de otra manera cuando Allah dice en el Corán (interpretaciَn del significado):
“Los creyentes combaten por la causa de Allah. Los incrédulos en cambio, combaten por la del Seductor. Combatid contra los secuaces de Satanás, y [sabed que] las artimaٌas de Satanás son débiles”.
[4:76]
Shaytaan sَlo se acerca a aquellos que se encuentran lejos de su religiَn y del Corán. Shaytaan puede tratar de desviar a los honrados del camino correcto, para arruinar sus vidas, su compromiso religioso y sus intereses mundanos. Pero se debe buscar la protecciَn de él de la forma descripta anteriormente. También puede consultar los libros de dhikr tal como al-Adhkaar por al-Nawawi; ‘Aml al-Yawm wa’l-Laylah por al-Nasaa’i; ‘Aml al-Yawm wa’l-Laylah por Ibn al-Sunni; y otros libros de dhikr que hacen referencia a este tema, o libros de Sunnah en general. Si hace eso, esperamos que su situaciَn mejore y usted encuentre paz en su mente, y Allah cambiará su situaciَn para bien.
Entre los dhikrs que le aconsejamos que recite regularmente se encuentran los siguientes:
1- Adhkaar para la maٌana y el atardecer.
(a)Recitar todas las tardes las palabras “A’udhu bi kalimaat Allaah il-taammah min sharri ma Jalaqa (Busco refugio en las palabras perfectas de Allah de lo malo que existe en todo lo creado)”.
Fue narrado que Abu Hurayrah dijo: Un hombre fue hacia el Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) y dijo: “Oh Mensajero de Allah, estoy sufriendo por culpa de un escorpiَn que me picَ ayer”. él dijo “Si hubieses dicho en la tarde “A’udhu bi kalimaat Allaah il-taammah min sharri ma Jalaqa (Busco refugio en las palabras perfectas de Allah de lo malo que existe en todo lo creado)”, no te habría lastimado.
Narrado por Muslim.
En realidad, el Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) nos alentَ a decirlo en cada lugar donde paráramos (cuando viajamos).
Fue narrado que Jawlah bint Hakim al-Salamiyyah dijo: Escuché al Mensajero de Allah (paz y bendiciones de Allah sean con él) decir: “Quien pare en un lugar y diga: ‘A’udhu bi kalimaat Allaah il-taammah min sharri ma Jalaqa (Busco refugio en las palabras perfectas de Allah de lo malo que existe en todo lo creado)’, nada lo lastimará hasta que abandone ese lugar”.
Narrado por Muslim, 2708.
(b)Fue narrado que ‘Uzmaan ibn ‘Affaan (que Allah se complazca de él) dijo: El Mensajero de Allah (paz y bendiciones de Allah sean con él) dijo: “No hay persona que diga en la maٌana y en el atardecer de cada día ‘Bismillaah al ladhi laa yadurru ma’a ismihi shay’un fi’l-ard wa la fi’l-sama’ wa huwa al-sami’ ul-‘alim (En el nombre de Allah en cuyo nombre nada perjudica en la tierra o en el cielo, y él todo lo oye, todo lo sabe)’
Narrado y clasificado como sahih por al-Tirmidhi, 3388; también narrado por Ibn Maayah, 3869. Clasificado como sahih por al- Albaani en su libro Sahih Ibn Maayah.
(c)Recitar Aleya al-Kursiy y al-Mu’awwidhaat antes de ir a dormir.
Fue narrado que Abu Hurayrah dijo: “El Mensajero de Allah (paz y bendiciones de Allah sean con él) me puso a cargo de la protecciَn del zakaat de Ramadán. Alguien vino hacia mí y comenzَ a tomar puٌados de comida. Lo sujeté y le dije: ‘Te llevaré con el Mensajero de Allah (paz y bendiciones de Allah sean con él)’. él dijo: ‘Te enseٌaré algunas palabras a través de las cuales Allah te beneficiará’. Yo dije: ‘؟Cuáles son?’. él dijo: ‘Al ir a la cama recita esta aleya: ،Allah! No existe nada ni nadie con derecho a ser adorado excepto él, Viviente, se basta a Sí mismo y se ocupa de toda la creaciَn. No Lo toma somnolencia ni sueٌo. Suyo es cuanto hay en los cielos y la Tierra. ؟Quién podrá interceder ante él sino con Su anuencia? Conoce el pasado y el futuro; y nadie abarca de Su conocimiento salvo lo que él quiere. Su Trono se extiende en los cielos y en la Tierra, y la custodia de ambos no Le agobia. Y él es Sublime, Grandioso.” [2:255. Luego Allah dispondrá un guardia que permanecerá contigo y ningْn demonio se acercará a ti hasta la maٌana’. El Mensajero de Allah (paz y bendiciones de Allah sean con él) me preguntَ: ‘؟Qué hizo tu prisionero anoche?’. Dije: ‘Oh Mensajero de Allah, me enseٌَ algo, y afirmَ que Allah me beneficiaría con eso’. él dijo: ‘؟Qué fue?’. Dije: ‘Me enseٌَ a recitar Aleya al-Kursiy al ir a la cama, y dijo que ningْn demonio se acercaría a mí hasta la maٌana, y que Allah dispondría un guardia para mí que se quedaría conmigo’. El Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) dijo: ‘Te dijo la verdad, aunque es un mentiroso. Ese era Shaytaan’.”
Narrado por al-Bujari, 3101; Muslim, 505.
Hay muchos dhikrs como esos; no tenemos espacio aquí para mencionarlos todos.
Tercero:
Con respecto al hasad (envidia) y el mal de ojo del cual usted habla, puede ser que esta situaciَn que sufre sea causada por el mal de ojo o envidia (hasad). La protecciَn contra eso se debe buscar recitando los dhikrs prescritos en la shari’ah.
Fue narrado que Ibn ‘Abbaas (que Allah esté satisfecho con él) dijo: “El Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) solía buscar refugio en Allah para al-hasan y al-Husayn. Dijo: ‘Tu padre [es decir, Ibrahim] solía buscar refugio en Allah para Ismaa’il e Ishaaq con estas palabras: A’udhu bi kalimaat Allaah al-taammah min kulli shaytaanin wa haammah wa min kulli ‘aynin laammah (Busco refugio en las palabras perfectas de Allah, de todos los demonios, de todos los animales e insectos ponzoٌosos y del mal de cada ojo)’.”
Narrado por al- Bujari, 3191.
Con respecto al remedio:
Fue narrado de Ibn ‘Aabaas que el Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) dijo: “El mal de ojo es real, y si algo cambiara el decreto divino (al-qadar), sería el mal de ojo. Cuando se le pide que tome un baٌo (para proveer una cura) para la influencia del mal de ojo, debe tomar un baٌo”.
Narrado por Muslim, 2188.
Si usted sabe que una persona determinada le ha echado el mal de ojo, entonces debe pedirle que haga el ghusl y el udu’ y debe verter el agua de ese baٌo sobre usted misma. La forma en que esto se debe hacer ha sido explicada por Ibn al-Qayyim, quien dijo:
En Sunan Abi Dawud fue narrado que ‘Aa’ishah (que Allah se complazca de ella) dijo: Al ‘aa’in (aquel que le ha echado el mal de ojo a otro) se le ordenará que haga el wudu, y entonces el ma’in (aquel a quien se le ha echado el mal de ojo) hará el ghusl con esa agua.
En Bujârî y Muslim se narrَ que ‘Aa’ishah dijo: “El Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) me encomendَ o nos encomendَ recitar ruqiah para protegernos del mal de ojo.”
Al-Tirmidhi narrَ de Sufyaan ibn ‘Uyayanah de ‘Amr ibn Dinaar de ‘Urwah ibn ‘Aaamir de ‘Ubayd ibn Rafaa’ah al-Sarqi que Asma’ bint Umays dijo: “Oh Mensajero de Allah, los hijos de Ya’far han sido afectados por el mal de ojo, ؟debemos recitar ruqiah por ellos?”. él dijo: “Sí, si algo cambiara el decreto divino, sería el mal de ojo”. Al-Tirmidhi dijo: es un hadiz hasan sahih. Luego mencionَ el hadiz que describía como ‘Aamir ibn Rabi’ah afligía a Sahl ibn Hunayf con mal ojo, y el Profeta (paz y bendiciones de Allah sean con él) le encomendَ a ‘Aaamir que hiciera el ghusl.
Entonces lavَ su cara, sus manos, sus antebrazos, sus rodillas y los costados de sus pies, y el interior de su izaar (falda) en la vasija. Luego esa agua fue vertida sobre él, y un hombre la vertiَ sobre su cabeza y espalda por detrás. Le hizo eso a él, luego Sahl se levantَ y se uniَ a la gente totalmente curado.
Al-Tibb al-Nabawi, pág. 127-129.
Para más informaciَn sobre el mal de ojo y las maneras de ocuparse de ello y protegerse a uno mismo, por favor vea la pregunta no. 20954.
Y Allah sabe más.