Alabado sea Dios.
Primero, las partes del cuerpo que se deben lavar en el wudú están mencionadas en el versículo en el cual Al-lah dice: {¡Oh, creyentes! Cuando se dispongan a hacer la oración lávense el rostro y los brazos hasta los codos, pasen las manos [húmedas] por la cabeza y [laven] los pies hasta los tobillos} [Corán 5:6].
Al-lah, Altísimo, ha hecho obligatorio, luego del rostro, lavar los brazos hasta los codos, y esto no se puede hacer si no se comienza desde los dedos hasta los codos. Aquel que se limita a lavar los brazos desde las muñecas, no ha cumplido con tal obligación.
En cuanto a lavarse las manos al comienzo del wudú, esto es sunnah y no es suficiente para cumplir con la acción obligatoria de acuerdo con la opinión de la mayoría de los sabios, contraria a la postura hanafi.
La opinión mayoritaria indica que es obligatorio lavar las partes del cuerpo en el orden correcto que se menciona en el versículo: lavar el rostro, luego los brazos, luego la cabeza, luego los pies.
Basado en eso, no es válido considerar que lavarse las manos al comienzo del wudú es suficiente y uno puede no lavarlas nuevamente con el resto del brazo, porque de esa forma no estaría siguiendo la secuencia apropiada. Lo que se requiere es lavar el brazo entero después del rostro.
En resumen, si la persona hace el wudú y se lava las manos, luego remoja su boca y nariz, lava su rostro, y luego lava sus brazos desde las muñecas hasta los codos, su wudú no es válido de acuerdo con la mayoría de los sabios.
Le preguntaron al Sheij Ibn Yibrin (que Al-lah lo preserve): “¿Cuál es el veredicto sobre aquel que se lava los brazos desde las muñecas hasta los codos, sin lavarse las manos, pensando que porque se lavó las manos al comienzo del wudú eso es suficiente? ¿Debe repetir el wudú?”
Él respondió: “No es permisible lavar sólo el antebrazo, sin las manos, al hacer el wudú. Cuando termina de lavar su rostro debe comenzar con los brazos, y esto lo debe hacer desde la punta de los dedos hasta el codo, incluso si lavó sus manos antes de la cara, porque lavarlos al comienzo es sunnah, y hacerlo luego del rostro es obligatorio. Si una persona solo lava sus brazos desde las muñecas hasta el codo, no ha completado su wudú de la forma requerida, y debe repetirlo luego de terminar, o debe lavar lo que omitió si solo ha pasado un corto lapso de tiempo (desde que lo completó), entonces debe lavar sus manos y todo lo que viene después” (Al-Lu’lu’ Al Makin min Fatawa Shaij Ibn Yibrin, p. 77).
El Sheij Ibn ‘Uzaimin (que Al-lah lo tenga en Su misericordia) dijo: “Aquí debemos señalar algo que muchos ignoran cuando lavan sus brazos desde sus muñecas hasta los codos, pensando que ya se habían lavado las manos antes del rostro, pero esto no es correcto. Es esencial lavarse los brazos desde las puntas de los dedos hasta los codos” (Al-Liqa’ Ash-Shahri, 3/330).
Y Al-lah sabe más.