Alabado sea Dios.
Alabado sea Allah.Es permisible que una persona hable de aquello con lo que Allah le ha bendecido, ya sea con conocimiento o memorización del Corán, si esto es hecho para evitar un mal o servir a los intereses de la gente, como es el caso de alguien que quiera incentivar a los demás a memorizar el Corán y buscar su conocimiento, esto no se considera que sea una forma de actitud presuntuosa, la cual está prohibida. Allah nos dijo que Yusuf (la paz sea con él) dijo (traducción del significado):
“Dijo José: Nombradme administrador de los almacenes de semillas del país, que yo en verdad soy un guardián conocedor” (como ministro de finanzas de Egipto). (Yusuf 12:55).
‘Abd Allah ibn Mas’ud (que Allah esté complacido con él) dijo: “Recité más de setenta capítulos del Corán al Mensajero de Allah (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él), y sus compañeros (que Allah esté complacido con ellos) sabían que yo era quien mejor conocía el Libro de Allah entre ellos. Si hubiera sabido que alguien lo conocía mejor que yo, habría ido con él”. Narrado por Muslim (4502).
An-Nawawi (que Allah tenga misericordia de él) dijo, comentando este hadiz: “Este hadiz muestra que es permisible que una persona mencione virtudes o conocimientos que tiene si es necesario.
Con respecto a la prohibición de ensalzarse y vanagloriarse uno mismo, esto refiere a hacerlo innecesariamente, cuando el motivo es simplemente presumir y atraer la admiración de los demás. Pero la gente prominente en ocasiones recuerda sus méritos cuando es necesario, tales como servir a algún interés del prójimo, o incentivarlos a adquirir el conocimiento. Un ejemplo de cómo servir a los intereses del prójimo es cuando Yusuf (la paz sea con él) dijo: “Nombradme administrador de los almacenes de semillas del país, que yo en verdad soy un guardián conocedor”, y un ejemplo de cómo evitar un daño es cuando ‘Uzmán (que Allah esté complacido con él) dijo, cuando estaba bajo el sitio que había proporcionado equipamiento al ejército que iba para Tabuk, y había excavado la fuente de Rumah. Y un ejemplo de incentivar a otros es cuando Ibn Mas’ud dijo esto (las palabras citadas anteriormente), y cuando Sáhl ibn Sa’d dijo: “No hay nadie que tenga más conocimiento que yo”, y cuando alguien más dice “Has recurrido a un experto”, etcétera”. Fin de la cita.
Pero cuando una persona es capaz de ocultar lo que sabe, es mejor, porque mostrarlo y hablar acerca de ello puede abrir la puerta al Shaitán y hacerlo caer en el orgullo y la soberbia.
Y Allah sabe más.