Alabado sea Dios.
El principio básico es que el tratamiento y cuidado de las mujeres debe ser realizado por doctoras y enfermeras mujeres exclusivamente, a causa de lo que implica el tratamiento físico, como mirar y entrar en contacto con el cuerpo del paciente. Pero si no hay ningún doctor o enfermera disponible, es permisible que el trabajo sea realizado por un varón.
Encontrar enfermeras mujeres es algo sencillo y que se hace fácilmente si la gente que está a cargo del hospital quiere hacerlo. Es triste y desafortunado que algunos hospitales deleguen el cuidado de los pacientes varones a enfermeras mujeres y viceversa. Esto es indicativo de una debilidad en el compromiso religioso y una falta de supervisión apropiada, y una falta de atención a las normas del Islam.
Por eso te aconsejamos esforzarte duro para limitar tu trabajo al tratamiento de hombres solamente, aún si eso significa derivar a un paciente. Si eso no es posible, entonces no hay nada de malo en que continúes tu trabajo y des tratamiento a una mujer, con la condición de que te apegues a los siguientes lineamientos generales:
1 – No mires a nadie más de lo necesario, y teme a Dios. Ciertamente Dios te está mirando y registrando tus obras.
2 – No toques al paciente con la piel desnuda. Utiliza guantes durante el tratamiento.
3 – Si hay conversación, mantenla concentrada en lo que necesita el paciente.
4 – Si es posible, no estés a solas con una paciente mujer en una sala de exámenes o de rayos X. Un pariente debería acompañarla a ella, u otra enfermera debería acompañarte a ti, cuya presencia rompa la tensión de quedarse a solas.
Consulta también la respuesta a la pregunta No. 9989 y 112061.
Le pedimos a Dios que te perdone y te facilite las cosas.
Y Allah sabe más.