Alabado sea Dios.
Este reporte fue narrado por At-Tabarani en Mu’yam al-Kabir (17/117) a través de ‘Abder-Rahmán Ibn Shuraik quien dijo: “Mi padre me dijo de ‘Abdullah Ibn ‘Isa, de Zaid Ibn ‘Ali, de ‘Utbah Ibn Gazuán, del Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) que él dijo: “Si uno de ustedes pierde algo o necesita ayuda y está en una tierra en la cual no hay gente, entonces que diga “Oh, servidores de Dios, ayúdenme; Oh, servidores de Dios, ayúdenme”, porque Dios tiene servidores a los que nosotros no vemos”.
Hay tres problemas con este reporte, lo cual significa que es débil. Estos problemas son:
1 – ‘Abder-Rahmán Ibn Shuraik Ibn ‘Abdullah an-Naja'i al-Kufi. Abu Hatim dijo de él: “Es poco confiable narrando reportes”. Fin de la cita de Al-Yarhwa at-Ta’dil, 5/244.
Ibn Hibbán lo mencionó en Az-Ziqat (8/375) y dijo: “En ocasiones comete errores”.
Al-Hafiz dijo en At-Taqrib (pág. 342): “Es honesto, pero comete errores”.
Ver también Tahdib at-Tahdib, 6/176.
2 – Shuraik Ibn ‘Abdullah an-Naha'i. Los eruditos han resaltado su pobre memoria y falta de precisión. Al-Hafiz dijo sobre él: “Es honrado, pero comete muchos errores, su memoria cambió cuando fue designado como juez en Kufah”. Fin de la cita de Taqrib at-Tahdib, pág. 266.
3 – Zaid Ibn ‘Ali Ibn al-Husein no conoció a ‘Utbah Ibn Gazwán ni lo oyó de él. Entre la muerte de ‘Utbah y el nacimiento de Zaid hubo aproximadamente 60 años. Ver Tahdib at-Tahdib, 2/249; 4/64.
Por eso Al-Haizami dijo acerca de este reporte: “Fue narrado por At-Tabarani y sus hombres eran considerados como confiables, aun cuando algunos de ellos contenían algunas falencias. Pero Zaid Ibn ‘Ali no conoció a ‘Utbah”. Fin de la cita de Mayma' az-Zawa’id, 10/93.
Hay un reporte que lo corrobora en el reporte de Ibn Mas’ud: “Si vuestra montura desaparece en un paraje desolado, llámenla diciendo “Oh, siervos de Dios, tráiganmela de vuelta”, porque Dios tiene ángeles presentes en la Tierra que la traerán de vuelta”.
Este reporte fue narrado por At-Tabarani en Al-Mu’yám al-Kabír (10/217); por Abu Ya’la en su Musnad (9/177).
También es débil, fue clasificado como tal por Al-Haizami en Mayma’ az-Zawá’id (10/132); por Al-Háfiz Ibn Háyar en Shárh al-Adkar (5/150); por Al-Háfiz as-Sajjawi en Al-Ibtihach bi Adkar al-Musáfir wa al-Hách (pág. 39).
El shéij Al-Albani discutió este reporte en detalle en As-Sílsilah ad-Da’ifah, donde dijo: “Además del hecho de que el reporte es débil, no hay nada en el texto que sugiera que sea permisible buscar la ayuda de los fallecidos, tal como de los santos y de los piadosos, porque claramente indica que a lo que se refiere con ‘servidores de Dios’ es a criaturas que no son humanas.
Afirmamos esto basados en el hecho de que el primer reporte dice: “… porque Dios tiene presencias en la Tierra que te lo traerán de vuelta”, y en este reporte dice: “Dios tiene servidores que nosotros no vemos”.
Esta descripción solamente puede aplicarse a los ángeles y a los genios, ellos son aquellos a quienes nosotros usualmente no vemos. Por lo tanto, no es permisible incluir con ellos a los musulmanes a quienes ellos llaman ‘hombres de lo oculto’, tales como a los santos y los piadosos, ya sea que estén vivos o muertos. Buscar la ayuda de ellos es una forma de idolatría, porque ellos no pueden oír la súplica, y aun si pudieran oírla, no son capaces de responderla ni de cumplir con lo que se les pide.
Esto está claramente afirmado en muchos versos del Sagrado Corán, incluido el pasaje en el cual Dios dijo (traducción del significado):
“…pero aquellos ídolos que invocáis fuera de Él no poseen absolutamente nada, ni siquiera el pellejo de un carozo de dátil.
14. Si los invocáis, no oyen vuestra invocación, y si oyeran no podrían responder; el Día de la Resurrección negarán que los hayáis adorado, y no te informará nadie tan bien como Dios, Quien está bien informado de todo” (Fátir, 35:13-14)”. Fin de la cita de As-Sílsilat al-Ahadiz ad-Da’ifah wa al-Mawdu’ah, 656.
Y Allah sabe más.