Alabado sea Dios.
En primer lugar, no es permisible cometer fraude para obtener dinero y asistencia del Estado en la forma en que tu madre lo hizo, porque implica mentir y consumir las riquezas ajenas ilícitamente. La carga de este pecado se aplica solamente a la persona que lo hace y a quien lo incentiva, pero no hay ningún pecado sobre ti, porque eras una niña pequeña en ese momento, y cuando lo supiste objetaste lo que tu madre hizo. Debes tener cuidado y evitar tomar nada de este dinero. Si tu padre obtiene ganancias lícitas que se mezclan con este dinero, es permisible para ti comer y beber lo que necesites.
Elogiamos a Dios por haberte permitido encontrar un trabajo por medio del cual puedas gastar en tu propia manutención y no necesites el mantenimiento de tu padre.
En segundo lugar, no necesitas devolver el dinero del gobierno, pero debes aconsejar a tus padres que cesen de apropiárselo. Lo que fuera que ellos tomaron antes de que supieran que estaba prohibido, no deben devolverlo, pero lo que fuera que hayan tomado después de saber que era algo prohibido, deben devolverlo al Estado, y si no pueden, deben librarse de él dándole al pobre y al necesitado.
Le pedimos a Dios que te incremente en conocimiento y guía.
Y Allah sabe más.