Alabado sea Dios.
Si un hombre muere y tiene esposa, un hijo, una hija, padre y madre, la herencia debe dividirse de la siguiente forma:
La esposa hereda un octavo, porque Dios dijo (traducción del significado):
“Si tuvierais hijos, entonces un octavo de lo que dejaseis, luego de cumplir con vuestros legados y deudas” (an-Nisá' 4:12).
El padre obtiene un sexto, y la madre obtiene un sexto, porque Dios dijo (traducción del significado):
“Para los padres, un sexto de la herencia para cada uno, si el fallecido deja hijos” (an-Nisá' 4:11).
El resto van al hijo y la hija, y el varón obtiene una parte igual a la de dos mujeres, porque Dios dijo (traducción del significado):
“Dios dictamina respecto a [la herencia de] vuestros hijos: Al varón le corresponde lo mismo que a dos mujeres [esto es debido a que no pesa sobre la mujer la manutención de los hijos y la familia]” (an-Nisá' 4:11).
Para dividir la herencia entre sus herederos, debe ser dividida en veinticuatro partes iguales, de las cuales:
- La madre obtiene cuatro
- El padre obtiene cuatro
- La esposa obtiene tres
Las trece partes sobrantes van a manos del hijo y de la hija, y el varón obtiene el doble que la muchacha. Los herederos pueden acordar vender la casa y el automóvil y dividir el dinero entre ellos, o pueden conservarlos para alquilarlos y compartir entre ellos los ingresos.
Y Allah sabe más.