Alabado sea Dios.
Si das en caridad parte del dinero que tu padre te dio para cubrir tus gastos y necesidades, ten la esperanza de que, por la gracia y la generosidad de Allah, tendrás recompensa por esta acción y tu padre, quien ganó este dinero y lo gastó en ti, también tendrá recompensa.
Al-Bujari (1440) y Muslim (1024) narraron que A‘ishah (Allah esté complacido con ella) relató: El Profeta (paz y bendiciones sean con él) dijo: “Si una mujer da parte de la comida que está en casa de su esposo sin causarle ningún daño, tendrá recompensa por eso y él tendrá una recompensa similar porque trabajó por esa comida. La recompensa de ella es por dar ese alimento en caridad. La persona que almacenó la comida tendrá una recompensa similar, sin que disminuya en lo absoluto la recompensa de ninguno de ellos.
Sin embargo, esto se aplica solamente si ese gasto no causa ningún daño a la riqueza del verdadero propietario, como podría ser el caso si el hijo o la esposa gastan demasiado. En esta situación siempre se debe pedir el permiso del propietario de la riqueza.
Ver: Fath al-Bári (3/303).
Y Allah sabe mejor.