Alabado sea Dios.
En primer lugar, no es permisible para el musulmán recurrir a los manosantas, curanderos, adivinos de la suerte, y otra clase de charlatanes. Quien recurra a ellos y les pida algo está atribuyéndoles poderes que sólo Dios tiene y está descreyendo del mensaje del Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él), y quien cree que ellos tienen conocimiento de lo oculto o son capaces de perdonar los pecados o conceder los deseos de la gente ciertamente no cree en el mensaje del Islam, como se ha narrado en diversos reportes autenticados.
Está severamente prohibido para el musulmán en la Tradición Profética utilizar toda clase de amuletos, medallas, estampitas o estatuillas religiosas, y tanto los reportes como el Corán contienen claras advertencias contra quienes los usen.
Se narró de ‘Ukbar Ibn ‘Aamir al-Yuhani que un grupo de personas llegaron al Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) a jurarle fidelidad, y él aceptó y les tomó juramento a nueve de ellos, excepto a uno a quien no se lo aceptó. Ellos le preguntaron: “Oh, Mensajero de Dios, ¿por qué aceptaste el juramento de fidelidad de nueve pero rechazaste el de uno de ellos?”. Él respondió: “Está usando un amuleto, y quien usa un amuleto ha asociado algo a Dios que no le corresponde”. Entonces el hombre se lo quitó, y entonces él aceptó que le jurara fidelidad”. Narrado por Áhmed, 16969. Clasificado como auténtico por al-Albani en As-Sílsilah as-Sahihah, 492.
En la respuesta No. 10543 encontrarás detalles de los reportes que se han narrado acerca de los amuletos y las normas islámicas sobre ellos, y también sobre los amuletos que contienen versos del Corán.
En esa respuesta hemos citado que el shéij Suleimán Ibn ‘Abd el-Wahháb dijo: “Esta diferencia de opinión entre los eruditos fue acerca de colgarse un collar que contenga el Corán, o los nombres o atributos de Dios escritos, pero con respecto a las cosas que se han inventado después, como escribir conjuros usando nombres de demonios y colgárselos, o buscar refugio en ellos, sacrificarles animales, pedirles que nos protejan del mal o nos concedan algún beneficio, los eruditos están unánimemente de acuerdo en que estas son expresiones del más puro paganismo e idolatría que el Islam prohíbe. Lamentablemente, estas supersticiones ridículas se han difundido mucho entre la gente, excepto aquellos a quienes Dios ha protegido”.
Y el shéij Háfiz Hukmi dijo:
“Los amuletos que contienen estrellas o ángeles, o frases acerca de los genios, o materiales que se piensa que servirán de protección, ya se trate de perlas, cuerdas, anillos de hierro, o lo que fuera, todo esto es sin duda un manojo de supersticiones paganas inútiles y prohibidas en el Islam, no hay ninguna duda de ello”.
En segundo lugar, en la respuesta a la pregunta No. 9577 encontrarás algunos consejos para la persona que necesite protegerse contra las pesadillas o sueños perturbadores.
Y Allah sabe más.