Alabado sea Dios.
Es recomendable para el creyente comenzar su súplica adorando y elogiando a Dios, luego desearle las bendiciones y la paz de Dios al Profeta, y luego pedirle lo que uno desee, a causa del reporte narrado por Abu Dawud (1481) y at-Tirmidhi (3477) de Faddálah ibn ‘Ubaid (que Allah esté complacido con él), quien dijo: “El Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) oyó a un hombre haciendo una súplica en su oración sin glorificar a Dios ni enviarle las bendiciones Su Profeta. El Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Este hombre es un apurado”. Lo llamó y le dijo a él y a quien oyera “Cuando uno de ustedes haga una súplica, que comience glorificando a Dios y alabándole, luego que le envíe las bendiciones a Su Profeta, luego que rece pidiendo lo que sea que quiera o necesite”. Este reporte fue clasificado como auténtico por al-Albani en Sahih Abi Dawud, 1314.
Al-Baihaqi narró en Shu’ab al-Imán que ‘Ali (que Allah esté complacido con él) dijo: “Toda súplica no es respondida hasta que uno le envía las bendiciones al Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él)”. Esto fue narrado por Baqí ibn Mujállid de ‘Ali, en un reporte conocido y atribuido al Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él). Fue clasificado como auténtico por al-Albani en Sahih Al-Yami’, No. 4523.
‘Umar (que Allah esté complacido con él) dijo: “La súplica es detenida entre los cielos y la tierra y ninguna parte de ella es aceptada hasta que se le envíen las bendiciones al Profeta”. Narrado por at-Tirmidhi, 486; clasificado como auténtico por al-Albani en Sahih at-Tirmidhi, 403.
El Imam an-Nawawi (que Allah tenga misericordia de él) dijo en al-Adhkár, p. 176: “Los eruditos están de acuerdo que es recomendable comenzar nuestras súplicas alabando a Dios, y luego enviarle las bendiciones al Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él), y terminar la súplica de la misma manera. Hay muchos reportes conocidos respecto a este asunto (es decir, atribuidos al Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él))”.
Nótese que enviar las bendiciones al Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) toma tres formas:
1 – Enviarle las bendiciones antes de realizar una súplica y después de alabar a Dios, porque el Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Cuando uno de ustedes haga una súplica, que comience glorificando a Dios y alabándole, luego que le envíe las bendiciones a Su Profeta, luego que rece pidiendo lo que sea que quiera o necesite”. Este narrado por Abu Dawud (1481) y at-Tirmidhi (3477); clasificado como auténtico por al-Albani en Sahih Abi Dawud, 1314.
2 – Enviándole las bendiciones al comienzo de la súplica, en el medio de ella, o al final.
3 – Enviarle las bendiciones al comienzo y al final, y pidiendo algo entre ambas.
(Adaptado de las palabras de Ibn al-Qayím en Yila’ al-Afhám, p. 531).
Basado en lo arriba citado, lo que estás haciendo es válido de acuerdo a la Tradición Profética.
Y Allah sabe más.