Alabado sea Dios.
Los electrodomésticos que los propietarios le traen para que los arregles se consideran una encomienda (amanah) que le dejan, y usted debe conservarlos y cuidarlos hasta que sus dueños vengan a recogerlos.
Sin embargo, si el propietario del electrodoméstico tarda más de lo habitual en venir a recogerlo después de haberlo reparado, y usted ha perdido la esperanza de que vuelva, o la presencia del electrodoméstico en su negocio es perjudicial porque no tiene mucho espacio, o porque es difícil conservarlo, etc., en este caso, usted tiene derecho, con el argumento de protegerse de un daño, de vender estos electrodomésticos al precio del mercado, y tomar de esa venta su tarifa según lo acordado con el cliente, y guardar el resto de ese dinero. Luego, si el propietario viene algún día, puede devolverle el dinero restante.
El Comité de Fatwa del sitio web Al Fiqh Al Islami (Jurisprudencia Islámica) anunció: "Debe esperar un tiempo después del cual crea que lo más probable es que el propietario nunca regrese a recogerlo, luego puede disponer de él y tomar en su totalidad su tarifa y el alquiler del lugar de acuerdo con la costumbre o el consenso. Luego, si queda algo, le pertenece al propietario. Si el dueño se presenta, debe devolvérselo; y si no se presenta, es permisible que haga uso de él, pero sigue siendo responsable de reponerlo, y si lo conserva [sin hacer uso de él] para estar seguro, eso es mejor”.
Esto es lo que debe hacer sobre la base del principio islámico general de que el daño debe ser eliminado (ad-dararu iuzal). Es bien sabido que mantener estos artículos en un taller y no recibir ningún pago por su trabajo causa un gran daño al propietario del taller o servicio, especialmente si necesita piezas y similares, además de que necesita pagar los salarios de sus trabajadores y el alquiler de la tienda, y puede verse obligado a rechazar otro trabajo porque no tiene espacio para almacenar los artículos.
El asunto se agrava si esto sucede repetidamente con más de un cliente. Todo ello causa un grave perjuicio al propietario del negocio, y justifica que se deshaga de estos artículos vendiéndolos.
Nuestro consejo para usted es que ponga una cláusula en el contrato, o la escriba en un papel que coloque en un lugar bien visible de su negocio, para que los clientes puedan verla, indicando que los electrodomésticos se desecharán después de cierto período, que considere apropiado para ambas partes, si los propietarios no acuden a recogerlos.
Después del final de ese período, usted no estará obligado a conservarlos, y es permisible que se deshaga de ellos vendiéndolos, tome de la venta su tarifa y dé el resto del dinero en caridad; o dándolos en caridad tal cual, o deshaciéndose de ellos si no son aptos para dar en caridad o vender.
No obstante, sería mejor anotar el número de teléfono, los datos de contacto o el correo electrónico del propietario de cada electrodoméstico y la fecha en que recibió el electrodoméstico; luego, antes de que finalice ese período, puede comunicarse con él para advertirle que no será responsable de su electrodoméstico si no viene a recogerlo. Si viene a recogerlo, está muy bien; de lo contrario, usted puede disponer de él como se explicó anteriormente.
Para obtener más detalles, consulte las siguiente respuesta: 150529 .
Y Al-lah sabe más.