Alabado sea Dios.
Un acto de adoración no puede ser aceptado salvo que cumpla con dos requisitos:
- Sinceridad solamente hacia Al-lah, es decir, se realiza para buscar el Rostro de Al-lah y el Más Allá, y no se realiza para ostentar, para mejorar la reputación de una persona o por recompensas mundanas.
- Para seguir al Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) en su palabra y sus acciones. Seguir al Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) es algo que solo se puede lograr conociendo su Sunnah.
Por lo tanto, quien quiera adorar a Al-lah realizando algún acto de adoración –ya sea el Hayy o cualquier otro– tiene que aprender las enseñanzas del Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) relacionadas con ese acto, así sus acciones estarán de acuerdo con la Sunnah.
Resumiremos en estas pocas líneas la descripción del Hayy como se lo narra en la Sunnah.
La ‘Umrah está formada por cuatro elementos, a saber: el ihram, la circunvalación a la Casa Sagrada (tawaf), el recorrido (sa’i) entre As-Safa y Al Marwa, y afeitarse la cabeza o recortarse el cabello.
- El ihram
El ihram significa tener la intención de comenzar los rituales del Hayy o la ‘Umrah .
Cuando el peregrino quiere entrar al estado de ihram , debe cambiar su ropa y realizar el ghusul, como el que se realiza para higienizarse de yanabah (impureza que queda después de la actividad sexual). Luego debe colocarse en su cabeza y en su barba cualquier perfume que tenga disponible, de almizcle o cualquier otro. No importa si quedan rastros de ese perfume después de que la persona entra al ihram, debido al hadiz narrado en As-Sahihain de ‘Aisha (que Al-lah esté complacido con ella), que dijo: “Cuando el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) quería entrar al ihram, se perfumaba con el mejor perfume que tenía, luego yo podía ver rastros brillosos de ese almizcle en su cabeza y en su barba” (Bujari, 271; Muslim, 1190).
Realizar el ghusul al entrar al estado de ihram es sunnah tanto para los hombres como para las mujeres, incluso las mujeres que están sangrando después de un parto o que están menstruando, porque el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) le ordenó a Asma’ Bint ‘Umais que realizara el ghusul antes de entrar en ihram cuando se encontraba sangrando después del parto, y que vendara sus partes íntimas (Muslim, 1209). Luego, después de realizar el ghusul y perfumarse, el peregrino debe colocarse las vestimentas del ihram y –con la excepción de las mujeres que están sangrando después del parto o que están menstruando– orar la oración obligatoria si esto sucede al momento de una oración obligatoria, de otro modo, debe orar dos rak’as con la intención de la oración Sunnah del wudu’. Cuando el peregrino ha terminado de orar, debe orientarse hacia la quibla y entrar es estado de ihram. Puede demorar su ihram hasta abordar su medio de transporte, y estar listo para trasladarse, pero debe entrar en ihram antes de dejar el miqat dirigiéndose hacia La Meca.
Luego debe decir: Labbaika Al-lahumma bi ‘Umrah (aquí estoy, oh Al-lah, para realizar la ‘Umrah).
Luego debe recitar la Talbiah como lo hizo el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él: “ Labbaika Al-lahumma labbaik, labbaika la sharika laka labbaik. Inna al-hamda wan-ni’mata laka wal-mulk, la sharika lak (Aquí estoy, oh Al-lah, aquí estoy. Aquí estoy. No tienes asociados, aquí estoy. Ciertamente, todas las alabanzas y bendiciones te pertenecen, y la Soberanía, No tienes asociados)”.
La Talbiah del Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) también incluye las palabras “Labbaika ilah al Haqq” (aquí estoy, oh, Al-lah de la Verdad)”.
Ibn ‘Umar solía agregar a At-Talbiah las palabras: “Labbaika wa sa’daika, wal-jair bi iadaika, wal-raghba’ ilaika wal ‘aml” (aquí estoy, bendecido por Ti. Todo lo bueno está en Tus manos, y los deseos y las acciones están dirigidas a Ti).
Los hombres deben elevar sus voces al pronunciarlo, porque el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: "Yibril se me acercó y me dijo que les dijera a mis compañeros, y a los que se encontraban conmigo, que elevaran la voz al recitar la Talbiah”. (clasificado como sahih por Al Albani en Sahih Abi Dawud, 1599). También dijo (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él): “La mejor peregrinación (Hayy) es aquella en la que las voces se elevan en la Talbiah y la sangre del animal sacrificado fluye" (clasificado como hasan por Al Albani en Sahih Al Yami’, 1112).
La mujer debe recitarlo de tal modo que solo la oigan los que se encuentran a su lado, salvo que haya un hombre a su lado que no sea uno de sus mahrams, en ese caso debe recitarlo en silencio.
Si una persona que está entrando en ihram teme que se presente algún obstáculo que le impida completar su peregrinación, (como una enfermedad, un enemigo, o ser detenido debido a algún procedimiento, etc.), entonces, en el momento en el que está entrando debe estipular una condición diciendo: “Si me encuentro impedido, entonces mi salida del ihram será en ese lugar en el que me encuentre impedido”. Es decir, si algo impide que yo complete mi peregrinación, como una enfermedad o un retraso, etc., entonces saldré de mi estado de ihram. El Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) le ordenó a Duba’a Bint Az-Zubair, cuando ella quería entrar en ihram pero estaba enferma, que estipulara tal condición, y dijo: “Tu condición es válida para tu Señor” (Bujari, 5089, y Muslim, 1207).
Si la persona estipula esta condición y sucede algo que le impide completar su peregrinación, sale de su ihram y no tiene que ofrecer un sacrificio en compensación.
Sin embargo, aquel que no teme que se presente algún obstáculo que le impida completar su peregrinación, no tiene que estipular ninguna condición, porque el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) no estipuló condiciones ni le ordenó a nadie que lo hiciera. Más bien le dijo a Duba’a bint Az-Zubair que lo hiciera porque ella estaba enferma.
El muhrim (persona que entra al estado de ihram) debe recitar mucho la Talbiah, especialmente cuando las circunstancias y los tiempos cambian, como cuando uno sube a un lugar alto o desciende a un lugar bajo, o cuando comienza la noche o el día. Después, debe pedirle a Al-lah muchas súplicas por su bien y para alcanzar el Paraíso, y buscar refugio en Su piedad para protegerse del Infierno.
La Talbia está prescrita en la ‘Umrah desde el momento en el que uno entra en ihram hasta que comienza el tawaf. Cuando la persona comienza el tawaf debe dejar de recitar la Talbia.
El ghusul al entrar a La Meca
Cuando el peregrino se acerca a La Meca, debe realizar el ghusul antes de entrar, si es posible, porque el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) lo hizo antes de entrar a La Meca (Muslim, 1259).
- El tawaf
Luego, cuando el peregrino entra a Al Masyid Al Haram, debe hacerlo con su pie derecho primero, y decir: “Bismil-lah was-salatu wal-salam ‘ala RasulAl-lah. Al-lahumma ighfir li dhunubi waftah li abwab rahmatika. A’udhu Bil-lahil ‘Adim wa bi wayhih il karim wa bi sultanihil-‘qadim min Ash-Shaitan ir-rayim” (En el nombre de Al-lah, y las bendiciones y la paz desciendan sobre el Mensajero de Al-lah. Oh, Al-lah, perdona mis pecados, y abre para mí las puertas de Tu misericordia. Busco refugio del maldito Satanás en Al-lah, el Todopoderoso, en Su noble Rostro y en Su poder eterno). Luego debe dirigirse a la Piedra Negra para comenzar el tawaf . Debe tocar la piedra con su mano derecha y besarla; si no puede besarla, puede tocarla con su mano y besar su mano. Si no puede tocarla con su mano, debe mirar hacia la piedra, señalarla con su mano y decir: “Al-lahu Akbar”, pero no deberá besar su mano.
Hay muchas virtudes en el acto de tocar la Piedra Negra, porque el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “Al-lah elevará la Piedra Negra el Día de la Resurrección, y esta tendrá dos ojos para ver y una lengua con la que hablará, y testificará por aquellos que la hubieran tocado con sinceridad” (clasificado como sahih por Al Albani en Sahih At-Targhib wa At-Tarhib, 1144).
Es mejor no amontonarse ni causar molestias a las personas y no ser molestado por ellas, debido al hadiz en el que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) le dijo a ‘Umar: “Oh, ‘Umar, tú eres un hombre fuerte, no te amontones cerca de la Piedra ni molestes a los débiles. Si encuentras lugar, tócala; si no, solo mírala y pronuncia: ‘Al-lahu Akbar’” (narrado por Ahmad, 191; clasificado como fuerte por Al Albani en Risalat Manasik Al Hayy wal ‘Umra, p. 21).
Luego, debe moverse hacia la derecha, con la Ka’bah a su izquierda, y cuando llega a la esquina yemení (Ar-Rukun Al Yamani, que es la tercera esquina después de la Piedra Negra) debe tocarlo, sin besar su mano ni decir “Al-lahu Akbar”. Si no puede tocarlo, debe continuar, y no amontonarse allí. Entre la esquina yemení y la Piedra Negra debe decir: “Rabbana atina fid-dunia hasana wa fil-ajira hasana wa quinna ‘adhaban-nar” {¡Señor nuestro! Danos bienestar en esta vida y en la otra, y presérvanos del tormento del Fuego} (narrado por Abu Dawud y clasificado como Hasan por Al Albani en Sahih Abi Dawud, 1666).
Cada vez que pase por la Piedra Negra debe mirarla y decir Al-lahu Akbar, y en el resto de su tawaf debe recitar lo que quiera de dhikr, du’a’ y Corán, porque el tawaf alrededor de la Ka’bah ha sido establecido en conmemoración de Al-lah.
Durante el Tawaf el hombre debe realizar dos cosas:
- Descubrir el hombro derecho (idtiba’) desde el comienzo del tawaf hasta el final. Esto se hace colocando la mitad de la rida’ (vestimenta superior) debajo de la axila y las terminaciones de la rida’ sobre el hombro derecho. Cuando el peregrino finaliza el tawaf, debe poner su rida’ en el lugar en el que se encontraba antes del tawaf, porque el momento de usarla con un hombro descubierto es solo durante el tawaf.
- El raml en las primeras tres vueltas solamente. Raml significa caminar rápido con pasos cortos. En las últimas cuatro vueltas no hay raml, más bien, el peregrino debe caminar como lo hace normalmente.
Cuando el peregrino ha completado las siete vueltas del tawaf, debe cubrir su hombro y luego dirigirse a la Estación de Ibrahim (Maqam Ibrahim) y recitar las palabras (que se interpretan así en español): {Y [recuerden] cuando hice de La Casa [la Ka‘bah] un lugar de reunión y refugio para la gente. "[Oh, creyentes] Tomen el sitial de Abraham como lugar de oración". Y cuando indiqué a Abraham e Ismael: "Purifiquen Mi Casa para quienes vengan a hacer el rito de la circunvalación y el retiro espiritual, y los que se inclinen y prosternen durante su oración"} [Corán 2:125].
Luego, debe orar dos rak’as detrás de la Estación; en la primera rak’ah después de recitar Al Fátiha debe recitar Ia aiuhal kafirun (Surat Al Káfirun, 109) y en la segunda Qul Huwa Al-lahu ahad (Surat Al Ijlas 112). Luego cuando ha finalizado la oración debe dirigirse a la Piedra Negra y tocarla si puede. Está prescrito en este punto que solo la toque; si no puede hacerlo, entonces debe alejarse y no señalarla.
- El sa’i
Luego debe iniciar la caminata en el Mas’a (lugar para el sa’i) y cuando se acerca al As-Safa debe recitar la aleya Coránica (que se interpreta así en español): {[El recorrido entre los montes de] As-Safa y Al Marwa es un rito establecido por Al-lah. Quien realice la peregrinación mayor o la peregrinación menor a La Casa [Sagrada de La Meca] sepa que no incurre en falta por realizar el recorrido ritual entre ambas. Y quien voluntariamente haga el bien, sepa que Al-lah se lo recompensará, pues Él premia las buenas intenciones} [Corán 2:158].
Y debe decir: “Nabda u’ bima bada a’ Al-lah bihi (comenzamos con lo que Al-lah ha comenzado)”.
Luego debe escalar As-Safa hasta que pueda ver la Ka’bah, luego debe mirarla, elevar sus manos y orar a Al-lah, y realizar du’a’ de la manera que lo desee. El Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) solía decir: “La ilaha il-la Al-lah wahdahu la sharika lah, lahul-mulk, wa lahul-hamd, wa huwa ‘ala kul-li shai’in qadir. La ilaha il-la Al-lah wahdah, anyaza wa’dah, wa nasara ‘abdah, wa hazama al ahzaba wahdah” (no existe dios, salvo Al-lah, sin compañeros ni socios; Suyo es el dominio, todas las alabanzas son para Él, y Él es sobre toda cosa Poderoso. No existe dios, salvo Al-lah; Él cumplió Su Promesa, le otorgó la victoria a Su siervo y derrotó solo a los aliados) (Muslim, 1218).
Debe repetir esto tres veces, y realizar la du’a en el medio. Debe recitar este dhikr y realizar du’a, luego recitarlo otra vez y realizar du’a, y recitarlo una tercera vez, luego se acerca a Al Marwa, y no realiza du’a hasta la tercera vez.
Cuando llega a la marca verde debe correr tan rápido como le sea posible, sin molestar a nadie, porque está comprobado que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) realizó el sa’i entre As-Safa y Al Marwa, y dijo: “El lecho del río no se cruza salvo que se haga con vigor”. (narrado por Ibn Mayah y clasificado como sahih por Al Albani en Sahih Ibn Mayah, 2419). El lecho del río (era un río seco en los tiempos del Profeta, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) es el área entre las dos marcas verdes que permanecen ahí en la actualidad.
Cuando llega al segundo marcador verde, debe caminar de modo normal hasta llegar a Al Marwa. Debe escalarlo y mirar hacia la quibla, y elevar sus manos y decir lo que dijo en As-Safa. Luego debe descender de Al Marwa y dirigirse hacia Safa, caminando en el lugar en el que se debe caminar y corriendo en el lugar en el que se debe correr. Cuando llega a As-Safa debe hacer lo que hizo la primera vez, y lo mismo al regresar a Marwa, hasta completar los siete circuitos; desde As-Safa a Al Marwa es un circuito, y el regreso de Al Marwa a As-Safa es otro circuito. Durante su sa’i puede decir lo que quiera, dhikr, du’a’ o recitar el Corán.
Nota:
El versículo Coránico (que se interpreta así en español): {[El recorrido entre los montes de] As-Safa y Al-Marwa es un rito establecido por Al-lah. Quien realice la peregrinación mayor o la peregrinación menor a La Casa [Sagrada de La Meca] sepa que no incurre en falta por realizar el recorrido ritual entre ambas. Y quien voluntariamente haga el bien, sepa que Al-lah se lo recompensará, pues Él premia las buenas intenciones} [Corán 2:158].
Debe recitarse por el peregrino que desea realizar el sa’i cuando se acerca a As-Safa solo al principio del sa’i. No es mustahab que lo repita cada vez que se acerca a As-Safa y Al Marwa, como lo hacen algunas personas.
- Afeitarse la cabeza o recortarse el cabello
Cuando el peregrino ha completado los siete recorridos (de sa’i), debe afeitarse la cabeza si es un hombre , o recortarse el cabello. Si hace lo primero, debe afeitarse toda la cabeza, y si hace lo segundo, debe recortarse el cabello de toda la cabeza. Afeitarse es mejor que cortarse el cabello porque el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) realizó du’a tres veces por aquellos que se afeitaron la cabeza y una vez por los que se recortaron el cabello (Muslim, 1303).
Las mujeres deben recortar de su cabello solo el largo de una yema de su dedo.
Con estas acciones, la ‘Umrah está completa. En conclusión, la ‘Umrah está formada por el ihram, el tawaf, el sa’i y el acto de afeitarse o cortarse el cabello.
Le pedimos a Al-lah que nos ayude a realizar las acciones correctas, que las acepte de nosotros. Porque Él está siempre cerca y responde a nuestras oraciones.
Vea Manasik Al Hayy wal ‘Umrah de Al Albani [disponible en inglés como The Rites of Hajj and ‘Umra, publicado por International Islamic Publishing House, Riyadh]; Sifat Al Hajj wal ‘Umrah y Al Manhay li Murid Al ’Umrah wal Hayy de Ibn ‘Uzaimin (que Al-lah los tenga a todos en Su misericordia).