Alabado sea Dios.
La crianza de los hijos es una responsabilidad compartida por ambos padres. Esta es una responsabilidad que Al-lah les ordena cumplir, cada uno según su posición y habilidad, y esta gran responsabilidad no puede limitarse a uno de ellos y no al otro.
Se narró de Ibn 'Umar (que Al-lah esté complacido con él) que escuchó al Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) decir: "Cada uno de ustedes es un pastor y cada uno de ustedes es responsable de su rebaño. El gobernante del pueblo es un pastor y es responsable de su rebaño. Un hombre es el pastor de su casa y es responsable de su rebaño. La mujer es la pastora de la casa y de los hijos de su marido y es responsable de su rebaño. El esclavo es el pastor de las riquezas de su amo y es responsable de ellas. Cada uno de ustedes es un pastor y cada uno de ustedes es responsable de su rebaño" (citado por Al Bujari, 853; y Muslim, 1829).
Piense en cómo el hadiz se refiere a la responsabilidad de cada padre, para reforzar la idea de que cada uno de ellos es individualmente responsable en este sentido. Y en el hadiz que habla sobre el estado de pureza natural en el que uno nace, vemos cómo los niños toman su religión de ambos padres, y no solo de uno de ellos.
Se narró de Abu Hurairah (que Al-lah esté complacido con él) que el Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: "No hay niño que no nazca en un estado de fitrah (pureza innata del Islam), luego sus padres lo convierten en judío, cristiano o zoroastra" (citado por Al Bujari, 1292; y Muslim, 2658).
Con respecto al cumplimiento de los deberes compartidos, el Islam prescribe un medio por el cual generalmente se cumplen de la mejor y más exitosa manera, que es por medio del diálogo y la consulta mutua. Esta puede ser la causa más importante de la felicidad familiar y la crianza exitosa de los hijos. El mandamiento de consultarse unos a otros con respecto a las responsabilidades compartidas se menciona en la aleya en la que Al-lah dice en el Corán (lo que en español se interpreta así): {Si ambos deciden el destete, de mutuo acuerdo, y después de la debida consulta, no hay pecado en ellos} [Corán 2:233].
El Imam Ibn Kazir (que Al-lah lo tenga en Su misericordia) dijo: “Es decir que, si los padres del niño acuerdan destetarlo antes de que tenga dos años, y piensan que esto es bueno para él, y se consultan mutuamente sobre eso y se ponen de acuerdo en ello, entonces no hay pecado en ellos por eso. De esto se puede entender también que: si uno de ellos toma esta decisión por su cuenta, eso no es suficiente, y no es permisible que uno de ellos decida eso sin consultar al otro. Esto fue afirmado por Az-Zawri y otros. Esto es más seguro para el niño y garantiza que se cuidarán sus intereses. Esto se debe a la misericordia de Al-lah hacia Sus siervos, ya que Él ha establecido pautas para los padres en la crianza de sus hijos, y ha ordenado lo que es mejor para ellos y para el niño” (Tafsir Al Qur'an il 'Adhím, 1/380).
Algunos estudios indican que muchos problemas matrimoniales que conducen al divorcio son causados por la ausencia de esta interacción en el matrimonio, es decir, la consulta en la vida familiar, o por algún error en su implementación. El diálogo y la consulta son un arte y una ciencia que debe ser practicada, ejercitada y comprendida.
Es natural que las opiniones de los padres con respecto a algunas responsabilidades compartidas, como la crianza de los hijos, a veces difieran, y eso se debe a las diferencias en los antecedentes de los padres, a la interferencia de algunos parientes u otras razones. Pero esto no debería conducir a una crisis, a menos que los padres no logren encontrar una forma adecuada de lidiar con esta diferencia de opinión.
Hay una solución que se puede sugerir para resolver las diferencias entre los métodos de crianza de los padres, esta consiste en consultar a un especialista o a alguien a quien puedan consultar fácilmente sobre los problemas en los que difieren, que tenga experiencia y en quien se pueda confiar. La crianza de los hijos es un arte y una ciencia en sí misma sobre la que se hacen estudios y por la que se establecen carreras con certificados académicos. De hecho, es una de las especialidades más importantes y precisas. Los padres siempre podrán encontrar algunos especialistas de confianza en la crianza de los hijos, por lo que deben consultarlos y pedirles su opinión sobre el punto específico de conflicto.
Tal vez si los padres comprenden las graves repercusiones que la diferencia de opinión sobre la crianza de los hijos tendrá en la personalidad del hijo, eso les hará darse cuenta de que es esencial superar este problema.
El mensaje que el padre quiere transmitir puede perderse y sus efectos pueden debilitarse si la madre da un mensaje diferente, eso puede llevar al hijo a elegir el mensaje que le conviene, y en muchos casos llegará a una tercera solución, basada en sus propios caprichos y deseos. Esto significa que será difícil para el hijo distinguir entre lo correcto y lo incorrecto, lo permitido y lo prohibido (ilegal), y esta es la mayor amenaza para una educación sana.
Las diferencias con respecto a la crianza de los hijos pueden llevar a que el niño odie a uno de sus padres y pueden conducir a problemas cada vez mayores en etapas posteriores, basadas en la profundidad de las diferencias entre el padre y la madre con respecto a la crianza de los hijos.
Por lo tanto, es fundamental que el padre y la madre estén de acuerdo desde el principio en que ninguno de ellos enviará a los hijos un mensaje diferente al del otro, especialmente frente a ellos. Si hay algún comentario o desacuerdo que expresar, entonces se debe retrasar hasta que puedan discutirlo lejos, donde los niños no puedan escucharlos.
También es muy importante que los padres interactúen entre sí de manera honesta y sincera. No es apropiado, de acuerdo con la Shari'ah (ley islámica), el sentido común, la educación o los buenos modales, que uno de los padres pretenda ante el otro que está de acuerdo con un punto específico de la crianza de los hijos, cuando en realidad piensa lo contrario y no lo hace. La otra parte pronto descubrirá el engaño y habrá una pérdida de confianza entre los padres con respecto a la crianza de los hijos, lo que solo conducirá a más problemas. Ser honestos, en cambio, consultarse mutuamente y llegar a acuerdos mutuos conducirá a superar esta diferencia de opinión y ayudará a los padres a superar también otras diferencias, se acostumbrarán a consultarse mutuamente y a resolver las cosas juntos.
También es esencial recordar que Al-lah siempre está vigilando cómo criamos a nuestros hijos, así que debemos consultar el Libro de Al-lah y la Sunnah (legado y enseñanzas) de Su Mensajero con respecto a los principios de la crianza de los hijos en caso de cualquier diferencia de opinión. Si la diferencia tiene que ver con los métodos, entonces la forma de resolverla es consultándose unos a otros y discutiendo el asunto, después de lo cual el que debe decidir entre ellos es un asesor sincero y confiable que sea especialista o que tenga experiencia. Si los padres son sinceros en su intención de enseñar al niño la actitud y la religión adecuadas, entonces Al-lah les concederá una salida a sus diferencias.
Por último, hay que tener en cuenta que Al-lah ha creado en la mujer lo que no ha creado en el hombre. La emoción y la compasión son más fuertes en las mujeres que en los hombres; y la razón, la fuerza de voluntad y la gestión son más fuertes en los hombres que en las mujeres. Se debe prestar atención a este hecho cuando hay diferencias de opinión entre los cónyuges, y tal vez si el asunto se delega al cónyuge será muy beneficioso, si el cónyuge está comprometido religiosamente y es sabio.
Y Al-lah sabe más.