Alabado sea Dios.
Alabado sea AllahEn primer lugar, el Islam nos incentiva a hacer abundantes súplicas, y no apresurarnos a buscar una respuesta. Esto es porque la súplica es un gran acto de culto muy amado para Dios. Ciertamente hay textos que nos advierte contra descuidar la súplica, porque descuidarla es un signo de arrogancia.
Allah dijo (traducción del significado):
“Vuestro Señor dice: Invocadme, que responderé vuestras súplicas. Y por cierto que quienes se ensoberbezcan y se niegan a adorarme, ingresarán al Infierno humillados” (Gháfir 40:60).
Se narró de Abu Hurairah que el Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “La súplica de cualquiera de ustedes será respondida en tanto no se apresuren a buscar una respuesta, y no digan “Yo recé a mi Señor pero no obtuve respuesta”.
Narrado por al-Bujari, 5981; Muslim, 2735.
Se narró de Abu Sa’íd al-Judri (que Allah esté complacido con él) que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “No hay un musulmán que invoque a Dios con palabras en las que no haya pecado ni ruptura de los lazos familiares, sin que Dios le conceda una de estas tres cosas: responda su súplica, le reserve la recompensa para el Más Allá, le remueva un mal o un obstáculo equivalente a lo que está pidiendo”. Ellos le preguntaron: “Entonces debemos hacer una gran cantidad de súplicas”, y él respondió: “Dios es El Más Grande”.
Narrado por at-Tirmidhi, 3573; clasificado como auténtico por at-Tirmidhi y otros.
Segundo:
El reporte que mencionas es muy débil (da’ífun yíddan). Fue narrado de Yábir ibn ‘Abd Allah (que Allah esté complacido con él) que el Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Si alguien reza y Dios lo ama, Él dice “Oh, Gabriel, concédele lo que está pidiendo de Mí, pero demóralo, porque Yo amo oír su voz”. Y si una persona reza a Dios y Dios lo detesta, Él le dice a Gabriel “Oh, Gabriel, concédele lo que está pidiendo de Mí y dáselo inmediatamente, porque yo detesto oír su voz”.
Narrado por at-Tabaráni en al-Awsat, 8/216. Su cadena de transmisión incluye a Isjáq ibn ‘Abd Allah ibn Abi Farwah, cuyo testimonio fue rechazado (matruk), como afirmó en Mayma’ az-Zawá’id, 10/151.
Puesto que el reporte es muy débil, entonces no cumple con las condiciones para ser citado como evidencia.
Tercero:
Indudablemente si una persona siente que Dios le ha respondido, esto es una gran bendición que merece sentirse agradecido y continuar realizando obras rectas y temiendo a Dios, porque éstas están entre los grandes medios por los que Dios responde las súplicas. Es una bendición, si es verdad, y una persona puede sentirse envidiosa de aquél que ha sido bendecido de esta manera. Cada musulmán desea que su súplica sea respondida. Esto, si Dios quiere, es un indicativo de que la persona es recta, veraz y sincera. Por lo tanto debe continuar temiendo a Dios, realizando obras rectas y evitando las cosas prohibidas; esto hará que sus bendiciones continúen. Allah dijo (traducción del significado):
“Vuestro Señor os hace saber que si Le agradecéis, Él incrementará vuestro sustento; y sabed que si sois desagradecidos Su castigo será severo” (Ibrahím 14:7).
Cuarto:
Lo que mencionas sobre difundir el bien e invitar a otros a Dios es algo que será bueno para ti en este mundo y en el Más Allá, si Dios quiere. Esta es una de esas cosas buenas que traen el bien en este mundo y en el Otro. Le pedimos a Dios que te ayude, te guíe y te de la mejor recompensa.
Y Allah sabe más.