Regla acerca de usar el agua del Zamzam para lavarse después hacer nuestras necesidades

Alabado sea Dios.

El Hadiz sahih indica que el agua del Zamzam está bendecida. Se reportó en Sahih Muslim (2473) que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo respecto del Zamzam: “Está bendecida y es alimento que nutre”. Un reporte narrado por Abu Dawud [es decir, al-Tayalisi] (1/364) con una isnad jayyid agrega: “y cura para la enfermedad”. Este sahih hadiz hace referencia a las virtudes del agua del Zamzam, al manifestar que es alimento que nutre y cura para la enfermedad, y que está bendecida. La Sunnah es beber de ella como lo hizo el Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) y que está permitido hacer wudu’ e istinya’ con ella, y también hacer ghusl para la yanabah (impureza que sigue a la actividad sexual) si fuera necesario.  

Se reportó que de entre los dedos del Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) brotó agua, que la gente la tomó y la utilizó para lo que les hizo falta; la bebieron, hicieron wudu’, lavaron sus ropas y se lavaron después de hacer sus necesidades. Todo eso sucedió. El agua del Zamzan no es como el agua que brotó de entre los dedos del Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) pues no hay nada que pueda ser superior a eso, pero ambas están bendecidas. Por lo tanto, si el agua que brotó de entre los dedos del Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) pudo utilizarse para el wudu’, el ghusl, el istinya’ y para lavar la ropa, entonces también está permitido utilizar el agua del Zamzam para estos fines. Sea cual fuere el caso, es agua pura y buena que es mustahabb para beber, y no tiene nada de malo utilizarla para el wudu’, para lavar la ropa y para lavarnos después de hacer nuestras necesidades, si es necesario, tal como se explica anteriormente. Se narró que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “'El agua del Zamzam sirve para cualquier propósito para el que se la beba.” (Narrado por Ibn Majah, 3062 – su isnad tiene ciertas debilidades pero está respaldada por el sahih hadiz que se cita arriba).

Alabado sea Allah.