Alabado sea Dios.
No hay nada de malo en que se haga una operación para construirse un pecho artificial, porque eso cae bajo la denominación de recurrir a la medicina para eliminar un defecto físico y restaurar la forma con la que Dios nos ha creado. El principio básico acerca de esto se extrae del reporte narrado por Abu Dawud (4232), at-Tirmidi (1770) y an-Nasá'i (5161), de ‘Abd er-Rahmán ibn Tarafah, que a su abuelo ‘Arfayah ibn As’ad le habían cortado la nariz en la batalla de al-Kulab, y usaba una nariz hecha de plata. Pero comenzó a apestar, entonces el Profeta Muhámmad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) le dijo que se hiciera una nariz de oro. Este reporte fue clasificado como bueno por al-Albani en Sahih Abu Dawud.
Dice en Fatáwa al-Láynah ad-Dá'imah (25/62): “Yo soy un muchacho de 18 años. Hace cuatro años mi pecho se volvió prominente y eso vino acompañado de algún dolor. Después de un tiempo, el dolor se fue, alabado sea Dios, pero la prominencia permaneció. Esta prominencia de mi pecho se hace evidente aún bajo las ropas. Yo consulté a un especialista acerca de eso y me dijo que podía ser fácilmente removido con cirugía estética. ¿Es permisible hacerse dicha cirugía? Este problema me causa mucha vergüenza ante la gente.
Ellos respondieron:
“Es permisible que te sometas a una cirugía estética para eliminar esa prominencia, si se piensa que la cirugía será probablemente exitosa y no conducirá a un daño igual o mayor, y es permisible para alcanzar el propósito deseado que mencionas, de otra forma no es permisible. Y Allah es la Fuente de toda fuerza. Que Dios bendiga y otorgue la paz a nuestro Profeta Muhámmed, a su familia y a sus compañeros”. Fin de la cita.
Shéijs ‘Abd el-‘Azíz ibn Baaz, ‘Abd er-Razzáq ‘Afifi, ‘Abd Allah ibn Gadián, ‘Abd Allah ibn Qa’úd.
Para más información, por favor consulta la respuesta a la pregunta No. 47694.
No hay nada de malo con tomar quirúrgicamente algo de piel de la espalda para completar la operación.
Y Allah sabe más.