Alabado sea Dios.
El Islam continúa siendo exitoso en el mundo desarrollado porque su llamado se hace según las inclinaciones naturales de la humanidad, y recomienda lo mejor de los valores humanos como la tolerancia, el amor, la piedad, la veracidad y la sinceridad.
El Islam educa a las personas y las eleva a una conducta correcta, las buenas costumbres y la virtud. Su llamado se distingue de los demás por su realismo, armonía y moderación. El Islam le presta la debida atención al cuerpo tanto como al alma. No reprime los deseos físicos, ni permite las exageraciones en este aspecto; realiza una distinción entre la inclinación natural a disfrutar los placeres de este mundo y los deseos prohibidos que se califican como depravación y perversión.
Las personas adoptan el Islam porque encuentran seguridad, comodidad y paz en él, ellos ven una cura para sus problemas, y a través de él son capaces de deshacerse de los sentimientos de confusión, ansiedad y pérdida.
El Islam es la religión de la fitrah, la inclinación natural o el patrón sobre el que Allah ha creado a la humanidad. Es por esta razón que las personas sensatas y con inclinaciones elevadas adoptan el Islam, como Abu Hurayrah (Allah se complazca con él) dijo: “El Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “No hay un niño que no haya nacido en estado de fitrah (es decir, el Islam), luego sus padres lo convierten en judío, en cristiano, o en un mago (zoroastriano), así como los animales tienen animales completos (es decir, los animales nacen en perfecto estado, sin que les falte alguna parte del cuerpo). ¿Has visto algún recién nacido sin las orejas?”” Luego, Abu Hurayrah (que Allah esté complacido con él) dijo: “‘…Conságrate [¡Oh, Muhammad!] al monoteísmo, que ello es la inclinación natural con la que Allah creó a los hombres. La religión de Allah es inalterable y ésta es la forma de adoración verdadera, pero la mayoría de los hombres lo ignoran…’ [al-Rum 30:30 – interpretación del significado –].” (Transmitido por al-Bujari, 1359). Esto significa que Allah ha creado a la humanidad con el potencial para aprender la verdad, aceptar el Tawhid (monoteísmo puro) y someterse a Allah. Su inclinación natural es aprender el Islam y amarlo, pero una mala educación, un ambiente kafir (que no cree), sus propios antojos y deseos y los demonios entre jin y la humanidad, lo aleja de la verdad. La humanidad está inclinada básicamente hacia el tawhid (monoteísmo puro), como el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) informó que su Señor (Allah) dijo: “Yo creé a todos mis siervos como ‘hunafa’ (puramente monoteístas) pero el diablo los alejó de su religión". (Transmitido por Muslim). Por esta razón, a quien se vuelve musulmán después de haber sido incrédulo, se lo describe como si hubiera “regresado” al Islam, porque esto es más correcto que decir que se ha “convertido”. Cuando el Islam entra en un país en el que no existe el nacionalismo o hay gran legado de yahiliyah (ignorancia), se esparce rápidamente debido a su fuerza y a los pocos obstáculos que encuentra. También debe notar que el Islam es adecuado para todas las personas, educadas o no, hombres y mujeres, ancianas o jóvenes; todos encuentran en él lo que buscan o necesitan.
Los que se vuelven musulmanes en los países desarrollados, encuentran que la civilización y las leyes de su país, que han sido creadas por los antojos y deseos de los hombres, los han agotado, y se dan cuenta de la magnitud de la miseria que ha alcanzado occidente. Observan como predominan las enfermedades psicológicas, los ataques nerviosos, la locura y los suicidios a pesar de los avances tecnológicos y la cantidad de descubrimientos e inventos y los sistemas modernos de gestión. Esto es así porque todo eso está dedicado a lo físico y lo exterior, pero rechaza lo interno, y falla en el sustento y la nutrición del corazón y el alma. Sobre estas personas Allah dice en el Corán (interpretación del significado): “Sólo conocen [lo aparente de] la vida mundanal, y descuidan la otra vida” [al-Rum 30:7]
El Islam seguirá teniendo éxito, si Allah lo permite, siempre y cuando los que trabajan en su nombre sean sinceros y sus seguidores lo cumplan, crean en él y apliquen sus reglas.
El hecho de que existen aquellos que no están comprometidos, o que no cumplen con él, no evitará que el Islam triunfe, si Allah lo permite, y nada puede distorsionar su belleza. Su luz no vacilará porque algunas personas lo abandonen o no cumplan con él.
Lo que el Islam le ha dado a la humanidad en el camino del progreso y la civilización, y al elevarlos desde la oscuridad de la opresión y la enemistad, es orgullo suficiente.