Alabado sea Dios.
Erigir estatuas por cualquier motivo es haraam, ya sea como un homenaje a reyes, comandantes de ejércitos, figuras prominentes y reformistas, o como símbolo de sabiduría y coraje, como la estatua de la Esfinge, etc, o por cualquier otro motivo, debido al significado general de los hadices auténticos – sahih - que así lo prohíben, y porque es un medio que conduce a la idolatría –shirk-, como le sucediَ al pueblo de Noé.