Domingo 21 Yumada az Zaniah 1446 - 22 Diciembre 2024
Español

Arrepentimiento

Pregunta

He cometido muchos pecados que nadie conoce excepto Dios. ¿Qué debo hacer para que Dios acepte mi arrepentimiento?

Texto de la respuesta

Alabado sea Dios.

 La fe de un musulmán puede debilitarse y puede ser sobrepasado por sus deseos. Satanás puede hacerle parecer atractivo el pecado, de tal forma que sea injusto consigo mismo, y caiga en lo que Dios ha prohibido. Pero Dios es Misericordioso con Sus servidores, y Su misericordia abarca todas las cosas. Quien se arrepienta luego de obrar mal, Dios aceptará su arrepentimiento, porque Dios es Perdonador y Misericordioso.

“Quien se arrepienta después de una injusticia que hubiere cometido y se enmiende, Allah le perdonará. Allah es Absolvedor, Misericordioso” (al-Má'idah 5:39 – traducción del significado).

 Dios es Perdonador y Generoso. Él ordenó a todos Sus servidores arrepentirse sinceramente, para que puedan ganar Su misericordia y el Paraíso. Allah dijo (traducción del significado):

 “¡Oh, creyentes! Arrepentíos ante Allah en forma sincera, y vuestro Señor borrará vuestras faltas y os introducirá en los jardines del Paraíso” (at-Tahrím 66:8).

 Las puertas al arrepentimiento están abiertas para Sus servidores, hasta que el sol salga por el Oeste. El Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Dios extiende Su mano por la noche para aceptar el arrepentimiento de aquellos que pecaron durante el día, y extiende Su mano durante el día para aceptar el arrepentimiento de aquellos que pecaron durante la noche, hasta que el sol salga por el Oeste (es decir, en el Día de la Resurrección)”. Narrado por Muslim, No. 2759.

 El arrepentimiento sincero no es meramente una cuestión de pronunciar unas palabras con la lengua. La aceptabilidad del arrepentimiento está sujeta a las condiciones de que la persona abandone el pecado y se corrija, que lamente lo que ha hecho, y tome la decisión de no volver a aquello de lo que se ha arrepentido. Cuando el pecado atenta contra los derechos del prójimo, se agrega la condición de que restaure el daño que causó, devolviendo o reponiendo la propiedad a sus legítimos dueños y pidiendo disculpas. Todo esto debe suceder antes de que la agonía de la muerte le llegue. Allah dijo (traducción del significado):

 “Allah perdona sólo a quienes cometen el mal por ignorancia y pronto se arrepienten. A éstos Allah los absuelve porque Allah es Sabio, Omnisciente.No serán perdonados quienes sigan obrando mal hasta que les sorprenda la muerte y entonces digan: Ahora me arrepiento. Ni tampoco quienes mueran siendo incrédulos; a éstos les tenemos reservado un castigo doloroso” (an-Nisá' 4:17-18).

 Dios acepta el arrepentimiento y es Misericordioso. Él convoca a los pecadores a arrepentirse, para que Él pueda perdonarlos:

 “Vuestro Señor ha decretado que Su misericordia esté por encima de Su ira. Quien de vosotros cometa una falta por ignorancia, y luego se arrepienta y enmiende, sepa que ciertamente Él es Absolvedor, Misericordioso” (al-An’ám 6:54).

 Dios es Benevolente con Sus servidores y ama a aquellos que se arrepienten. Él acepta su arrepentimiento, como Allah dijo (traducción del significado):

“Él es Quien acepta el arrepentimiento de Sus siervos y perdona sus pecados, y está bien enterado de cuánto hacéis” (ash-Shurá 42:25).

 “Ciertamente Allah ama a los que se arrepienten y purifican” (al-Báqarah 2:222).

 Cuando un incrédulo se convierte al Islam, Dios convierte sus malas obras (sai’at) en fuentes de bendición (hasanát), y perdona todos sus pecados previos, como Él dijo (traducción del significado):

“Diles a los incrédulos que si desisten, les será perdonado cuanto cometieron en el pasado” (al-Anfál 8:38).

 Allah es Perdonador y Misericordioso, y ama el arrepentimiento de Sus servidores. Les ordenó arrepentirse para que pueda perdonarlos. Pero los malvados entre la gente y los genios quieren conducir a la gente lejos de la verdad, y hacerlos inclinarse hacia las falsedades, como Allah dijo (traducción del significado):

“Allah quiere absolveros, mientras que quienes siguen sus pasiones quieren que os extraviéis completamente” (an-Nisá' 4:27).

  La misericordia de Dios abarca todas las cosas. Si los pecados de una persona son muy grandes y se ha dañado muchísimo a sí mismo, pero luego se arrepiente, Dios aceptará su arrepentimiento y perdonará sus faltas sin importar cuán grandes sean. Allah dijo (traducción del significado):

 “Diles a quienes transmitan Mi Mensaje que Yo digo: ¡Oh, siervos Míos! Vosotros que os habéis excedido cometiendo pecados en detrimento propio, no desesperéis de la misericordia de Allah; por cierto que Allah puede perdonar todos los pecados, porque Él es Absolvedor, Misericordioso” (az-Zúmar 39:53).

 El Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Nuestro Señor baja a la parte más baja del cielo cuando falta un tercio de la noche, y dice: “¿Quién Me invoca, para que pueda responderle? ¿Quién Me pedirá, para que Yo le dé? ¿Quién buscará Mi perdón, para que Yo lo perdone?”. Narrado por Muslim, No. 758.

 El ser humano es débil. Si una persona peca debe arrepentirse y buscar el perdón de Dios cada vez que lo haga. Dios es Perdonador y Misericordioso, El Único, Quien ha dicho (traducción del significado):

“Quien obre mal o cometa iniquidad y luego pida perdón a Allah, encontrará que Allah es Absolvedor, Misericordioso” (an-Nisá' 4:110).

 El musulmán es vulnerable a cometer errores y caer en pecados. Por eso debe arrepentirse y buscar el perdón de Dios repetidamente. El Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “Por Dios, que yo me arrepiento y busco el perdón de Dios más de setenta veces cada día”. Narrado por al-Bujari, No. 6307.

 Dios ama el arrepentimiento de Sus servidores, y lo acepta. Ciertamente, Él se regocija por ello, como dijo el Profeta (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él): “Cuando una persona se arrepiente, Dios se regocija más que uno de ustedes cuando encuentra su camello con todos sus víveres, luego de haberlo perdido en el desierto”. (Consensuado, narrado por al-Bujari, No. 6309.

Origen: De Usul ad-Dín al-Islami por el Shéij Muhámmad ibn Ibrahím at-Tuwairi