Alabado sea Dios.
Si el doctor está realizando tratamientos normales y rutinarios que no encierran ningún peligro para él o para el paciente, no es permisible para el doctor romper su ayuno a causa de esto. En cambio, si el paciente tratado tiene una condición seria que requiere un tratamiento exhaustivo o delicado, como una operación, en ese caso es permisible para el doctor que lo trata romper su ayuno, porque su trabajo es indispensable para proteger la salud y la vida de otra persona.
Y Allah es la Fuente de toda fuerza. Que Dios bendiga y otorgue la paz a nuestro Profeta Muhámmad, a su familia y a sus compañeros. Fin de la cita.
Shéij ‘Abd el-‘Azíz ibn Baaz, shéij Sálih al-Fawzán, shéij ‘Abd el-‘Azíz Aal ash-Sháij, shéij Abu Bákr Abu Zaid.