Jueves 7 Sha'ban 1446 - 6 Febrero 2025
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Reglas de comportamiento del musulmán en el baño

Pregunta

¿Es cierto que las reglas para los musulmanes indican que los hombres deben sentarse o acuclillarse para orinar? Me pregunto si no sería adecuado no utilizar el mingitorio que hay en el baño de hombres si creo que hay un musulmán cerca de mí en el baño. Sé que las reglas para las mujeres son mucho más estrictas que para la mayoría de las mujeres occidentales, y respeto mucho a las mujeres musulmanas por eso. Tampoco quiero ofender a los musulmanes si es que me estoy comportando, sin saberlo, de un modo ofensivo cerca de ellos. Muchas gracias de antemano por su respuesta y que desciendan sobre usted las bendiciones de salud y paz.

Resumen de la respuesta

La etiqueta musulmana para ir al baño incluye: no mirar hacia la qiblah, no tocarse el pene con la mano derecha, no quitarse la impureza con la mano derecha, responder a la llamada de la naturaleza sentado, ocultarse de la vista de los demás, recitar dhikr al entrar o salir del baño y no orinar en agua estancada.

Texto de la respuesta

Alabado sea Dios.

Ante todo, tenemos que agradecerle por su preocupación con respecto a los sentimientos de los musulmanes y por su intención de averiguar qué cosas pueden ofender a un musulmán para así evitar hacerlas. Con mucho gusto le ofrecemos una respuesta detallada a su pregunta y más aún, con la esperanza de que las puertas del bien se abran para usted.

Uno de los signos de grandeza de la bendita legislación islámica es el hecho de que no existe cosa beneficiosa, grande o pequeña, que no se nos haya ordenado hacer, y tampoco existe cosa perjudicial, grande o pequeña, que no se nos haya prohibido o advertido sobre ella. Es perfecta y completa en todos los aspectos, un hecho que ha sorprendido enormemente a los no musulmanes y se han ganado su admiración. En los tiempos del Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), uno de los politeístas le dijo a Salman Al Farsi (uno de los Compañeros del Profeta, que Al-lah esté complacido con él): “Tu Profeta te ha enseñado todo, ¡aún cómo defecar!”. Salman respondió: “Sí, él nos prohibió orientarnos a la qiblah al orinar o defecar…” (registrado por At-Tirmidhi, núm. 16; se dice que es un hadiz hasan sahih; también registrado en Sahih Muslim y en otras fuentes). La Shari’ah islámica incluye un número de reglas y modales que deben cumplirse al responder al llamado de la naturaleza, entre ellos:

No orientarse a la qiblah (dirección de la oración, es decir, la Ka’bah (que fue construida en La Meca por Ibrahim, la paz sea con él, tal como le ordenó Al-lah) al orinar o defecar. Esto se hace por respeto a la Quibla y por los símbolos y rituales de Al-lah. El Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “Cuando alguno de ustedes se siente a responder el llamado de la naturaleza, no debe orientarse a la qiblah, ni darle la espalda” (Muslim, 389).

No debe tocarse el pene con la mano derecha al orinar, porque el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “Cuando alguno de ustedes orine, no debe sostenerse el pene con la mano derecha ni limpiarlo con la mano derecha; y (cuando beba), no debe respirar dentro de la vasija” (Al Bujari, 150).

No debe limpiarse las impurezas con la mano derecha, sino que debe utilizar la mano izquierda con ese fin, debido a lo dice el hadiz mencionado anteriormente, y porque el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “Cuando alguno de ustedes se higienice, no debe utilizar la mano derecha” (Al Bujari, 5199). La esposa del Profeta, Hafsa (que Al-lah esté complacido con ella), contó que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) solía usar su mano derecha para comer, beber, realizar el wudu’, vestirse, dar y recibir cosas, y la mano izquierda con otros fines (según el Imam Ahmad; ver también Sahih Al Yami’, 4912). Abu Hurairah manifestó que el Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “Cuando alguno de ustedes se higienice, no debe utilizar la mano derecha, debe usar la mano izquierda” (Ibn Maya, 308; ver también Sahih Al Yami’, 322).

La Sunnah es responder el llamado de la naturaleza sentado, acercándose al suelo lo más que se pueda, porque de esta manera el acto es más privado, y es menos probable que uno pueda salpicarse la ropa o el propio cuerpo con la orina, ensuciándose. Si la persona se asegura de evitar esto, entonces puede orinar de pie .

La persona debe ocultarse de la vista de los demás al responder el llamado de la naturaleza. El Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) solía hacerlo detrás de algún montículo en el suelo o en algún jardín de palmeras datileras (Muslim, 517). Si una persona se encuentra en un lugar abierto y no encuentra nada para ocultarse a la hora de hacer sus necesidades, debe alejarse de las personas que lo rodean, ya que Al Muguira Ibn Shu’ba dijo: “Estuve con el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) en un viaje, de repente sintió la necesidad de responder al llamado de la naturaleza, por lo que se alejó de nosotros” (At-Tirmidhi, 20; se dice que es un hadiz hasan sahih).

‘Abdal-lah Ibn Abi Qurad dijo: “Salí con el Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) a un espacio abierto, y cuando sintió la necesidad de responder al llamado de la naturaleza, se alejó” (Según An-Nasa’i, 16; ver también Sahih Al Yami’, 4651).

La persona no debe descubrir su ‘awra (partes privadas) hasta tanto no se haya acuclillado cerca del suelo, porque es la mejor manera de mantener la privacidad, tal como dijo Anas (que Al-lah esté complacido con él): “Cuando el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) quería responder al llamado de la naturaleza, no se levantaba su túnica hasta que se acuclillaba cerca del suelo” (At-Tirmidhi, 14; ver también Sahih Al Yami’, 4652). Si una persona se encuentra en un retrete moderno, no debe levantarse la túnica hasta que haya cerrado la puerta y esté fuera de la vista de otros. Con respecto a este punto y al anterior, cabe acotar que la costumbre de muchas personas en Occidente y en otros lugares de orinar de pie delante de otras personas (utilizando los mingitorios) es algo que va contra los buenos modales, la modestia y la decencia, y es repulsivo para cualquiera que tenga sentido común y sabiduría. ¿Cómo puede alguien descubrir delante de otras personas el ‘awra (partes íntimas)? La idea de que debe permanecer cubierto está bien establecida entre todas las personas decentes y sabias de todas las razas. Ya está mal de por sí construir baños de este tipo, en los que las personas que acuden pueden verse entre sí, haciéndolas peores que algunos tipos de animales, cuyo hábito es ocultarse de sus pares a la hora de orinar o defecar.

También es un acto de buenos modales según la legislación (Shari’ah) recitar ciertos recuerdos y súplicas (adhkar) al entrar o salir del baño, que sean apropiadas al lugar y la situación. Nuestro Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) nos enseñó que, al entrar al baño, uno debe decir: “Al-lahumma inni a’udhu bika min al jubzi wa al jaba’iz” (Oh, Al-lah, en Ti busco refugio de los demonios masculinos y femeninos). Al salir del baño, debe decir: “Ghufranak” (busco Tu perdón).

Debe también tener cuidado de limpiarse todas las impurezas luego de orinar o defecar, porque el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) nos advirtió que debemos ser muy cuidadosos al limpiarnos cuando dijo : “La mayoría de los castigos de la tumba serán debido a la orina” (Ibn Maya, 342; ver también Sahih Al Yami’, 1202).

Ibn ‘Abbas (que Al-lah esté complacido con él) informó que el Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) pasó por dos tumbas y dijo: “Están siendo castigados, pero no por pecados graves. Uno de ellos no solía protegerse (es decir, mantenerse limpio) de la orina, y el otro iba por allí diseminando rumores maliciosos” (Al Bujari, 5592).

Toda impureza debe ser lavada o limpiada tres veces o un número impar de veces mayor a tres, según sea necesario para limpiarla totalmente, porque ‘Aishah (que Al-lah esté complacido con ella) informó que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) solía lavarse la parte posterior tres veces. Ibn ‘Umar dijo: “Nosotros también lo hacíamos y descubrimos que era algo sanador y purificante” (Ibn Mayah, 350; ver también Sahih Al Yami’, 4993). Abu Hurairah (que Al-lah esté complacido con él) informó que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “Cuando alguno de ustedes se higienice (con piedras en la antigüedad y papel higiénico en la actualidad) debe usar un número impar” (Imam Ahmad; clasificado como Hasan en el libro Sahih Al Yami’, 375).

No debe utilizar huesos ni estiércol para limpiarse ni eliminar elementos impuros, sino que debe utilizar algún papel higiénico, piedras, etc. Abu Hurairah (que Al-lah esté complacido con él) dijo que solía llevar una vasija para que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) realizara el wudu’ y se higienizara después de hacer sus necesidades. Mientras lo seguía, él (el Profeta) preguntó: “¿Quién es?”, y él respondió: “Soy Abu Hurairah”. Le pidió: “Tráeme algunas piedras para poder higienizarme, pero no me traigas huesos ni estiércol”. “Por eso le traje unas piedras, llevándolas en el ruedo de mi túnica, y las coloqué a su lado, y luego me fui. Cuando terminó, regresé y le pregunté: ‘¿Por qué no huesos ni estiércol?’. Me respondió: ‘Porque son el alimento de los yinn’” (Al Bujari, 3571).

Una persona no debe orinar sobre agua estancadas, porque Yabir (que Al-lah esté complacido con él) informó que el Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) prohibió orinar sobre agua estancada (Muslim, 423), porque esto contamina el agua y perjudica a quienes la utilizan.

Las personas tampoco deben orinar a la vera del camino o en lugares donde la gente busca sombra, porque es una ofensa. Abu Hurairah informó que el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) dijo: “Tengan temor de las dos cosas que traen maldiciones”. Le preguntaron: “¿Cuáles son esas dos cosas que traen maldiciones?”. Él respondió: “Cuando una persona hace sus necesidades en el camino donde otros caminan o en el lugar donde buscan sombra” (Abu Dawud, 23; ver también Sahih Al Yami’, 110).

No se debe saludar a una persona que está haciendo sus necesidades, ya que es una falta de respeto hacia Al-lah mencionar su nombre en un lugar impuro. [Nota del traductor: El saludo islámico es “as-salam ‘alaikum (que la paz descienda sobre ti)”; uno de los nombres de Al-lah es As-Salam (Paz)]. Yabir Ibn ‘Abdul-lah informó que un hombre pasó junto al Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) mientras este orinaba y lo saludó. El Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) le dijo: “Si me ves en este estado, no me saludes, porque si lo haces, no responderé” (Ibn Mayah, 346; ver también Sahih Al Yami’, 575). La mayoría de los expertos dicen que es makruh (reprochable, desaconsejable) hablar en el baño si no hay necesidad de hacerlo.

Estas son algunas de las reglas y modales prescritos por la legislación islámica (Shari’ah) en este asunto que se repite muchas veces al día en la vida de una persona. Si la Shari’ah les ha prestado una atención tan minuciosa a los detalles de un tema tan mundano, ¿cuál cree usted que será su posición ante temas más importantes? ¿Conoce otra religión o sistema en el mundo que tenga leyes como estas? Esto es suficiente, por Al-lah, para demostrar la perfección y belleza de la Jurisprudencia Islámica, y la necesidad de cumplir con ella. Le pedimos a Al-lah que nos dé a nosotros y a usted la fuerza y que nos guíe hacia la verdad.

Que Al-lah bendiga a nuestro Profeta Muhammad.

Y Al-lah sabe más.

Origen: Sheij Muhammed Salih Al-Munajjid