Alabado sea Dios.
Una mujer que no tiene un mahram que la acompañe en el viaje no puede realizar el Hayy o la ‘Umrah, y está perdonada por no hacerlo. Es haraam que ella viaje para realizar el Hayy, o por otra razón sin su mahram, y debe ser paciente hasta que Allah le haga más fácil la posibilidad de que uno de sus mahrams viaje con ella.
Las formas de bondad son muchas. Si un musulmán no puede realizar un acto de adoración, debe esforzarse en los actos que sí puede realizar, hasta que Allah le facilite la forma de realizar los que no pudo hacer.
Por la misericordia de Allah hacia sus siervos creyentes, si una persona resuelve realizar un acto de adoración pero no puede hacerlo por una determinada excusa, se le otorgará la recompensa del que sí lo realiza. Al-Bujari (4423) narró de Anas ibn Maalik (que Allah esté complacido con él) que el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) volvía de la campaña de Tabuk, y cuando se acercó a Madinah dijo: “En Madinah hay personas que, cada vez que tú marchas o cruzas un valle, están contigo”. Dijeron: “Oh, Mensajero de Allah, pero ellos estaban en Madinah”. Él dijo: “estaban en Madinah porque alguna excusa los detuvo”.
Los expertos de la Comisión Permanente dijeron:
Una mujer que no posee un mahram no debe realizar el Hayy, porque en su caso un mahram es parte de las condiciones para poder realizar el Hayy. Allah dice en el Corán (interpretación del significado):
“Es una obligación para los hombres peregrinar a esta Casa si se encuentran en condiciones de hacerlo [físicas y económicas]. Y quien niegue lo que Allah ha prescripto, sepa que Allah prescinde de todas las criaturas.”
[Aal ‘Imraan 3:97]
No está permitido que ella viaje para realizar el Hayy, ni por cualquier otro motivo salvo que se encuentre acompañada por su esposo o su mahram, debido al informe narrado por al-Bujari y Muslim de Ibn ‘Abbaas (que Allah esté complacido con él) que dice que él escuchó que el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “Ningún hombre debe estar a solas con una mujer, salvo que esté presente su mahram, y ninguna mujer debe viajar salvo que su mahram se encuentre con ella”. Un hombre se levantó y dijo: “¡Oh, Mensajero de Allah!, mi esposa ha salido para realizar el Hayy, y me he anotado para tal y tal campaña”. Él dijo: “Ve y realiza el Hayy con tu esposa”. Ésta es también la opinión de al-Hasan, al-Naja’i, Ahmad, Ishaaq, Ibn al-Mundhir y ashaab al-ra’i, y es la opinión correcta, debido al versículo citado, así como al significado general del hadiz que prohíbe que una mujer viaje sin su esposo o sin su mahram.
Maalik, al-Shaafi’i y al-Awzaa’i opinan diferente, y cada uno de ellos estipula una condición (que les permite a ellas hacerlo), pero no poseen evidencia suficientemente fuerte.
Ibn al-Mundhir dijo: “Ellos no siguieron el significado aparente del hadiz, y cada uno estipuló una condición (que les permite a ellas hacerlo), pero no poseen evidencia.
Fataawa al-Laynah al-Daa’imah li’l-Buhuz al-‘Ilmiyyah wa’l-Ifta’, 11/90, 91.
Y dijeron:
Si la situación es como se la describe – que no es fácil que su esposo o mahram viaje con usted para cumplir con la obligación del Hayy- entonces, usted no está obligada a cumplirla, porque el acompañamiento de su esposo o mahram durante el viaje para el Hayy es para usted una de las condiciones obligatorias del mismo. Es haraam que viaje para realizarlo, o por cualquier otro motivo sin ellos, incluso si viaja con la esposa de su hermano y un grupo de mujeres, según la opinión correcta de los expertos, porque el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “Ninguna mujer debe viajar, salvo que lo haga con su mahram”. (Sahih –acordado). Esto es así, salvo que su hermano viaje con su esposa, en cuyo caso se le permite viajar con él, porque es un mahram para usted. Esfuércese por realizar acciones virtuosas que no necesiten que usted viaje, y sea paciente, esperando que Allah le facilite las cosas y le permita realizar el Hayy con su esposo o mahram.
Fataawa al-Laynah al-Daa’imah li’l-Buhuz al-‘Ilmiyyah wa’l-Ifta’, 11/96.
Y Allah sabe mejor.