Alabado sea Dios.
Las normas de conducta basadas en la Sunnah que debemos seguir en el día del Eid
- Bañarse realizando la ablución mayor (ghusl) antes de salir para la oración. Se narró en un reporte auténtico en Al Muwatta’ y en otras partes, que ‘Abdal-lah Ibn ‘Umar solía realizar ghusl el día de ‘Eid Al Fítr antes de salir para la oración por la mañana (Al Muwatta’, 428).
An-Nawawi (que Al-lah lo tenga en Su misericordia) dijo que los musulmanes están unánimemente de acuerdo en que es recomendable (mustahab) hacer la ablución mayor antes de acudir a la oración del ’Eid .
La razón por la que es mustahab es la misma razón por la que es recomendable hacerlo antes de acudir a la oración del viernes (Yumu’ah) y a otras reuniones públicas. Y durante el 'Eid esta razón se vuelve más fuerte aún.
- Comer antes de salir a rezar la oración del ’Eid Al Fítr y después de la oración del ’Eid Al Ad-ha.
Parte de las normas de conducta es no salir a rezar la oración de ’Eid Al Fítr hasta haber comido algunos dátiles, por el reporte narrado por Al Bujari de Anas Ibn Málik, que dijo que el Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) no solía salir la mañana del ’Eid Al Fítr hasta haber comido algunos dátiles… de los cuales comía un número impar” (Al Bujari, 953).
Es recomendable comer antes de salir para enfatizar el hecho de que está prohibido ayunar en este día y para demostrar que el ayuno ha terminado.
Ibn Háyar (que Al-lah lo tenga en Su misericordia) sugirió que la razón para eso sería evitar la posibilidad de que el musulmán continúe ayunando y apresurarse a cumplir la orden de Al-lah (Al Fáth, 2/446).
Quien no tenga ningún dátil, puede romper su ayuno con cualquier cosa que sea permisible. Pero en ’Eid Al Ad-ha es recomendable no comer nada hasta que uno vuelva de la oración, entonces se debe comer de la ud-híah si se ha ofrecido en sacrificio. Si no se va a ofrecer un sacrificio, no hay nada de malo en comer antes de la oración.
- Takbir (decir Al-lahu Akbar: Al-lah es el más Grande) en el día del ’Eid.
Esta es una de las grandes tradiciones del día del ’Eid, porque Al-lah dijo (lo que en español se interpreta así): {… alaben y agradezcan a Al-lah por haberlos guiado} [2:185].
Se narró que Al Walíd Ibn Muslim dijo: “Le pregunté a Al Awzá’i y a Málik Ibn Anas acerca de decir el Takbir en voz alta durante las dos festividades. Ellos dijeron que sí, ‘Abdal-lah Ibn ‘Umar solía decirlo en voz alta en el día de la festividad del Fítr hasta que el imam salía a dirigir la oración.
Se narró en un reporte auténtico que ‘Abdur-Rahmán As-Sulami dijo: “Ellos lo enfatizaron más en el día de ’Eid Al Fítr que para el día del ’Eid Al Ad-ha”. Waqi’ dijo: “Esto se refiere al Takbir” (ver Irwa’ Al Ghalíl, 3/122).
Ad-Daraqtuni y otros narraron que en la mañana del ’Eid Al Fítr y el ’Eid Al Ad-ha, Ibn ‘Umar se esforzaba mucho en recitar el Takbir hasta que salía al lugar de la oración, entonces recitaba el Takbir hasta que venía el imam.
Ibn Abi Shaibah narró con una cadena de transmisión auténtica que Az-Zuhri dijo: “La gente solía recitar el Takbir durante el ’Eid cuando salían de sus casas hasta que llegaban a la mezquita, y hasta que el imam salía para rezar. Cuando el imam salía, hacían silencio y cuando él decía el Takbir, ellos decían el Takbir” (Ver Irwa’ Al Ghalíl, 1/121).
Decir el Takbir cuando uno sale de la casa hacia la mezquita y hasta que el imam salga a dirigir la oración era algo bien conocido entre las primeras generaciones de musulmanes piadosos (Sálaf). Esto ha sido narrado por varios eruditos, tales como Ibn Abi Shaibah, ‘Abdur-Razzáq y Al Firiábi en Ahkám Al ’Eidain (Normas de las dos festividades), de un grupo de estas primeras generaciones. Por ejemplo, Náfi’ Ibn Yubair solía recitar el Takbir y se quedaba asombrado de que la gente no lo hiciera, y dijo: “¿Por qué no recitan el Takbir?”.
Ibn Shiháb Az-Zuhri (que Al-lah lo tenga en Su misericordia) solía decir: “La gente solía recitar el Takbir desde que salían de sus casas hasta que el imam llegaba”.
El tiempo para el Takbir en el ‘Eid Al Fitr
El tiempo para el Takbir durante el ’Eid Al Fitr comienza desde la noche antes del ’Eid hasta que el imam entra a dirigir la oración comunitaria.
El tiempo para el Takbir en el ‘Eid Al Ad-ha
En el caso del ’Eid Al Ad-ha, el Takbir comienza con el primer día del mes de Dhul Híyyah y dura hasta la puesta del sol del último de los días de Tashriq.
Descripción del Takbir
Se narró en el Musánnaf de Ibn Abi Sháibah, con una cadena de transmisión auténtica, de Ibn Mas’ud (que Al-lah esté complacido con él), que él solía recitar el Takbir durante los días del Tashriq: Al-láhu ákbar, Al-láhu ákbar, la iláha il-la Al-lah; wa Al-láhu ákbar, Al-láhu ákbar, wa lil-láh il-hámd (Al-lah es el Más Grande, Al-lah es el Más Grande, no hay más divinidad que Al-lah; Al-lah es el Más Grande, Al-lah es el Más Grande, y para Él es toda la alabanza).
Se narró también en otras partes por Ibn Abi Shaibah, con la misma cadena de transmisión, pero con la frase “Al-láhu ákbar” repetida tres veces.
Al Mahámili narró con una cadena de transmisión auténtica, también de Ibn Mas’ud: “Al-láhu ákbaru kabira, Al-láhu ákbaru kabira, Al-láhu ákbaru wa ayál-lu, Al-láhu ákbar wa lil-láh il-hámd” (Al-lah es el Más Grande ciertamente, Al-lah es el Más Grande ciertamente, Al-lah es el Más Grande y Glorificado, Al-lah es el Más Grande y a Al-lah pertenece toda alabanza) (ver Al Irwa’, 3/126).
- Saludar y felicitarse mutuamente
Las normas de comportamiento durante la festividad también incluyen intercambiar felicitaciones y buenos deseos mutuamente , no importa con qué palabras; por ejemplo, se puede decir: “Taqábbala Al-lah mínna wa minkum” (que Al-lah acepte mis buenas obras y las tuyas), y otras expresiones permisibles de felicitaciones.
Se narró que Yubair Ibn Nufair dijo: “Cuando los compañeros del Profeta (que Al-lah esté complacido con ellos) se encontraban el uno al otro en el día de la festividad del ’Eid, se decían: ‘Que Al-lah acepte mis buenas obras y las tuyas’”. Ibn Háyar dijo que su cadena de transmisión es buena (Al Fáth, 2/446).
Intercambiar felicitaciones fue algo bien conocido entre los compañeros del Profeta (que Al-lah esté complacido con ellos) y los eruditos, tales como el Imam Ahmad y otros, lo permitieron. Hay evidencia que sugiere que está prescrito intercambiar felicitaciones y buenos deseos en ocasiones especiales, y que los compañeros del Profeta se felicitaban el uno a otro cuando sucedían cosas buenas, tal como cuando Al-lah aceptaba el arrepentimiento de un hombre, salían y lo felicitaban por eso, etc. Indudablemente, estas felicitaciones están entre las nobles características de los musulmanes.
Lo menos que se puede decir con respecto al tema de las felicitaciones es que es un deber devolver el saludo a quien nos felicita durante la festividad, y permanecer en silencio si los demás también lo están, como el Imam Ahmad (que Al-lah lo tenga en Su misericordia) dijo: “Si alguien te felicita, entonces responde; de otra manera, no tomes la iniciativa”.
Se narró que ‘Abdal-lah Ibn ‘Umar (que Al-lah esté complacido con él) dijo que ‘Umar tomó una capa brocada que estaba a la venta en el mercado y se la trajo al Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), y le dijo: “Oh, Mensajero de Al-lah, compra esto y engalánate para la festividad del ’Eid, y para recibir a las delegaciones”. El Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) le respondió: “Más bien esta es la vestimenta de quien no tiene parte [en la piedad o en la recompensa] del Más Allá)…” (narrado por Al Bujari, 948). El Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) acordó con ‘Umar en la idea de engalanarse para la festividad, pero rechazó la idea de elegir esa capa porque estaba hecha de seda.
Se narró que Yábir (que Al-lah esté complacido con él) dijo: “El Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) tenía una capa que solía vestir durante las dos festividades (’Eid Al Fítr y ’Eid Al Ad-ha) y durante la oración en congregación de los viernes” (Sahih Ibn Juzaimah, 1756).
Al Baihaqi narró con una cadena de transmisión auténtica que ‘Ibn ‘Umar solía usar sus mejores ropas para el ’Eid. Entonces, el musulmán debe vestir las mejores ropas que tenga cuando salga para la oración del ’Eid.
Con respecto a la mujer, debe evitar adornarse cuando va a la oración del ’Eid, porque está prohibido que muestre su encanto y adornos a los hombres que no son sus mahram. Es también haram para una mujer que quiere acudir a la oración del ’Eid ponerse perfume o exponer a los hombres a las tentaciones, porque los hombres deben ir a la mezquita solo con el propósito de adorar a Al-lah.
- Ir a la mezquita por un camino y volver por otro
Se narró que Yábir Ibn ‘Abdal-lah (que Al-lah esté complacido con él) dijo: “En el día del ’Eid, el Profeta (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) solía variar su ruta” (narrado por Al Bujari, 986).
Se dijo que la razón de esto era que los dos caminos testificarían a su favor en el Día de la Resurrección, porque la Tierra hablará durante el Día de la Resurrección y dirá todo lo que los seres humanos hicieron sobre ella, lo bueno y lo malo.
También se dijo que esto era para manifestar los rituales representativos (sha’a’ir) del Islam en ambos caminos, para manifestar el recuerdo de Al-lah (dhikr) o para contrariar a los hipócritas y a los incrédulos, y para asustarlos haciendo exhibición del gran número de gente que iba o venía por estos motivos. Además, se dijo que fue para atender las necesidades de la gente, para responder sus preguntas, enseñarles, dar un ejemplo, dar caridad a los necesitados, visitar a sus parientes y mantener los lazos familiares.
Y Al-lah sabe más.