Jueves 20 Yumada al Ula 1446 - 21 Noviembre 2024
Español

Lineamientos islámicos para las personas que visitan la Mezquita del Profeta

Pregunta

Conozco un grupo de hermanos que van a visitar la Mezquita del Profeta después de su Hayy este año. Ellos quisieran que ustedes les den algunos consejos.

Texto de la respuesta

Alabado sea Dios.

Alabado sea Allah. 

Oh, ustedes que llegan a la Ciudad del Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él), han venido a un buen lugar y obtendrán una gran recompensa. Que Allah acepte sus acciones virtuosas y haga realidad sus esperanzas. Bienvenidos a la tierra de la Hégira y la victoria, la tierra del Profeta Elegido, y la tierra hacia la cual migraron los Sahaabah y el hogar de los Ansaar. 

A continuación encontrará unas pocas palabras para los que quieren visitar la Mezquita del Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él):

1- Oh, ustedes que llegan a Medina, están en un lugar que, después de la Meca es el mejor y más noble de todos los lugares, respétenla como debe ser; honren su santidad y cumplan con el mejor protocolo en ese lugar. Recuerden que Allah ha amenazado con el peor de los castigos a los que cometan el mal allí. Se narró de Abu Hurayrah (que Allah esté complacido con él) que el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “Medina es un Haram (santuario), entonces todo aquel que cometa el mal en ese lugar o proteja a quien realiza el mal recibirá la maldición de Allah, los ángeles y toda la humanidad. Allah no aceptará ninguna acción obligatoria o voluntaria por parte de esta persona en el Día de la Resurrección”. Narrado por al-Bujari, 1867; Muslim, 1370. 

Entonces todo el que cometa una mala acción u ofrezca protección a un malhechor que busque su ayuda se está exponiendo a un castigo humillante y la ira del Señor de los Mundos.

Una de las peores acciones que violan su pureza es realizar abiertamente actos de bid’ah, y arruinar su atmósfera con mitos e ideas falsas, y contaminar su tierra pura con artículos que promueven la bid’ah, libros que contienen shirk, y todo tipo de acciones haram reprensibles que se encuentran en contra de la shari’ah islámica. El malhechor y el que lo protege son igualmente pecadores.

2- Visitar la Mezquita del Profeta es un acto que se considera Sunnah; no es un acción obligatoria y no tiene nada que ver con el Hayy, tampoco es una acción que se necesite para que el Hayy esté completo. Todos los hadices que dicen que esto está relacionado con el Hayy o que dicen que visitar la tumba del Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) está relacionado con el Hayy son inventadas y falsas. Todo el que viaje a Medina con el objetivo de visitar la Mezquita y orar allí, su intención es aceptable y sus esfuerzos serán recompensados. Pero todo el que viaje allí sólo con el objetivo de visitar las tumbas y buscar la ayuda de sus ocupantes, su intención es haram y sus acciones son reprensibles. Se narró de Abu Hurayrah que el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “No viajen para visitar ninguna mezquita, excepto tres: al-Masyid al-Haraam [en la Meca], esta Mezquita que es mía [en Medina] y al-Masyid al-Aqsa [en Jerusalén].” Narrado por al-Bujari, 1189; Muslim, 1397. 

Se narró de Yaabir (que Allah esté complacido con él) que el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “Los mejores lugares a los que una persona puede viajar son mi Mezquita, y la Casa Antigua (es decir, la Ka’bah)”. Narrado por Ahmad, 3/350; clasificado como sahih por al-Albaani en al-Silsilah al-Sahihah, 1648. 

3- Las oraciones ofrecidas en la Mezquita de Medina traen una recompensa múltiple, tanto las oraciones obligatorias como las oraciones nafil, según la opinión más correcta de las dos opiniones de los expertos. El Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “Una oración en esta Mezquita mía es mejor que miles de oraciones ofrecidas en cualquier otro lugar, excepto en al-Masjid al-Haraam”. Narrado por al-Bujari, 1190; Muslim, 1394. 

Sin embargo, ofrecer oraciones voluntarias en el hogar es mejor que ofrecerlas en la mezquita, incluso si la recompensa por ofrecerlas en la Mezquita es multiplicada, porque el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “Las mejores oraciones son las que un hombre ofrece en su hogar, fuera de las oraciones que están prescritas (las obligatorias)”. Narrado por al-Bujari, 731; Muslim, 781. 

4- El que visita esta gran Mezquita debe tener en cuenta que no está permitido buscar bendiciones (barakah) de ninguna de las partes de la Mezquita del Profeta, como los pilares, las paredes, las puertas, el mihrab o minbar, tocándolas o besándolas. Tampoco se permite buscar bendiciones de la huyrah del Profeta (la cámara), tocándola, besándola, o limpiando la ropa con ésta, ni circunvalándola. El que haga algo de esto debe arrepentirse y no debe hacerlo de nuevo.

5- Está prescrito que el que visita la Mezquita del Profeta ore dos rak’ahs en la Rawdah o lo que quiera de oraciones voluntarias, porque ha sido comprobado que existen virtudes al hacerlo. Se narró de Abu Hurayrah que el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “El área entre mi casa y mi minbar es uno de los jardines (riyaad, sing. rawdah) del Paraíso, y mi minbar es en mi manantial (hawd)” Narrado por al-Bujari, 1196; Muslim, 1391. 

Y se narró que Yazid ibn Abi ‘Ubayd dijo: “Solía llegar con Salamah ibn al-Akwa’ y él oraba en el pilar que se encontraba cerca de mus-haf, es decir, en la Rawdah. Yo le dije: “Oh Abu Muslim, veo que te gusta orar en este pilar” Él dijo: “Vi que al Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) le gustaba orar aquí". Narrado por al-Bujari, 502; Muslim, 509. 

Ser entusiasta para orar en al-Rawdah no justifica el hecho de ser agresivo con la gente, ni empujar a los débiles, ni pisar sus cabezas.

6- Está prescrito que el que visita Medina y el que vive allí vaya a la Mezquita de Quba’ y ore allí, siguiendo el ejemplo del Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) y buscando la recompensa de la ‘Umrah. Se narró que Sahl ibn Hanif dijo: El Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “Todo el que salga hasta llegar a esta mezquita –refiriéndose a la Mezquita de Quba’ – y ora allí, esto será igual a la ‘Umrah”. Narrado por Ahmad, 3/437; al-Nasaa’i, 699; clasificado como sahih por al-Albaani en Sahih al-Targhib, 1180, 1181. 

Según Ibn Maayah: “El que se purifica en su casa, y llega a la Mezquita de Quba’ y ora allí, tendrá la recompensa de una ‘Umrah”. Narrado por Ibn Maayah, 1412. 

En al-Sahihayn se narra que el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) solía ir a la Mezquita de Quba’ todos los Sábados, caminando o montando, y oraba dos rak’ahs en ese lugar. Narrado por al-Bujari, 1191; Muslim, 1399.

7- Para el visitante de Medina, no está prescrito que visite ninguna otra mezquita en la ciudad salvo estas dos, la Mezquita del Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) y la Mezquita de Quba’. No está prescrito que el visitante ni cualquier otra persona se dirija a un lugar en particular, con la esperanza de conseguir bendiciones o para adorar a Allah en ese lugar, cuando no existe evidencia del Corán o la Sunnah con respecto a la visita a ese lugar, y evidencia de que los Sahaabah  (que Allah esté complacido con ellos) lo hicieran.

No está prescrito visitar los lugares y las mezquitas en las que el Profeta oraba (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) o donde oraban los Sahaabah, para orar allí o para adorar a Allah ofreciendo du’a’s, etc., porque el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) no ordenó hacer tal cosa, ni alentó a las personas para que visitaran esos lugares. Se narró que al-Ma’rur ibn Suwayd (que Allah tenga piedad de él) dijo: Salimos con ‘Umar ibn al-Jattaab, y pasamos por una mezquita. Las personas se apresuraron para orar allí, y ‘Umar preguntó: “¿Qué les pasa?” Ellos dijeron: “Ésta es una de las mezquitas en las que oró el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones desciendan sobre él)”. ‘Umar dijo: “Oh pueblo, los que estuvieron antes que ustedes fueron condenados por cumplir dichas prácticas, hasta establecer lugares de adoración allí. Si llega el momento de una oración cuando se encuentran allí, oren, pero si no es momento de una oración, continúen con su camino”. Narrado por Ibn Abi Shaybah en al-Musannaf, 7550. 

Cuando ‘Umar ibn al-Jattaab supo que había gente que iba bajo el árbol en el que el Profeta (la paz y las bendiciones desciendan sobre él) recibió el bay’ah (juramento de lealtad), él ordenó talarlo. Narrado por Ibn Abi Shaybah in al-Musannaf, 7545. 

8- Está prescrito que los hombres que visitan la Mezquita del Profeta visiten la tumba del Profeta (la paz y las bendiciones desciendan sobre él) y las tumbas de sus dos compañeros Abu Bakr y ‘Umar (que Allah esté complacido con ellos), y envíen salams sobre ellos y realicen du’a’ por ellos. Pero no está permitido que las mujeres visiten las tumbas, según la opinión más correcta de las dos opiniones de los expertos, debido al hadiz narrado por Abu Dawud (3236), al-Tirmidhi (3236) e Ibn Maayah (1575) de Ibn ‘Abbaas (que Allah esté complacido con él), según el cual el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) maldijo a las mujeres que visitan las tumbas frecuentemente. Clasificado como sahih por al-Albaani en Islaah al-Masaayid. 

Y al-Tirmidhi (1056) narró de Abu Hurayrah que el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones desciendan sobre él) maldijo a las mujeres que visitaban frecuentemente las tumbas. Al-Tirmidhi dijo que es hasan sahih. También fue narrado por Ahmad, 2/337; Ibn Maayah, 1574; clasificado como hasan por al-Albaani en Sahih al-Tirmidhi, 843; Mishkaat al-Masaabih, 1770. 

La forma en la que debe visitarse la tumba del Profeta (la paz y las bendiciones desciendan sobre él) es la siguiente: el visitante debe llegar a la tumba, mirarla y decir “Al-salaamu ‘alayka ya Rasul-Allaah (la paz descienda sobre ti, Oh Mensajero de Allah)”. Luego debe moverse unos pasos hacia su derecha y saludar a Abu Bakr, expresando: “Al-salaamu ‘alayka ya Aba Bakr.” Luego debe moverse un poco más hacia la derecha, y saludar a ‘Umar ibn al-Jattaab, expresando: ‘Al-salaamu alayka ya ‘Umar”.

9- Está prescrito que los hombres que visitan Medina visiten a las persona enterradas en Baqi’ al-Gharqad y los mártires de Uhud, para enviar salams sobre ellos y realizar du’a’ para ellos. Se narró que Buraydah (que Allah esté complacido con él) dijo: El Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones desciendan sobre él) solía enseñarles, cuando partían hacia las tumbas, que dijeran: “Al-salaamu ‘alaykum ahl al-diyaar min al-mu’minin wa’l-muslimeen, wa innaa in sha Allaah bikum laahiqun. Nas’al Allaah lana wa lakum al-‘aafiyah. (La paz descienda sobre ti, oh, habitantes de estas moradas, creyentes y musulmanes. Nos uniremos a ustedes, si ésta es la voluntad de Allah. Le pedimos a Allah que nos otorgue la salvación)”.

10- Visitar las tumbas está prescrito por dos grandes motivos:

          (i)  Para que el visitante pueda recibir una lección y un recordatorio.

          (ii) Para que la persona visitada sea beneficiada por los du’a’s y las oraciones de misericordia y perdón que se ofrecen para ella.

El permiso para visitar las tumbas está sujeto a la condición de que no se digan palabras falsas, que son lo peor del shirk y el kufr.  Se narró de Buraydah que su padre dijo que el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “Solía prohibir la visita a las tumbas, pero ahora el que quiera visitarlas puede hacerlo, pero no debe pronunciar falsedades”. Narrado por al-Nasaa’i, 2033; clasificado como sahih por al-Albaani en al-Silsilah al-Sahihah, 886. 

Muslim también narró esto (no. 977), pero con la siguiente frase: “pero no pronuncien falsedades”.

No está permitido circunvalar estas u otras tumbas, ni orar hacia ellas o entre ellas, o realizar actos de adoración ante ellas como leer el Corán, realizar du’a’, etc., porque éstos son medios para asociar a otros en la adoración al Señor de toda creación, y considerarlas (a las tumbas) como lugares de adoración, incluso si no hay una mezquita construida sobre ellas. Se narró que ‘Aa’ishah y ‘Abd-Allaah ibn ‘Abbaas (que Allah esté complacido con ambos) dijeron: Cuando se acercaba la muerte el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él), se colocó su manto sobre su rostro, y cuando sintió calor se lo quitó y dijo: “Que la maldición de Allah descienda sobre los judíos y cristianos que tomaron las tumbas de sus Profetas como lugares de adoración” -advirtiendo en contra de lo que ellos hicieron. Narrado por al-Bujari, 436; Muslim, 529. 

Y él (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “Las peores personas son aquellas sobre las que llegará la Hora mientras aún estén vivos, y aquellos que toman las tumbas como lugares de adoración”. Narrado por Ahmad, 1/405. También fue narrado por al-Bujari en un informe mu’allaq en Kitaab al-Fitan, Baab Duhur al-Fitan, 7067. También fue narrado por Muslim en Kitaab al-Fitan, Baab Qurb al-Saa’ah, 2949, sin mencionar cuando se toman las tumbas como lugares de adoración.

Se narró que Abu Marzad al-Ghanawi dijo: Oí que el Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “No se sienten sobre las tumbas ni oren en dirección a ellas". Narrado por Muslim, 972. 

Y se narró que Abu Sa’id al-Judri (que Allah esté complacido con él) dijo: El Mensajero de Allah (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) dijo: “Toda la tierra es un lugar para orar, salvo los cementerios y los baños”. Narrado por Ahmad, 3/83; al-Tirmidhi, 317; clasificado como sahih por al-Albaani en Irwa’ al-Ghalil, 1/320. 

Según el hadiz narrado por Anas (que Allah esté complacido con él) que el Profeta (la paz y las bendiciones de Allah desciendan sobre él) prohibió a las personas que oren entre las tumbas. Narrado por Ibn Maayah, 1698. Al-Hayzami dijo en Mayma’ al-Zawaa’id (2/27). Sus hombres son hombres de sahih. 

No está permitido postrarse ante las tumbas, esto es un tipo de idolatría e ignorancia, y un signo de desviación intelectual y un atraso en la religión. No está permitido que el visitante de esas tumbas o cualquier otra persona busque bendiciones en ellas tocándolas, besándolas, aferrándose a ellas con cualquier parte de su cuerpo, o que busque sanación proveniente de su polvo frotando sus manos o cualquier parte de su cuerpo en ellas, o tomar parte de ellas para diluirla en agua y lavarse con esto. No está permitido que los visitantes de la tumba entierren cualquier parte de su cuerpo, cabello, o un pañuelo en ellas, ni que coloquen sus fotos o cualquier otra cosa que pueda colocarse en su tierra para buscar bendiciones (barakah). No está permitido arrojar dinero o cualquier tipo de alimentos, como granos, etc., sobre ellas. El que haga alguna de estas cosas debe arrepentirse y no hacerlo nunca más. No está permitido perfumarlas, o jurar a Allah por sus ocupantes. No está permitido llamar a Allah en virtud de sus ocupantes o de su estatus, más bien esto es una forma haram de implorar a Allah y es uno de los medios que conduce al shirk. No está permitido vender comidas o perfumes, etc., a quien se sabe que lo va a utilizar para realizar malas acciones.

Buscar la ayuda de los muertos o pedirles apoyo o llamarlos y pedirles que satisfagan nuestras necesidades y ayuden a aliviar las calamidades y traigan beneficios y protejan de las dificultades son todas formas de shirk grave que colocan a la persona fuera de los límites del Islam y lo convierten en un adorador de ídolos, porque nadie puede aliviar a una persona, excepto Allah sin socios ni compañeros. Allah dice (interpretación del significado):

“Hace que la noche suceda al día y el día a la noche, sometió el sol y la luna, cada uno corre por una órbita prefijada. Aquel es Allah, vuestro Señor [que creó todo y os lo sometió]; Suyo es el reino, pero aquellos ídolos que invocáis fuera de Él no poseen absolutamente nada, ni siquiera el pellejo de un hueso de dátil. Si los invocáis, no oyen vuestra invocación, y si oyeran no podrían responder; el Día de la Resurrección negarán que los hayáis adorado, y no te informará nadie como Allah Quien está bien informado de todo.”

 [Faatir 35:13-14] 

“Diles: Aquellos que invocáis en lugar de Allah no pueden salvaros de ningún mal ni evitarlo. Éstos buscan el medio de acercarse más a su Señor, anhelan Su misericordia y temen Su castigo. Por cierto que el castigo de tu Señor es temible.”

[al-Isra’ 17:56-57].

Origen: Sheik Salaah al-Budayr – Imán y Jatib de la Mezquita del Profeta