Viernes 21 Yumada al Ula 1446 - 22 Noviembre 2024
Español

¿Servirá escribir surat al-Zálzalah en un vaso, para que el nacimiento de un niño sea más fácil?

Pregunta

¿Es cierto que si recitamos el capítulo del Corán az-Zálzalah durante el nacimiento de un niño, lo hará más fácil? ¿Existe algún du’á o dhíkr (súplicas) que esté prescripto para facilitar el nacimiento de un niño? ¿Serán respondidas nuestras súplicas en el tiempo de su nacimiento?

Texto de la respuesta

Alabado sea Dios.

Alabado sea Allah.

 Escribir az-Zálzalah con azafrán en un vaso y otros versos que mencionan que Allah sabe lo que hay en los vientres de las mujeres, tales como los versos (traducción del significado):

“No surge ningún fruto de su cáliz, ni concibe ninguna mujer o da a luz sin que Él tenga total conocimiento de ello” (Fússilat 41:47).

“Allah bien sabe qué se está gestando en el vientre de todas las hembras, y si completará el ciclo de gestación o no, y Él asignó a todas las cosas su justa medida” (ar-Ra’d 13:8).

 Una vez hecho esto, se vierte agua en el vaso y se agita hasta que el azafrán se disuelva. Entonces se le da a beber a la mujer durante su labor de parto, una parte de ello se salpica y se unta sobre su vientre. También se pueden recitar estos versos sobre el agua, se le da de beber a ella y parte del agua se vierte en su vientre, o recitarlos sobre la mujer cuando ella experimenta los dolores de parto. Todo esto será beneficioso, por la gracia de Allah.

 Con respecto al punto específico de las súplicas (du’á)… la súplica de una mujer que está experimentando labores de parto, cuando tiene contracciones, merecen ser respondidas, porque es un momento de angustia, y Allah dijo (traducción del significado):

 “¿Acaso Quien responde al afligido cuando Le invoca, alivia los pesares y hace que vosotros os sucedáis unos a otros en la Tierra puede equipararse a quien no es capaz de hacer nada de eso?” (an-Náml 27:62).

 ¡Cuán a menudo Allah ha respondido nuestras súplicas en momentos de angustia, y nos ha mostrado una salida! Y Allah sabe más.

 Shéij Muhámmed ibn Sálih al’Uzaimín, que Allah lo preserve.

Origen: Magazín Ad-Da’wah, #1754, p. 36