Alabado sea Dios.
Las creencias de los Salaf acerca del Corán son comparables a sus creencias en los nombres y atributos de Al-lah, es decir, están basadas en lo que encontramos en el Libro de Al-lah y en el ejemplo de vida del Mensajero de Al-lah (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él). Todos sabemos que Al-lah, Glorificado y Exaltado sea, ha descrito el Sagrado Corán como Su Palabra, revelada por Él. Al-lah dijo (lo que en español se interpreta así): {Si alguno de los idólatras te pidiera protección, dale asilo para que así recapacite y escuche la Palabra de Al-lah, luego [si no reflexiona] ayúdalo a alcanzar un lugar seguro. Esto es porque son gente que no sabe} [Corán 9:6].
Indudablemente, lo que significa ‘la palabra de Al-lah’ en este verso, es el Sagrado Corán. Dijo Al-lah (lo que en español se interpreta así): {El Corán les relata a los Hijos de Israel [la respuesta] a gran parte de los asuntos sobre los que discrepaban} [Corán 27:76].
Por lo tanto, el Corán es la palabra de Al-lah tanto en su redacción como en su significado. Al-lah la pronunció y se la entregó al arcángel Gabriel, el Confiable (la paz sea con él), luego Gabriel se la reveló al Profeta Muhammad (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), para que él fuera uno de los mensajeros, y lo reveló en clara y elocuente lengua árabe.
Los Salaf creían que el Sagrado Corán había sido revelado por Al-lah al Profeta Muhammad poco a poco, en etapas, a lo largo de 23 años, de acuerdo con la sabiduría de Al-lah, Glorificado y Exaltado sea. Más aún, parte de los textos que componen la obra fueron motivados por una razón o evento específico durante el tiempo del Profeta Muhammad (que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él) y otra parte son de significado enteramente general. Una parte fue revelada para informar al Profeta y sus compañeros obre algo que había sucedido. Otra parte fue revelada para detallar las normas legales, de acuerdo con las descripciones que han hecho los eruditos sobre este tema.
Entonces, los Salaf tenían la creencia de que el Sagrado Corán provino de Él y que a Él regresará al final de los tiempos.
Queda claro también que Al-lah describe el Sagrado Corán en términos superlativos. Él lo ha descripto como sabio (hakím), como generoso (karím), como grandioso (‘adhím), y como glorioso (mayíd). Estas cualidades con las que Al-lah describió Su Libro pueden ser adquiridas por aquel que se aferra a este Libro y actúa según su guía, tanto interna como externamente. Al-lah le permitirá conocer la gloria, la grandeza, la sabiduría y el honor, que no les son concedidas a quienes ignoran este libro, por la gracia de Al-lah. Por eso convocamos a todos los musulmanes, gobernantes y gobernados, eruditos e iletrados, a aferrarse al Libro de Al-lah, tanto en público como en privado, para que puedan alcanzar la felicidad y el honor, en cualquier parte del mundo (Sheij Muhammad Ibn Al ‘Uzaimín, Fatáwa Kibar ‘Ulamá' Al Ummah, p. 45).
Y Al-lah sabe más.